¡®Lucia di Lammermoor¡¯ sin recortes

Lucia di Lammermoor es una ¨®pera bien conocida. Pero desde que se estrenara en N¨¢poles en 1835 hasta hoy ha sido sistem¨¢ticamente masacrada. Cortes, caprichos de divo, servilismo ante los p¨²blicos m¨¢s carcas¡­ No importaba la raz¨®n, la partitura de don Gaetano Donizetti se ha tratado como un chicle a lo largo de la historia. Quiz¨¢s por eso, tambi¨¦n, ha llegado hasta aqu¨ª. Pero precisamente por eso tambi¨¦n conviene hacerle justicia. Y es lo que pretende esta nueva versi¨®n que se estrena el viernes en el Teatro Real, con Daniel Oren a la batuta y David Alden como director de escena. ¡°Se ha faltado el respeto a Donizetti, es hora de reivindicarlo¡±, afirma el primero.

Y para ello, aparte de una partitura original sin cortes, hay que tirar de un reparto que podr¨¢n disfrutar en m¨¢s de 40 provincias el d¨ªa siete de julio, cuando ser¨¢ retransmitida en directo a varias ciudades. Javier Camarena es uno de los tres mejores tenores l¨ªricos del momento. A ¨¦l y a Ismael Jordi en cabeza del segundo reparto les toca dar voz a Edgardo di Ravenswood. Lissette Oropesa y Venera Gimadieva representan dos de las sopranos ascendentes del panorama belcantista. Ellas se alternan como Lucia en los elencos para dar vida a esta mujer sufriente, sacrificada en mitad de una sociedad tremendamente masculina por bien de la familia, el patrimonio, la herencia; en contra de sus deseos y el amor.

No s¨®lo recupera esta versi¨®n la partitura. Tambi¨¦n un instrumento clave, el arm¨®nico de cristal, sustituido a lo largo de dos siglos por una flauta. Esta fuente de sonidos inventada por Benjamin Franklin en 1762 fue incorporada por Donizetti al original. Pretend¨ªa experimentar atm¨®sferas que conectan con mundos extra?os, aureolas de misterio, fronteras entre realidad y sue?o, locura y raz¨®n. ¡°Contar con ello en esta versi¨®n es una rareza. Mucha gente se preguntar¨¢ qu¨¦ es eso tan extra?o que suena por ah¨ª. Ni m¨¢s ni menos que lo que Donizetti deseaba¡±, asegura Oren.

¡°Es una gran ¨®pera belcantista, con todos los matices que hacen grande este estilo y que han sido escondidos durante d¨¦cadas, con toda su complejidad y su dificultad¡±

Descubriremos tambi¨¦n una partitura radicalmente belcantista, afirma Camarena. ¡°Con todos los matices que hacen grande este estilo y que han sido escondidos durante d¨¦cadas, con toda su complejidad y su dificultad¡±, asegura el mexicano, euf¨®rico este lunes por el triunfo de su selecci¨®n en el Mundial.

Unos matices llegan al paroxismo dram¨¢tico en el papel de Lucia: ¡°Todo el mundo piensa en la escena de la locura, pero para m¨ª lo terrible viene despu¨¦s. Que tanto Lucia como Edgardo no sepan nunca lo que realmente se amaron¡±, asegura Oropesa. ¡°Ella es una mujer ¨²nica, que acaba desesperada y sola, que es vendida por su hermano sin quererlo, por un matrimonio que conviene a la familia. Lo ¨²nico que le queda en el mundo es la fantas¨ªa, su escape para huir de todo¡±.

No del castillo en que se enmarca este montaje de la English National Opera ideado por David Alden. ¡°Una propuesta que est¨¢ centrada en la misma ¨¦poca victoriana en que se escribi¨®¡±, afirma el director de escena. Con sus brumas escocesas y su plomiza brutalidad machista. ¡°Una ambiente opresivo en el que se llevan las emociones al l¨ªmite, hacia el cl¨ªmax de la locura¡±.