M¨¢s de lo mismo

Para entendernos, M¨¦xico es un pa¨ªs donde la querencia es que el hombre administre a la mujer y la mujer administre la cesta de la compra. El reparto de roles cambia lentamente porque el macho azteca es culturalmente dominador y la hembra, sometida a la obediencia. Espa?a es un para¨ªso de derechos y protecci¨®n comparado con el atraso mexicano en la igualdad de g¨¦nero.

Frente al inmovilismo masculino, las organizaciones feministas se han movilizado. #0, el canal de Movistar+, estren¨® el jueves Mujer en M¨¦xico, con testimonios y denuncias sobre la lacra: desde enero de 2012 a junio de 2016 fueron asesinadas 9.581 mujeres; s¨®lo 1.887 fueron tipificados como feminicidios, privadas de la vida por razones de g¨¦nero; el 10%, ni?as.

El machismo en Am¨¦rica Latina es un cl¨¢sico y los programas sobre sus consecuencias, tambi¨¦n, pero nunca sobran porque la sangre, la impunidad y la indiferencia hermanan desde R¨ªo Bravo a Tierra del Fuego. El reportaje, incluido en la serie A las puertas del infierno, acierta porque consigue emocionar acusando.

Las entrevistas han sido elegidas con criterio y conducidas sobriamente en las reuniones de v¨ªctimas y familiares. Sin restar m¨¦ritos, abordar el tema del delito en el Estado de M¨¦xico o Ju¨¢rez es como fotografiar flora y fauna en el Amazonas. Lo dif¨ªcil es hacerlo mal.

La impunidad de los feminicidios ronda el 99%, seg¨²n la abogada Karla Salas, sublevada contra la imprevisi¨®n de las autoridades. En los despachos contaminados por el machismo, el maltrato y no pocos asesinatos suelen abordarse como asunto interno, familiar, un homicidio m¨¢s.

¡°Vivir en un pa¨ªs donde todos los d¨ªas son asesinadas impunemente siete mujeres y ni?as, es peligroso¡±, declara Salas.

Los ment¨ªs oficiales no logran esperanzar porque no son fiables. Las mujeres que se atreven siguen denunciando indefensi¨®n frente al marido que las muele a palos porque la sopa est¨¢ fr¨ªa, el criminal que las asesina y los jueces que les niegan justicia.