Qu¨¦ ha fallado en la gala de los Goya
La falta de ritmo y un humor muy particular han lastrado la entrega de premios del cine espa?ol
Presentar una gala de premios no es nada f¨¢cil. Al contrario, es un regalo envenenado. Los Goya 2018 lo han dejado muy claro. Eso y que no es lo mismo ser un gran humorista y un gran monologuista que ser un buen presentador para los Goya. Despu¨¦s de tres a?os con Dani Rovira como conductor de la gala de entrega de los premios del cine espa?ol, este a?o tomaron el relevo los c¨®micos Joaqu¨ªn Reyes y Ernesto Sevilla. Su particular humor, bordeando el absurdo y el surrealismo, ha patinado en una gala que, como marca la tradici¨®n, se ha vuelto a hacer demasiado larga (ha llegado a las tres horas y cuarto) y ha tropezado como espect¨¢culo televisivo.
- Los presentadores chanantes
Joaqu¨ªn Reyes y Ernesto Sevilla tienen un humor que no es apto para todos los p¨²blicos. Y que en mon¨®logos o sketches puede funcionar muy bien pero que no ha logrado mantener el pulso de una gala como la de los Goya. El arranque de la ceremonia lo evidenci¨®. El mon¨®logo inicial de Sevilla carec¨ªa de ritmo y los chistes no llegaban a cuajar. Los silencios con los que juega habitualmente el humorista aqu¨ª eran frenazos en seco y no eran entendidos ni por el patio de butacas ni por los espectadores. A lo largo de la noche hubo muchas m¨¢s cosas que no se entendieron, como el desagradable momento vomitona en la cara a El Langui, un sketch sobre los Actores Primordiales o bromas con supuestos mensajes de whatsapp en los m¨®viles de los asistentes. La cara de incomprensi¨®n de Maribel Verd¨² cuando fue la protagonista de uno de ellos reflejaba el sentimiento generalizado del p¨²blico.
Otros momentos s¨ª funcionaron mejor. Como Emily Mortimer diciendo unas palabras en euskera, Paco Plaza y Juan Jos¨¦ Bayona como c¨®mplices en algunas bromas de los presentadores o el sketch sobre las musas de los directores de cine. O la valoraci¨®n de Carlos Boyero de la gala compar¨¢ndola con el parto de un caballo, "que es una cosa bonita pero que da asco". Que Boyero saliera al rescate de los Goya no deja de ser ir¨®nico.
- Guion deslavazado y mensaje contradictorio
En una gala en la que se supon¨ªa que se iba a reivindicar la presencia de la mujer en el cine (la victoria de Isabel Coixet y La librer¨ªa as¨ª lo hizo finalmente), era curioso que fueran dos hombres los presentadores. Otra vez. Leticia Dolera lo dej¨® bien clarito: "os est¨¢ quedando la gala muy bien. Un campo de nabos feminista precioso". Las frases de reivindicaci¨®n feminista aparec¨ªan en el guion metidas con calzador. O con un mon¨®logo a cargo de La Terremoto de Alcorc¨®n en el minuto 00.55, cuando los espectadores ya est¨¢n deseando que se acabe el asunto para poder irse a la cama.
El guion no fluy¨®, y cuando mejor funcionaba la gala era cuando los presentadores no estaban en escena. Bien la decisi¨®n de que Marlango interpretara en directo un medley de las canciones nominadas. Regular la aparici¨®n de Paquita Salas que, a pesar del gran actor Brays Efe que le da vida, posiblemente quienes no hayan visto la serie (originalmente en Flooxer, ahora en Netflix, creada por los Javis, nominados por La llamada y tambi¨¦n profesores de OT), no entendieran de qu¨¦ iba. Tambi¨¦n hubo errores de coordinaci¨®n que hicieron que, por ejemplo, Hiba Abouk y Jes¨²s Castro estuvieran casi medio minuto en el escenario sin saber qu¨¦ hacer porque no les daban el siguiente premio que ten¨ªan que entregar.
- Realizaci¨®n y fallos del directo
Es otro cl¨¢sico de las galas de los Goya, los problemas de realizaci¨®n y t¨¦cnicos. Aunque no han sido tan clamorosos como en otros a?os y algo s¨ª se ha mejorado, varios micros abiertos han dejado que escuch¨¢ramos cosas que no deb¨ªamos o¨ªr. Por ejemplo, que a Ernesto Sevilla le hab¨ªa parecido que el arranque les hab¨ªa quedado "guay", en contra de la opini¨®n generalizada en Twitter. Tambi¨¦n destac¨® la insistencia en mostrar en pantalla el telepr¨®nter donde los presentadores le¨ªan el guion. O que se enfocara directamente a los c¨¢maras (y las c¨¢maras) sin venir a cuento.
- Escenograf¨ªa elegante
Pero no todo va a ser malo. En contra de lo que ocurri¨® el a?o pasado, cuando el escenario estaba saturado de elementos, orquesta incluida, y los entregadores de premios y premiados casi no cab¨ªan, este a?o se ha apostado por un escenario m¨¢s despejado, salvo el piano en el que interpretaron las canciones nominadas. El decorado estaba compuesto por unos engranajes enormes que, aunque no se lleg¨® a entender bien su funci¨®n o su significado, daban un colorido y ambiente c¨¢lido a la escenograf¨ªa.
En definitiva, el intento de la gala de los Goya 2018 por tener personalidad propia ha vuelto a hacer agua. Se sigue sin dar con la f¨®rmula que haga atractiva televisivamente hablando la fiesta del cine espa?ol, como les gusta tanto decir.
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