¡®Un monstruo viene a verme¡¯

Conor O?Malley (Lewis MacDougall) es un chico de 13 a?os que, debido al acoso escolar que que sufre en el colegio, adem¨¢s de la grave enfermedad que padece su madre, ha desarrollado un mundo de fantas¨ªa en torno a hadas, duendes y dem¨¢s criaturas maravillosas, que le permite escapar de su rutina y superar sus miedos. A trav¨¦s de la ventana de su habitaci¨®n, el protagonista puede divisar un ¨¢rbol que se ha mantenido en pie desde hace miles de a?os. Unos minutos despu¨¦s de la medianoche, Conor despierta y se encuentra un monstruo en la ventana. Pero no es el monstruo que ¨¦l esperaba, el de la pesadilla que tiene casi todas las noches desde que su madre empez¨® el duro e inacabable tratamiento. No, este monstruo es algo diferente, y quiere lo m¨¢s peligroso de todo: la verdad. ?Podr¨¢ este incre¨ªble ¨¢rbol que ha cobrado vida en su imaginaci¨®n ayudarle a superar sus problemas?

Estoy dispuesto a compartir su angustia a condici¨®n de no sentirme manipulado, de que la m¨²sica no me agobie intentando subrayar los sentimientos. La emoci¨®n se transmite con naturalidad y fluidez Carlos Boyero

La defensa del poder del arte para sanar

Pocos directores viven por y para el cine como Juan Antonio Garc¨ªa Bayona (Barcelona, 1975), para el gran p¨²blico Juan Antonio Bayona y para sus amigos, sencillamente Jota. Esa pasi¨®n de 24 horas al d¨ªa siete d¨ªas a la semana le ha llevado a tomarse muy en serio cualquier cambio legislativo para la industria, a defender el talento de los t¨¦cnicos espa?oles con los que habitualmente trabaja y a soltar discursos como el que realiz¨® ante el entonces ministro de Educaci¨®n, Cultura y Deporte, Jos¨¦ Ignacio Wert, al recoger el Premio Nacional de Cinematograf¨ªa en 2013. En aquel momento Bayona ya estaba tramando Un monstruo viene a verme...

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¡°Todo lo que toca el dinero pierde su sustancia¡±, por Gregorio Belinch¨®n