¡®The Young Pope¡¯: Dios y el demonio
Igual que la serie de Sorrentino y Jude Law es hipn¨®tica visualmente, argumentalmente est¨¢ casi vac¨ªa
El Papa se prepara para dar su primer discurso ante los cardenales. Llevan d¨ªas esperando. Demasiados. Por fin se decide. Antes de ponerse a ello, se prepara con parsimonia. La c¨¢mara sigue al joven Papa mientras se viste a ritmo de Sexy and I know it.
Ese papa que es sexy y lo sabe ha sido creado por el director Paolo Sorrentino. The Young Pope es la serie (o m¨¢s bien, pel¨ªcula de diez horas) con la que el realizador italiano se ha pasado a la peque?a pantalla para mostrar un Vaticano turbio, lleno de intrigas y de rumores que se convierten en calumnias. El actor Jude Law es P¨ªo XIII, el centro de ese mundo, un papa joven pero radicalmente retr¨®grado, que duda de su fe pero quiere devolver al mundo el temor de Dios y volver la Iglesia al oscurantismo del pasado. No quiere mostrarse ante el p¨²blico, no quiere viajar, no quiere fotos, no quiere merchandising papal. Dales misterio y les tendr¨¢s enganchados, es su teor¨ªa.
The Young Pope te deja pegado a la pantalla, sobre todo en sus primeros cap¨ªtulos. La apuesta estil¨ªstica lo es todo. Con cierto aire on¨ªrico algo pasado de rosca en algunas ocasiones, Sorrentino refleja un mundo muy personal, donde el lado est¨¦tico es una parte fundamental. Se deleita en lo visual y tambi¨¦n en unos di¨¢logos cuidados al mil¨ªmetro con bastante dosis de humor, s¨¢tira y cr¨ªtica. La banda sonora tambi¨¦n es fundamental en esta producci¨®n que se puede ver en HBO Espa?a. Una creaci¨®n muy personal con momentos geniales y otros, demasiados, que son la nada m¨¢s absoluta.
Porque igual que The Young Pope es hipn¨®tica visualmente, argumentalmente est¨¢ casi vac¨ªa. Una vez que se ha planteado la tesis, se ha mostrado ese Vaticano por dentro y se han presentado los personajes, no hay mucho m¨¢s all¨¢. Quiz¨¢ porque no es una serie, es otra cosa. La historia no fluye y la resoluci¨®n de algunos de los conflictos es demasiado s¨²bita. Por otro lado, Jude Law parece perfecto para el papel de P¨ªo XIII, con unos aires de superioridad y una mirada c¨ªnica que contrastan con la imagen del supuesto santo que es. Porque, en realidad, Dios y el demonio est¨¢n m¨¢s cerca de lo que parece.
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