El Cervantes abrir¨¢ centros en Suiza, Senegal y Corea del Sur
El ministro de Exteriores, Alfonso Dastis, anuncia m¨¢s dinero en presencia de la reina Letizia pero nadie menciona apenas la ley de independencia
Una discreta euforia ¨Csi eso es posible- se respir¨® este lunes en la reuni¨®n de directores del Instituto Cervantes en M¨¢laga, seg¨²n los presentes. Fue cuando el ministro de Exteriores, Alfonso Dastis, anunci¨® que har¨ªan todo lo posible por aumentar el presupuesto del mismo. Recibi¨® un aplauso arrancado a una prolongada falta de costumbre. En los ¨²ltimos a?os, los responsables de la instituci¨®n se hab¨ªan aclimatado a los recortes. De ah¨ª la reacci¨®n. La siguiente pregunta era cu¨¢nto¡ Pero no hubo respuesta.
Los responsables del instituto aseguran a EL PA?S que han pedido un incremento de cinco millones de euros a los 64 que aporta el Estado de un total de 120. Pero Dastis evit¨® dar ninguna cifra. Juan Manuel Bonet, actual director, sabe en cambio a qu¨¦ va ir destinado ese dinero. Entre otras cosas, para abrir a corto plazo tres nuevos centros. Es otra noticia inusual en la ¨²ltima d¨¦cada. No se hab¨ªan abierto nuevas sedes en a?os de crisis y mengua presupuestaria. As¨ª que el anuncio de que el Cervantes se instalar¨¢ en Suiza, Senegal y Corea del Sur, fue todo un cambio de paradigma.
¡°El de Suiza ir¨¢ con toda seguridad a Z¨²rich. Era un hueco en el centro de Europa muy llamativo. Dakar entra dentro de la estrategia africana. Y Se¨²l forma parte de la expansi¨®n hacia Asia y el Pac¨ªfico. La gran mayor¨ªa de institutos culturales europeos miran hacia all¨¢ y nosotros no podemos dejar de estar presentes¡±, afirma Bonet a EL PA?S.
Lejos de los dem¨¢s institutos europeos
Por el momento, todos han tomado nota de la promesa de Alfonso Dastis, ministro de Exteriores, en la reuni¨®n de directores del Cervantes que tiene lugar esta semana en M¨¢laga. Su promesa de luchar por m¨¢s dinero ¨Csin especificar cuanto- ha sido bienvenida. Aunque para llegar al nivel del resto de institutos europeos, queda un largo trecho. El Cervantes es el m¨¢s pobre de los de su entorno, con sus 120 millones de euros frente a los 800 del British Council o los 300 del Goethe alem¨¢n, por ejemplo. Vive con la paradoja de ser, junto al ingl¨¦s, el idioma m¨¢s demandado del mundo, ante el desprecio de sus autoridades por dotarle de medios realmente competitivos en el mercado global. El presupuesto consta de un 46% de recursos propios y un 54% de aportaci¨®n estatal. Demasiado poco para tan grandes promesas y palabras que no llegan a cumplirse.
Los cinco millones pedidos servir¨¢n tambi¨¦n para los encargos que vienen de los ministerios de Exteriores y Educaci¨®n y Cultura. ¡°Fui nombrado con un mandato¡±, afirma Bonet. ¡°Me pidieron aumentar el perfil de actividades del instituto. Hemos dise?ado un programa de choque cultural, aunque la palabra resulte rimbombante y eso, obviamente, cuesta dinero¡±.
Para esa estrategia, Bonet cuenta con un nuevo responsable en el ¨¢rea de Cultura, el poeta y gestor asturiano, Mart¨ªn L¨®pez-Vega. Es uno de los 30 cambios que ha acometido Bonet en los ¨²ltimos meses. Incluyen adem¨¢s a un nuevo responsable de an¨¢lisis y estrategia, el diplom¨¢tico Alfonso Lucini.
Se han producido 29 nuevos nombramientos en centros: 18 de ellos se deben a un cambio interno en el tablero, pero 11, entre los que se encuentran Londres, Par¨ªs, Roma o R¨ªo de Janeiro ¡ªfundamentales en la presencia global¡ª son totalmente nuevos. Entre los perfiles de la etapa Bonet, se han elegido principalmente acad¨¦micos y escritores con experiencia en la gesti¨®n cultural. Y dentro de los escritores, poetas. Un g¨¦nero de la preferencia del nuevo responsable. Es el caso de L¨®pez-Vega y Lucini, pero tambi¨¦n de nuevos directores, como Juan Carlos Reche (Roma), que se unen a Luisa Castro (Burdeos) o Beatriz Hernanz (Palermo), entre otros.
La estrategia de expansi¨®n no parar¨¢ en los tres centros anunciados. La prioridad sigue siendo Estados Unidos. A las tres sedes de Nueva York, Chicago, Alburquerque y al observatorio del espa?ol en Harvard, Bonet quiere a?adir otra en Washington y algunas en el entorno del Pac¨ªfico, principalmente en California. Los motivos hoy no son meramente ling¨¹¨ªsticos o de estrechos lazos culturales. A ellos se une la necesidad de formar junto a pa¨ªses como M¨¦xico un frente que aten¨²e la preocupante deriva xen¨®foba en el norte. ¡°En ese gran pa¨ªs, donde lo hisp¨¢nico est¨¢ tan presente y donde a la vista est¨¢ que existen recientes turbulencias de car¨¢cter chauvinista, tambi¨¦n deber¨ªamos abrir centros en la capital y en la Costa Oeste¡±, afirma Bonet. ¡°Hay muchos m¨¢s pa¨ªses que desean nuestra presencia, pero, por el momento, estas son nuestras prioridades, siempre en consonancia con las del ministerio al que estamos adscritos¡±, a?ade el director.
De lo que apenas se habl¨® en el primer d¨ªa de reuni¨®n fue de la ley de autonom¨ªa. Fue la petici¨®n m¨¢s insistente por parte del anterior director, V¨ªctor Garc¨ªa de la Concha. Una ley que asegure la independencia de los vaivenes pol¨ªticos y la estrategia alejada de cambios bruscos tras las elecciones. Bonet ha preferido posponer esa urgencia. Asegura que las aguas bajan calmadas hoy entre los dos ministerios que habitualmente pugnan por el control del Cervantes: Exteriores y Cultura.
Entre Dastis e ??igo M¨¦ndez de Vigo parece existir entendimiento dentro del actual gobierno. Pero la batalla se volver¨¢ a presentar y por ello m¨¢s vale actuar con prevenci¨®n y una ley que garantice no s¨®lo autonom¨ªa pol¨ªtica, sino tambi¨¦n de recursos propios.
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