Roman Polanski, el eterno juguet¨®n

Roman Polanski era el ¨²ltimo nombre que faltaba por estrenar pel¨ªcula en esta edici¨®n de Cannes. A sus 83 a?os no ha perdido en persona el humor ni en pantalla la capacidad para mantener en tensi¨®n al espectador, que espera que en cualquier momento la trama estalle. En buena parte de ese talento se cimenta la adaptaci¨®n de D¡¯Apr¨¨s una histoire vraie (Basada en hechos reales), una novela de Delphine de Vigan, que se usa a s¨ª misma en una historia con aromas a Misery: una fan (en la pantalla, Eva Green con su mirada turbia) entra en contacto con Delphine (Emmanuelle Seigner en el cine) y poco a poco fagocita la vida de la escritura, en un claro ejercicio de autoficci¨®n, g¨¦nero tan de moda. Fue Seigner, actriz y esposa de Polanski, la que ley¨® el libro (en Espa?a est¨¢ editado por Anagrama) y pens¨® que ah¨ª hab¨ªa un gran material para el cineasta, que mientras sigue intentado realizar su drama sobre el caso Dreyfus decidi¨® dirigir este thriller.

En Cannes, en la presentaci¨®n de este thriller fuera de la competici¨®n a Polanski le acompa?aron Seigner, Green (que habitualmente no trabaja en su franc¨¦s materno), el compositor Alexandre Desplat, el coguionista Olivier Assayas, el productor Wassim B¨¦ji y la novelista Delphine de Vigan. Un cartel de lujo para un primer espada como Polanski que ante la prensa se ha mostrado igual de chispeante en ingl¨¦s y franc¨¦s, y capaz de vacilar hasta a su pareja. Para empezar, ha reconocido que le faltaba en su curr¨ªculo un thriller como este, con tensi¨®n entre dos mujeres: ¡°Sent¨ª que en la novela resonaban ecos de mis primeros trabajos, y que por tanto estaba en el lugar adecuado¡±. S¨ª recalc¨® que Assayas y ¨¦l no se han alejado del libro: ¡°Yo he adaptado antes obras de teatro y libros, y siempre he procurado no irme lejos del material original. De ni?o, cuando ve¨ªa adaptaciones en pantalla con nuevos personajes o l¨ªneas argumentales, me sent¨ªa decepcionado¡±.

"La gente no va a las salas porque haya mejor proyecci¨®n que en su casa, sino por disfrutar de un espect¨¢culo en com¨²n"

En el thriller, Elle (as¨ª se llama el personaje de Green) escribe para otros, es un negro, una profesi¨®n que Polanski ya ilustr¨® en El escritor. ¡°Conozco buenos escritores en ese cometido, y es una labor interesante. ?Es un cineasta un negro de la vida de otros? No lo hab¨ªa pensado antes, pero me quedo con la idea para otras entrevistas¡±, ha respondido sobre el paralelismo entre directores de cine y esos redactores. Sobre su relaci¨®n profesional con su esposa, tras apuntar Seigner que no es su musa, sino que ¨¦l le inspira a ella, el aludido se lanz¨®: ¡°Tenemos una relaci¨®n muy profesional. Lo complicado es volver a casa despu¨¦s de un d¨ªa duro de trabajo. Porque a m¨ª me gusta dejar las cosas atr¨¢s y ella no para de preguntarme por su trabajo [Seigner hace un gesto de sorpresa]. Ella es una profesional como el resto¡±.

Hace poco se reedit¨® en Espa?a, como en el resto del mundo, la autobiograf¨ªa que Polanski escribi¨® en 1985. Ah¨ª hay material para una gran pel¨ªcula¡­ pero no ser¨¢ ¨¦l quien la haga. ¡°Cuando trabajo en un guion no pienso en mi propia vida como elemento del cine¡±, cort¨® r¨¢pido. Y s¨ª desarroll¨® m¨¢s su visi¨®n del futuro del cine a cuenta de la pol¨¦mica Netflix-Festival de Cannes. ¡°Lo de las plataformas y los cert¨¢menes est¨¢ m¨¢s all¨¢ de lo que yo puedo analizar. Pero s¨ª s¨¦ que no son una amenaza para el cine: la gente no va a las salas porque haya mejor sonido o proyecci¨®n que en su casa, sino porque es una experiencia sentarte con otra gente a ver una pel¨ªcula, disfrutar de un espect¨¢culo en com¨²n. Recuerdo cuando salieron los walkman, el miedo que hab¨ªa en la m¨²sica, y no por ello se acabaron los conciertos. No es lo mismo ver Borat solo en casa o rodeado de un mont¨®n de gente ri¨¦ndose¡±.

"Hay un ansia por la verdad, que no se corresponde con lo que nos llega desde los medios de comunicaci¨®n: lo que era cierto ayer, es completamente falso hoy"

Polanski a¨²n tuvo tiempo para confirmar que en su vida ha conocido a gente como Elle en fiestas y ha huido de ella, y a reflexionar sobre la tecnolog¨ªa: ¡°No tengo Facebook, y me mantendr¨¦ lejos de ¨¦l. Antes ten¨ªa muchos cacharros tecnol¨®gicos, y los voy tirando por esto [ense?a su m¨®vil], que cada d¨ªa es m¨¢s completo¡±. Y explic¨® que el actual bombardeo tecnol¨®gico interfiere con la verdad en los tiempos actuales. ¡°No puede confiar en la fotograf¨ªa como documento de la realidad porque se puede trucar en minutos. Hay un ansia por la verdad que no se corresponde con lo que nos llega desde los medios de comunicaci¨®n: lo que era cierto ayer, es completamente falso hoy¡±. Y en un requiebro muy Polanski, el cineasta le vacil¨® a un periodista italiano que le pregunt¨® si era m¨¢s f¨¢cil dirigir a una mujer o vivir con ella: ¡°No s¨¦ c¨®mo alguien tan inteligente puede hacer una pregunta tan est¨²pida. ?Es evidente que es m¨¢s f¨¢cil trabajar que vivir con ellas!¡±. Y el geniecillo se fue a otra parte.