El monstruo de Frankenstein viaja hacia la luz
Carme Portaceli estrena una versi¨®n teatral de la novela de Mary Shelley con Joel Joan como la criatura y ?ngel Ll¨¤cer en el papel de su infausto creador
El imprudente creador V¨ªctor Frankenstein y su devastada criatura, que nacieron aquel verano de 1816 en Villa Deodati, junto al lago de Ginebra, han tenido una larga vida tras la que les insufl¨® Mary Shelley en su novela. La escritora dio a luz su historia entre rel¨¢mpagos y la lobreguez que empa?aba el cielo esos d¨ªas a causa de la lejana erupci¨®n del volc¨¢n indonesio Tambora que hab¨ªa vomitado tinieblas al firmamento.
Especialmente el cine, a trav¨¦s de una larga sucesi¨®n de pel¨ªculas, entre las que detacan las dos seminales de James Whale con Boris Karloff y la de Kenneth Branagh con Robert de Niro, ha ofrecido materializaciones muy diversas de Frankenstein y el ser que cre¨® y lecturas muy distintas de la obra de origen, Frankenstein o el moderno Prometeo, en la que Mary Shelley mezcl¨® cosas tan variadas como las fantasmagor¨ªas de la ¨¦poca, su inter¨¦s por los experimentos de Galvani y Volta, los espasmos de las ranas muertas al pasarles corriente y el fallecimiento el a?o antes de su hija reci¨¦n nacida. ¡°Sue?o que mi ni?a vuelva a la vida otra vez¡±, escribi¨® en su diario.
Ahora, en el 200 aniversario (se public¨® en 1818), llega otra versi¨®n de su inmortal historia de desaf¨ªo a las leyes de la naturaleza y sus terribles consecuencias (¡±?maldito el d¨ªa que recib¨ª un soplo de vida, maldito sea mi creador!¡±), y lo hace en forma de obra teatral, con el objetivo de proponer una mirada nueva sobre Frankenstein y el desgraciado individuo al que tan desconsideradamente alumbr¨®.
A petici¨®n de la directora Carme Portaceli, el director de cine (Los ojos de Julia) y guionista Guillem Morales ha convertido la novela de Maty Shelley en una obra para teatro, Frankenstein, que se estrena el jueves en el Teatre Nacional de Catalunya (TNC) con un reparto protagonizado por el popular ?ngel Ll¨¤cer como V¨ªctor Frankenstein y Joel Joan, un Joel Joan rapado y que se ha metido a fondo en su tremendo papel, como la criatura. Magda Puig encarna a Elizabeth y Alba de la Cruz a ¡°la compa?era¡±, que no luce los pelos de Elsa Lanchester.
La versi¨®n teatral, explic¨® ayer Portaceli, se centra en un doble viaje, ¡°el de Frankenstein de la luz del conocimiento a la oscuridad de la culpa y el crimen m¨¢s grande, que es crear un ser y abandonarlo, y el contrario, el de la criatura, que transita de la oscuridad del monstruo a la luz del habla, el razonamiento y el amor¡±.
La directora describi¨® la obra como ¡°un disparo certero al coraz¨®n, una historia preciosa que conlleva una reflexi¨®n profunda sobre la esencia de lo que es un ser humano¡±.
Explic¨® que el proyecto naci¨® hace dos a?os cuando le propuso a Morales llevar al teatro Frankenstein en el marco del inter¨¦s de ella por la novela rom¨¢ntica inglesa que la condujo a montar Jane Eyre. Analizaron qu¨¦ era esencial en la historia de Mary Shelley y realizaron varias versiones hasta llegar a la definitiva.
¡°Quer¨ªamos hablar del abandono, tema fundamental en la obra¡±
En la obra teatral, adquiere un papel esencial el personaje de De Lacey (interpretado por el veterano Llu¨ªs Marco), el anciano ciego del que la criatura adquiere los usos humanos, con los que llega hasta a disfrutar de la lectura de El para¨ªso perdido de Milton y el Wether de Goethe.
Morales, que ha escrito por primera vez para teatro, recalc¨® que desde el principio tuvieron muy claro Portaceli y ¨¦l que ¡°¨ªbamos a explicar la historia de los dos, creador y criatura¡±, y que ¡°quer¨ªamos hablar del abandono, tema fundamental en la obra¡±.
Se?al¨® el autor de la versi¨®n que decidieron llevarla ¡°al terreno de las emociones¡±, m¨¢s que a la de la ciencia, ¡°que ya se ha visto¡±. ¡°Nos interesaba m¨¢s lo que habla de la responsabilidad de crear vida. Lo del desaf¨ªo a Dios no me importaba tanto¡±, apunt¨®. ¡°M¨¢s que de la divinidad quer¨ªa hablar de la naturaleza y de lo que supone ir contra ella¡±.
De la fidelidad al original, dijo que en la versi¨®n teatral ¡°est¨¢ la novela, la trama, los personajes, la atm¨®sfera, pero he dramatizado, me he inventado alguna cosa, me seduc¨ªa la idea de tener a los dos personajes, cuyo v¨ªnculo es tan importante, pese al odio, juntos en escena el m¨¢ximo tiempo posible¡±. En la versi¨®n, adem¨¢s, hay una relaci¨®n intensa, directa, entre el monstruo y De Lacey que no se da en la novela.
El espect¨¢culo est¨¢ situado en la ¨¦poca en que transcurre la historia y se dasarrolla en un espacio esc¨¦nico en forma de cubo con una serie de proyeciones evocadoras del ambiente g¨®tico, cementerio incluido. Portaceli dijo ayer que sopesaron integrar a la propia Mary Shelley como personaje pero en ¨²ltima instancia ¡°la obra habla de un mundo muy egoc¨¦ntrico que es muy patriarcal¡±.
¡°El m¨ªo no es el de los dos tornillos¡±
Joel Joan explica que al principio pens¨® que le ofrec¨ªan el papel del cient¨ªfico, ¡°por mi perfil intelectual¡±, bromea. Y se qued¨® desconcertado cuando Portaceli le dijo: ¡°No, no, t¨² haces el monstruo¡±. ¡°Me sorprendi¨®, porque cre¨ªa que era el de los dos tornillos, el de Boris Karloff, y no tendr¨ªa texto, s¨®lo gru?idos¡±. As¨ª que despu¨¦s le ha fascinado el ¡°precioso viaje¡± de su personaje (que se mueve ¡°como alguien hecho de trozos de muertos¡±) hacia la luz de la erudici¨®n y la humanidad. ¡°Es maravilloso c¨®mo un conjunto de restos sacados de un cementerio devienen un intelectual¡±, reflexiona. En la obra, ¡°entiendes que ¨¦l es la v¨ªctima y el verdadero monstruo es Frankenstein¡±.
Para ?ngel Ll¨¤cer, interpretar al doctor Frankenstein le ha obligado a transitar un paisaje tenebroso. ¡°Me ha costado mucho, porque el personaje hace da?o a todos los que le rodean y yo a eso no estoy acostumbrado¡±. Dijo que no ha revisado las pel¨ªculas. ¡°Trat¨¦ de ver alguna en Netflix, pero no est¨¢n¡±,
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