As¨ª rod¨® Bu?uel la maldita ¡®Viridiana¡¯
Por primera vez se exponen las fotos que tom¨® Ram¨®n Masats de la filmaci¨®n de la pel¨ªcula que gan¨® la Palma de Oro y conden¨® el Vaticano
Fueron solo dos d¨ªas, pero el fot¨®grafo Ram¨®n Masats, entonces un joven que quer¨ªa abrirse paso en Madrid, fue un intruso permitido en el rodaje de una de las pel¨ªculas m¨¢s importantes de la historia del cine espa?ol, Viridiana, de Luis Bu?uel. Masats (Caldes de Montbui, Barcelona, 1931) tuvo la suerte de pasearse por la filmaci¨®n en exteriores del filme, protagonizado por Silvia Pinal, Fernando Rey y Francisco Rabal, y retratar al cineasta de Calanda con su camisa blanca y boina, meditabundo mientras fumaba, dando ¨®rdenes a los actores o con el guion en sus rodillas, como si lo acunara. Por primera vez se exponen 35 fotograf¨ªas, pr¨¢cticamente todas in¨¦ditas, tomadas por Masats, en una exposici¨®n en el Instituto Aragon¨¦s de Arte y Cultura Contempor¨¢neos (IAACC) Pablo Serrano, en Zaragoza, hasta el 3 de septiembre. La muestra est¨¢ producida por el Gobierno de Arag¨®n.
El rodaje de la ¨²nica pel¨ªcula espa?ola premiada con la Palma de Oro del Festival de Cannes hab¨ªa empezado en estudio el 4 de febrero de 1961. Masats, gracias a su amistad con el cineasta Carlos Saura y su hermano Antonio, pintor; fue invitado, a primeros de marzo, a una finca a las afueras de Madrid, donde trabajaba el equipo de Viridiana. "No llegamos a hablar. ?l no me dec¨ªa nada, pero de vez en cuando se le escapaba una miradita...", recuerda Masats por tel¨¦fono. "Hab¨ªa una cierta reticencia a que estuviera all¨ª un individuo que no era del staff, pero no me puso ning¨²n problema, y pude hacer las fotos para un reportaje que yo hab¨ªa propuesto a la revista Gaceta Ilustrada".?
"Ram¨®n se centr¨® m¨¢s en Bu?uel que en el rodaje en s¨ª¡±, dice Antonio Ans¨®n, comisario, junto a Amparo Mart¨ªnez, de la exposici¨®n Masats / Bu?uel en Viridiana, que recalar¨¢ en Teruel, Huesca y Calanda, entre otros lugares.
El fot¨®grafo catal¨¢n, premio Nacional en 2004, dej¨® de lado aquellas fotos hasta hace cuatro a?os, con motivo de la edici¨®n de un libro coordinado por Amparo Mart¨ªnez, titulado La Espa?a de Viridiana, de Prensas Universitarias de Zaragoza. Esta profesora de la Historia del Cine en la Universidad de Zaragoza contact¨® con ¨¦l y descubri¨®, boquiabierta, que ten¨ªa "guardados cuatro rollos, un centenar de fotos, de las que se muestran 35", explica Mart¨ªnez.
Los testimonios del rodaje recuerdan a un Bu?uel educado. "Era atent¨ªsimo, me fij¨¦ en lo amable que era, en c¨®mo trataba a los actores, incluidos los secundarios, se re¨ªa mucho con ellos", rememora el fot¨®grafo. Para quitarse el fr¨ªo madrile?o de marzo, Bu?uel echaba mano de vez en cuando de un termo que conten¨ªa lo que el equipo hab¨ªa bautizado como bu?ueloni, "un dry Martini hecho a su medida", agrega.
Mart¨ªnez subraya que el director "era muy disciplinado y respetuoso con los horarios". Carlos Saura destac¨® del rodaje que ¡°el guion estaba escrito con una minuciosidad impresionante". "Todo, incluso los movimientos de c¨¢mara, estaba dibujado o escrito a m¨¢quina". Mientras que la actriz mexicana Silvia Pinal, que por primera vez se pon¨ªa a las ¨®rdenes de Bu?uel, declar¨®: "Don Luis nos escuchaba y hablaba con nosotros, pero al final hac¨ªamos lo que ¨¦l quer¨ªa. Antes de empezar el primer d¨ªa de filmaci¨®n, ya ten¨ªa la pel¨ªcula en la cabeza".
Era la meticulosidad de un Bu?uel que hab¨ªa vuelto a Espa?a tras m¨¢s de 20 a?os de exilio, y al que se ve en las im¨¢genes a veces absorto, otras preparando las tomas con sus ayudantes, o de cara a la actriz Lola Gaos mientras ajusta el encuadre con sus manos¡ Todo ello lejos del hurac¨¢n que desat¨® el filme tras su exhibici¨®n en Cannes. La pel¨ªcula, basada en una novela de Gald¨®s, aborda la relaci¨®n entre una novicia (Pinal) y su t¨ªo (Rey), obsesionado con ella por el parecido con su difunta esposa.
El d¨ªa que hab¨ªa que recoger la Palma de Oro, Bu?uel estaba enfermo en Par¨ªs, as¨ª que sus amigos el torero Luis MIguel Domingu¨ªn y Juan Antonio Bardem convencieron al director general de Cinematograf¨ªa, Jos¨¦ Manuel Mu?oz Font¨¢n, para que lo hiciera. "Cuando Mu?oz Font¨¢n lleg¨® a Madrid, el ministro de Informaci¨®n y Turismo, Gabriel Arias Salgado, le cit¨® en su despacho y le destituy¨®", explica Mart¨ªnez. La polvareda lleg¨® hasta Roma. L'Osservatore Romano, peri¨®dico oficioso del Vaticano, calific¨® de "blasfema" la pel¨ªcula. Como Viridiana era una coproducci¨®n hispanomexicana se la elimin¨® de la filmograf¨ªa espa?ola para que no fuera exhibida. No se autoriz¨® su proyecci¨®n hasta el 9 de abril de 1977, el d¨ªa en que el Gobierno de Adolfo Su¨¢rez legaliz¨® el Partido Comunista de Espa?a. En algunas de la im¨¢genes que ahora pueden verse se aprecia el gesto preocupado de Bu?uel: quiz¨¢s barruntaba que estaba fabricado una bomba cinematogr¨¢fica que le iba a estallar al franquismo.
Con Anthony Mann y Nicholas Ray
Viridiana no fue la ¨²nica pel¨ªcula que fotografi¨® Ram¨®n Masats. El Cid y La ca¨ªda del imperio romano, ambas de Anthony Mann, y 55 d¨ªas en Pek¨ªn, de Nicholas Ray, tambi¨¦n le tuvieron como infiltrado. Adem¨¢s de libros fundamentales en la historia de la fotograf¨ªa espa?ola, como Sanfermines, Neutral Corner (con textos de Ignacio Aldecoa) y Viejas historias de Castilla La Vieja (sobre la obra de Miguel Delibes), Masats prob¨® con la otra c¨¢mara. A mediados de los sesenta dirigi¨® documentales y series para TVE, como Si las piedras hablaran (sobre personajes y hechos hist¨®ricos espa?oles) o Los r¨ªos, as¨ª como la inclasificable pel¨ªcula Topical spanish, con guion del humorista Chumy Ch¨²mez. Hoy, sus fotos est¨¢n en el Museo Reina Sof¨ªa, de Madrid, la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y el Centro Andaluz de Arte Contempor¨¢neo, entre otros espacios.
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