Javier Gom¨¢ Lanz¨®n: "Soy un iluso sin fronteras"

Esta es una entrevista manipulada. La primera versi¨®n ten¨ªa 20 folios. Y eso que se le pidi¨® al entrevistado que fuera breve, porque bueno ya se supon¨ªa que ser¨ªa un autor cuya Tetralog¨ªa de la Ejemplaridad figura entre los libros m¨¢s vendidos y citados en tiempos poco ejemplares. Despu¨¦s de meterle la motosierra al original y de llamar al orden al incontinente, este es el destilado de una charla de una hora. El texto primigenio tiene otro precio.

Dice que, tras acabar su obra, por primera vez no tiene un plan en su vida ?se siente vac¨ªo?

Al rev¨¦s. Me he quedado tan a gusto. Me preocupa m¨¢s c¨®mo se sienten los dem¨¢s: hartos, saturados, ol¨ªmpicamente indiferentes.

Sinti¨® la vocaci¨®n literaria a los 16 a?os. ?Se le apareci¨® la virgen en el instituto?

S¨ª, y me dio tres mensajes que no puedo revelar hasta 2050. Uno de ellos habla del futuro de los medios de comunicaci¨®n escritos. No va bien. No puedo decir m¨¢s.

O¨ªdo, cocina. Una vocaci¨®n salvaje y precoz. ?Eso a los 16 c¨®mo se doma? Tendr¨ªa otras urgencias, ?o fue puro desde joven?

Ni pastorcito, ni monje, ni malote. Mi adolescencia fue una median¨ªa que una vocaci¨®n literaria brutal hizo m¨¢s compleja. Me cost¨® mucho lograr la normalidad.

?Qu¨¦ es un fil¨®sofo hoy d¨ªa?

Todos somos nativamente fil¨®sofos porque tenemos una interpretaci¨®n del mundo. Luego una minor¨ªa extravagante escribe libros de filosof¨ªa, que es literatura conceptual. Nace de una vocaci¨®n literaria. Elegir el concepto, el verso o la novela es s¨®lo una cuesti¨®n de estrategia comunicativa.

Pero los fil¨®sofos nos rega?an. Anda que no nos dio la chapa con la ejemplaridad p¨²blica

El primer perjudicado soy yo. Todos me juzgan por mi doctrina y la presi¨®n es insoportable. Trato de escapar. La ejemplaridad me persigue pero yo soy m¨¢s r¨¢pido.

Se define ¡°fil¨®sofo mundano¡±. ?Sus colegas son marcianos?

Mis colegas por lo general me parecen estupendos y los admiro. Es m¨¢s probable que sea yo quien les parezca marciano a ellos.

?Es el humor la ¨²ltima esperanza en este valle de l¨¢grimas?

Neecesitamos de vez en cuando unas vacaciones de realidad, que se suspendan sus leyes y nos creamos la ilusi¨®n de un mundo incruento y sin dolor. Eso es el humor. Derrama dulce liviandad en la realidad, que nos esclaviza, y hace la vida m¨¢s soportable.

Dice que este es un pa¨ªs de aguafiestas, sin embargo, se habla de la Espa?a de pandereta.

Somos aguafiestas en lo te¨®rico, festivos en lo pr¨¢ctico. El ¨²nico idioma en el que a quien tiene ilusiones se le llama iluso, y yo soy uno de ellos: un iluso sin fronteras. Pero tambi¨¦n somos el pa¨ªs con m¨¢s bares del mundo.

Ve 'Gran Hermano VIP'. ?Qu¨¦ hace un fil¨®sofo viendo ese zoo?

Sufrir cuando no gana mi favorito. Pero no he llegado a votar por tel¨¦fono, de momento.

52 a?os y la obra hecha, ?Qu¨¦ tal la crisis de la mediana edad?

Ni en eso destaco. Soy un tonto de la estimativa, disfruto con lo que tengo y doy gracias por una buena suerte que no merezco. La vida ha sido injusta conmigo para bien. El deportivo puede esperar.

Parece usted muy consciente de sus defectos, pero tambi¨¦n de sus virtudes. ?Vanidosillo?

A mis hermanos les digo para provocarles que tienen suerte de poder ser humildes sin mentir. El cient¨ªfico sabe si ha encontrado la verdad por el experimento, el literato s¨®lo lo sabe por el consenso de los dem¨¢s. Necesita conocer la opini¨®n ajena. La vanidad es necesaria, aunque hay que educarla.

Ciertos pensadores est¨¢n eternamente enojados y deploran todo el rato cosas. ?Vamos a peor?

Tengo malas noticias para cenizos y aguafiestas. Vamos a mejor en todo, lo material y lo moral. Lo m¨¢s probable es que el progreso contin¨²e. Aunque nada hay seguro, salvo la situaci¨®n sigue siendo muy imperfecta.

Wifi, big data, Tinder. ?Cu¨¢l es la palabra del siglo XXI?

Elegancia, porque hoy no se trata s¨®lo de ser libres sino de elegir bien. Y eso es la elegancia.

Pues fenomenal. Qu¨¦ buena tarde se ha quedado, ?no?

Mejorando lo presente.