Nahui Olin, la musa olvidada
Gerardo Tort filma una pel¨ªcula sobre la artista mexicana, interpretada por Irene Azuela
Hace algunos a?os, Jos¨¦ Emilio Pacheco tuvo una visi¨®n. El poeta vaticin¨® una ¨¦poca donde los p¨®sters de Frida Kahlo iban a ser arrancados de las paredes. Las im¨¢genes de la afamada pintora mexicana ser¨ªan sustituidas por las de Nahui Olin. "La nahuiman¨ªa reemplazar¨¢ a la fridoman¨ªa. Habr¨¢ postales, camisetas y gorras con las iniciales N.O., l¨ªneas de perfumes y productos de belleza", aventur¨® el Premio Cervantes.
El siglo XX muri¨® sin hacer justicia a Carmen Mondrag¨®n. Hoy solo un pu?ado de acad¨¦micos y exc¨¦ntricos sabe que Mondrag¨®n fue rebautizada por Gerardo Murillo, conocido como Dr. Atl, con aquel nombre que hac¨ªa referencia al cuarto movimiento del sol de los mexicas. El volc¨¢nico pintor dio un nuevo nombre a su amante, una mujer que luch¨® durante 85 a?os para definirse a s¨ª misma. "Nahui Olin deber¨ªa ser una figura de culto. Es m¨¢s importante que Frida Kahlo", dice Jaime Romand¨ªa, productor de Nahui, una pel¨ªcula sobre la vida de esta artista que podr¨¢ verse en M¨¦xico en agosto de 2018.
"Fue una mujer que se atrevi¨® a brincar al vac¨ªo", dijo el director Gerardo Tort, que dirige su primer largometraje desde 2009 despu¨¦s de hacer series hist¨®ricas para la televisi¨®n. El equipo inici¨® el rodaje esta semana en la Ciudad de M¨¦xico. El puerto de Veracruz tambi¨¦n servir¨¢ de escenario a esta historia. Tort film¨® el martes una peque?a secuencia con su hero¨ªna, protagonizada por Irene Azuela (El hotel de los secretos, Las oscuras primaveras). La secuencia se desarroll¨® en el Teatro del Pueblo, un hermoso auditorio enclavado en medio de un mercado en el centro de la capital mexicana. La construcci¨®n refleja los valores e ideales de M¨¦xico en los a?os 30. El sitio est¨¢ decorado con murales de disc¨ªpulos de Diego Rivera, cargados de socialismo y cr¨ªticas al racismo y la opresi¨®n.
Carmen Mondrag¨®n naci¨® en 1893 en el barrio capitalino de Tacubaya. Fue hija de Manuel Mondrag¨®n, un importante general de Porfirio D¨ªaz que tuvo un papel destacado en la Decena Tr¨¢gica, el golpe militar de 1913 contra el presidente Francisco Madero, que se hab¨ªa opuesto al dictador. Antes del arranque del siglo XX, el militar se llev¨® a su familia a Francia cuando Carmen ten¨ªa tres a?os. En Par¨ªs perfeccion¨® un rifle semi autom¨¢tico de su invenci¨®n. La peque?a Carmen se cri¨® en Europa hasta los 12 a?os.
Tort y la guionista Marina Stavenhagen se apresuran en dejar claro que Nahui no es una biopic. El t¨¦rmino utilizado para las pel¨ªculas biogr¨¢ficas es usado por desd¨¦n por la pareja creativa. ¡°No es una pel¨ªcula cronol¨®gica en la que se retrate toda su vida, pero Nahui vivi¨® hasta muy mayor y muri¨® muy abandonada por todos. Casi en la indigencia. Fue muy triste. Lo que quisimos explorar es cu¨¢ntas Nahui hay dentro de esta mujer que muri¨® a los 86 a?os¡±, cuenta Stavenhagen, que retom¨® una idea original de Miguel Bonilla.
La pasi¨®n fue el motor constante en la vida de Mondrag¨®n. A los 19 a?os abandon¨® la casa de sus padres para casarse con el pintor Manuel Rodr¨ªguez Lozano, integrante del movimiento conocido como Los Contempor¨¢neos. Esa relaci¨®n la introdujo inmediatamente en el mundo del arte. Figur¨® en varios de los murales de Diego Rivera. En uno encarn¨® a la diosa de la poes¨ªa er¨®tica y en los de Palacio Nacional aparece como una mujer de la alta sociedad elegantemente ataviada. Tambi¨¦n fue modelo para Roberto Montenegro, Rosario Cabrera y para el fot¨®grafo californiano Edward Weston, entre otros.
Pero todo cambi¨® en 1921, cuando Mondrag¨®n acudi¨® a una exposici¨®n de Dr. Atl. El flechazo fue uno de esos que solo son cre¨ªbles s¨ª son escritos por la pluma de un novelista. ?l ten¨ªa 47 a?os y ella 29. La atracci¨®n fue tan fuerte que oblig¨® a Mondrag¨®n a dejar a su esposo para mudarse con Murillo a un convento del centro de la Ciudad de M¨¦xico. A sugerencia de Murillo, Carmen dio la espalda al abolengo e influencia de su apellido paterno para abrazar las ra¨ªces mexicas. Carmen se convirti¨® en Nahui Olin en 1922, el mismo a?o en que su padre mor¨ªa desterrado en San Sebasti¨¢n.
Quisimos explorar cu¨¢ntas Nahui hay dentro de esta mujer que muri¨® a los 86 a?os Marina Stavenhagen, guionista de 'Nahui'
Julio Bracho interpreta a Dr. Atl. Jaime Romand¨ªa, productor en Cadareyta Films, asegura que este actor dio un excelente casting. ¡°Nos gust¨® mucho la qu¨ªmica que tuvo con Irene¡±, asegura Romand¨ªa, que es conocido por producir tambi¨¦n las cintas del laureado Carlos Reygadas. Tessa Ia interpreta a Nahui en su juventud y Delia Casanova es la artista y poetisa en sus ¨²ltimos a?os.
La relaci¨®n entre Nahui Olin y Dr. Atl fue la de un romance t¨®rrido y extremadamente intenso que se extendi¨® por cinco a?os. Pero Murillo nunca fue un hombre fiel y Mondrag¨®n no pudo controlar los celos de peque?a ni?a mimada educada en el Colegio Franc¨¦s de San Cosme. Esta explosiva combinaci¨®n dio lugar a un desgaste que pronto se tradujo en escandalosas escenas de gritos y amargos reproches p¨²blicos que se convirtieron en la comidilla para la ¨¦lite cultural de la ¨¦poca.
En una memoria, Dr. Atl cont¨® la vez que Mondrag¨®n puso fin a una pelea rompi¨¦ndole en la cabeza un frasco de pintura. Tras sentirse exhibida, Nahui Olin decidi¨® poner fin a la relaci¨®n dejando una carta pegada en la puerta de la casa del pintor. En ella aseguraba haberle sido infiel a su pareja con al menos 20 hombres. Y para rematar, le anunci¨® que lo dejaba por un tenor italiano.
Los 20 fueron los a?os m¨¢s fruct¨ªferos para Mondrag¨®n. Fue la d¨¦cada en la que se descubri¨® a partir del arte y el placer. Escribi¨® e hizo varios dibujos y pinturas. Muchos de ellos autorretratos desnudos y escenas sugerentes en los brazos de varios hombres. El erotismo fue el eje de su obra. ¡°Estaba muy orgullosa de su cuerpo y de su sexualidad¡±, explica Stavenhagen.
Aunque los cineastas abordar¨¢n esta relaci¨®n formativa/destructiva con Dr. Atl, tambi¨¦n prometen no dejar a un lado el romance m¨¢s importante de Nahui Olin. Este fue con el capit¨¢n Eugenio Agacino, un militar que trabajaba en la Compa?¨ªa Transatl¨¢ntica Espa?ola. Este amor maduro ¡ªella lo conoci¨® cuando ten¨ªa 40¡ª la llev¨® al mar de Veracruz y La Habana. Y fue el mar quien se lo arrebat¨® con una tragedia. Tras la muerte del capit¨¢n, Nahui Olin se retir¨® de la vida p¨²blica y se refugi¨® en una mansi¨®n de Tacubaya a pintar con sus gatos como ¨²nica compa?¨ªa.
La vida de Olin, seg¨²n Tort, ¡°fue un frentazo para la sociedad machista¡±. Los cineastas tienen ahora la compleja tarea de reducir una vida de pel¨ªcula a menos de dos horas con un presupuesto de 1.7 millones de d¨®lares. Todo para reivindicar una vida que ha sido aplastada por la pesada piedra del olvido.
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