El club activista

Est¨¢n entre la plataforma creativa y el colectivo art¨ªstico, con ideas iluminadoras y rechazo a la opacidad. Son artistas, escritores, cr¨ªticos y fil¨®sofos unidos bajo un mismo esp¨ªritu cr¨ªtico, el de fusionar la teor¨ªa pol¨ªtica, el arte y el activismo. Lo dejaron claro con su nombre, ?Chto Delat, acr¨®nimo de What is to be done?, que remite al publicado por Lenin. Nunca revelan cu¨¢ntos son y los componentes entran y salen seg¨²n el proyecto, aunque cuatro de ellos, Nina Gasteva, Nikolay Oleynikov, Olga Egorova y Dmitry Vilensky, siempre est¨¢n en el epicentro desde que se unieran en 2003 en su n¨²cleo vital, San Petersburgo. ¡°El colectivo es una asamblea de singularidades basadas en los principios de delegaci¨®n, generosidad, verdad y amor¡±, dicen a modo coral desde Kassel, donde hoy inauguran la Documenta 14 y desde donde celebran su retrospectiva abierta hace s¨®lo unos d¨ªas en el CAAC de Sevilla. ¡°Nos hemos centrado en obras que tienen una relaci¨®n con la Teolog¨ªa de la Liberaci¨®n y el espacio del claustro del monasterio de la Cartuja debe entenderse como un lugar ocupado por una fuerza que exige otras formas de creencias y justicia social¡±, explican. Advierten, en el t¨ªtulo, que no hay certezas: Cuando pens¨¢bamos que ten¨ªamos todas las respuestas, la vida cambi¨® las preguntas.

Aunque en este paraguas mental parece estar todo muy claro. Hablan de lucha pol¨ªtica, de trabajo digno, de emancipaci¨®n, de compromiso: ¡°El arte aut¨¦ntico desautoriza la conciencia, primero del artista y luego la del espectador. Necesitamos recuperar el arte y sus instituciones como un verdadero espacio p¨²blico. Lo primero que nos motiva es el rechazo de todas las formas de opresi¨®n, la alienaci¨®n artificial de las personas y la explotaci¨®n¡±.

La manera con la que enfocan sus proyectos est¨¢ relacionada con autores como Brecht, Godard o Fassbinder, con el teatro, el v¨ªdeo, las instalaciones, seminarios, acciones p¨²blicas y programas de radio. Tambi¨¦n editan un peri¨®dico, en ingl¨¦s y ruso, y han creado una Escuela de Arte Comprometido. ?Hay un lugar del arte revolucionario? ¡°Un mundo sin el dominio de la ganancia y la explotaci¨®n que existe ya en la micropol¨ªtica y las microeconom¨ªas de las relaciones humanas. Debemos revelar este alegre espacio de vida¡±, dicen. Hay una grieta en todo y as¨ª es como entra la luz, cantaba Leonard Cohen.

¡®Chto Delat¡¯. CAAC. Sevilla. Hasta el 1 de octubre.