El cine quinqui del siglo XXI que triunfa en YouTube

Est¨¢n las drogas, las navajas, las prostitutas, el barrio, el alcohol, las mafias del Este, la chuler¨ªa que se acerca a la amenaza de muerte. Y est¨¢n las rumbas: "Pasa el canutito, ?pero ya!". "Con cada cal¨¢, yo toco el cielo". "Yo me drogo, ?qu¨¦ m¨¢s da? Es que no puedo parar". No hay cine quinqui sin rumba. Y el neoquinqui no iba a ser menos. Criando ratas, de Carlos Salado, es su ariete, y ayer super¨®, justo a los dos meses de que sus creadores lo colgaran en YouTube, el mill¨®n de visionados en la plataforma digital de v¨ªdeos. Su director ha estado seis de sus 30 a?os dedicados a su primer largometraje. Lo ha escrito, montado, dirigido y musicado -las rumbas tambi¨¦n son suyas- con 5.000 euros de presupuesto (gastados en dos c¨¢maras y el equipo de sonido), aportados por amigos y conocidos, y con la producci¨®n de su amigo y compa?ero de viaje cinematogr¨¢fico Rub¨¦n Ferr¨¢ndez. "Ha sido un esfuerzo tit¨¢nico, casi como un hijo, pero me sali¨® rebelde", asegura Salado. "Y ese mill¨®n de visitas en YouTube es la recompensa. Eso y la gente que nos da las gracias por el filme".

Criando ratas se desarrolla en los barrios marginales de Alicante, pero ese Alicante es sustituible por Sevilla, Barcelona, Madrid, M¨¢laga, por cualquier ciudad espa?ola. Su protagonista, Ram¨®n Guerrero, m¨¢s conocido como Cristo, engancha desde el primer plano. "Le conozco desde que ¨¦ramos ni?os", cuenta el cineasta. "Siempre fue carism¨¢tico. Y famoso en medio Alicante. Tiene un don de gentes brutal. Con 13 a?os ya lideraba a los de 16, y solo se le escuchaba a ¨¦l". Salado le perdi¨® la pista mientras estudiaba Comunicaci¨®n Audiovisual. Cuando se licenci¨® y empez¨® su carrera profesional en la publicidad, recuper¨® su vieja idea de rodar esta pel¨ªcula. "Desde que empec¨¦ a estudiar cine, la idea estaba en mi coraz¨®n. Soy un fan¨¢tico del cine quinqui, del cine m¨¢s vanguardista e independiente, muy realista, que se rueda a pie de calle, de forma veloz y veraz. Ah¨ª est¨¢n las pel¨ªculas de Eloy de la Iglesia, Carlos Saura, Jos¨¦ Antonio de la Loma...". Salado apunta que el realismo no significa ser cutre. "Por encima de todo soy artista. Y a pesar de cierto tono documental, hay una interpretaci¨®n detr¨¢s. Y hay que hacerlo bello, con cierta reflexi¨®n de fondo, con cuidado con la narrativa y el ritmo".

Cristo estuvo un a?o en la c¨¢rcel. El rodaje prosigui¨® con las otras historias. A la salida, hab¨ªa ganado 12 kilos. ¡°Y tuvimos que esperar otro poco¡±. Hoy, Guerrero ha sido padre y trabaja en la construcci¨®n. ¡°La selecci¨®n de actores fue fundamental. Dur¨® meses, pateamos los barrios. Cogimos chavales de la calle, que destilaran verdad, que conocieran el narcotr¨¢fico, con potencial. Cuando les pusimos delante de la c¨¢mara empezaron a hacer din¨¢micas de grupo, a desarrollar su talento. El rodaje, pese a los obst¨¢culos y los problemas, ha sido muy divertido¡±. Guerrero trajo a uno de sus amigos, Mauricio Manzano, Mauri en el filme, ¡°un Chaplin quinqui¡±. En una secuencia asombrosa, Cristo le da a Mauri un bofet¨®n brutal. ¡°Es que Ram¨®n siempre ha dado las tortas as¨ª¡±. O el Pistolita, un ni?o de 12 a?os, de enorme desparpajo: ¡°?l habla as¨ª¡±.

?Le gusta a Salado la etiqueta de cine neoquinqui? ¡°?Claro! La diferencia fundamental con el de los ochenta es que no nos posicionamos, ni se dan lecciones de moral. El cine no debe solo entretener, sino contar las cosas que est¨¢n, y mostrarlas sin edulcorar. Entiendo que es una industria complicada, para ganar dinero, aunque hay otros directores cercanos a mi manera de entender el cine como Carlos Vermut o Fernando Franco y La herida. El arte tiene que remover entra?as¡±.