¡®I Love Dick¡¯, obsesi¨®n sexual
Una serie muy rara, la historia de una obsesi¨®n y tambi¨¦n una reflexi¨®n sobre el arte y sobre el sexo desde el punto de vista femenino
I Love Dick (Amazon Prime Video) es la historia de una obsesi¨®n, la de la protagonista con Dick, un artista equipado con atuendo vaquero, aire solitario y f¨ªsico de Kevin Bacon, el tipo duro que se mete en la cabeza y en las fantas¨ªas de Chris (Kathryn Hahn), una artista que llega acompa?ando a su marido a la comunidad de Marfa, Texas. Esa obsesi¨®n, que terminar¨¢ contagiando y afectando al marido, Sylvere (Griffin Dunne), se refleja en las cartas que ella escribe a ese idealizado objeto sexual y sirve para agitar la tranquila y mon¨®tona vida de la pareja que, de paso, provocar¨¢ un terremoto en la vida de la peque?a comunidad.
I Love Dick es rara. Muy rara. Es de esas series que no son para todos. Es la historia de una obsesi¨®n, s¨ª, pero tambi¨¦n una reflexi¨®n sobre el arte y sobre el sexo desde el punto de vista femenino. Con un argumento muy sencillo y pocos personajes, la serie, cuyo t¨ªtulo juega con el doble sentido de "Dick" como abreviatura de Richard y como t¨¦rmino para referirse coloquialmente en ingl¨¦s al miembro viril, traslada al espectador la obsesi¨®n de sus protagonistas para, si se consigue caer en sus redes, enamorarse de su locura.
Jill Soloway, creadora de Transparent y una de las guionistas de A dos metros bajo tierra, y Sarah Gubbins son las responsables de esta serie basada en la novela de mismo t¨ªtulo que Chris Kraus escribi¨® en 1997 y que se convirti¨® en libro de culto del movimiento feminista. La mirada femenina es poderos¨ªsima y omnipresente tambi¨¦n en la serie, que llega al c¨¦nit en su quinto cap¨ªtulo, A Short History of Weird Girls (Una breve historia de chicas raras), donde cuatro mujeres cuentan sus recuerdos vitales con el sexo como centro.
No es sencillo conectar con I Love Dick. No est¨¢ hecha para que todo el mundo lo haga. Sus aires pretenciosos no hacen f¨¢cil recomendarla. Es una serie que se entiende a s¨ª misma como una obra de arte para un p¨²blico minoritario, y no lo oculta. Pero tambi¨¦n es importante por los asuntos que trata y c¨®mo los trata, sin ning¨²n pudor, sin censuras y sin ocultar nada. Y es importante porque reivindica que la creaci¨®n art¨ªstica y el deseo sexual no son solo cosa de hombres.
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