Cultura suprime la fusi¨®n entre el Real y el Teatro de la Zarzuela
Guirao anula el decreto que el Ejecutivo del PP aprob¨® hace un mes y aborda una profunda reforma de las compa?¨ªas del Instituto Nacional de las Artes Esc¨¦nicas y de la M¨²sica
Ha sido la primera decisi¨®n de calado del nuevo ministro de Cultura, Jos¨¦ Guirao. El viernes, anunciaba en una entrevista en EL PA?S que quer¨ªa repensar la uni¨®n del?Teatro Real con el de la Zarzuela. Pretend¨ªa hablar con las partes implicadas antes de que entrara en vigor el decreto aprobado por el Ejecutivo del PP hace apenas un mes. Se reuni¨® con los sindicatos, con los responsables de la que iba a ser la nueva fundaci¨®n y con directivos del Instituto Nacional de Artes Esc¨¦nicas y de la M¨²sica (Inaem). Su decisi¨®n ha sido anular el decreto.
El ministro se plante¨® una alternativa: suspenderlo para una m¨¢s profunda negociaci¨®n de los aspectos laborales o, como demandaba la plantilla del Inaem, directamente anularlo. Al final, ha sido as¨ª, pero, como apuntan fuentes de Cultura, ¡°no para que todo vuelva a ser como antes¡±. M¨¢s bien con vistas a tomar impulso y emprender una reforma integral del instituto que lidera los espect¨¢culos del sector p¨²blico, una recurrente demanda de los directores de teatros, compa?¨ªas de danza y m¨²sica que lo integran ¡ªun total de 14 entidades¡ª.
Si Guirao se decide por cortar el nudo gordiano que ahoga a estos organismos, habr¨¢ firmado la supervivencia de instituciones como el Centro Dram¨¢tico Nacional, la Compa?¨ªa de Teatro Cl¨¢sico, el Ballet Nacional, la Compa?¨ªa Nacional de Danza, la Orquesta Nacional, el Centro Nacional de Difusi¨®n Musical y el Teatro de la Zarzuela. Todos ellos reclamaban tener el mismo estatus al que iba a acceder la Zarzuela en su nueva etapa junto al Real o uno similar. Y eso ha pesado en la decisi¨®n de abordar una reforma integral del Inaem y, por tanto, de la creaci¨®n p¨²blica.
¡°El problema b¨¢sico es la grave complicaci¨®n de la incertidumbre para los trabajadores, sin una seguridad por parte de Administraciones P¨²blicas¡±, asegura el ministro de Cultura
Ayer fue un d¨ªa de declaraciones cruzadas, cierta incertidumbre y sucesi¨®n de comunicados. Por la ma?ana, Guirao anunciaba en Sevilla, donde visit¨® el Archivo General de Indias tras participar anteanoche en la gala de entrega de los Max, su intenci¨®n de suspender el decreto aprobado el 20 de abril por el Consejo de Ministros, que no ten¨ªa fecha concreta de aplicaci¨®n. ¡°Al margen de la bondad o no del proyecto, que habr¨ªa que seguir pensando un poco, lo que estaba en marcha tiene un problema al que soy bastante sensible: no estaba resuelto c¨®mo se integraban los trabajadores de la Zarzuela, que son m¨¢s de 100 personas. Si los temas laborales no quedan resueltos, a la gente no les puedes pedir fe ciega¡±, asegur¨®. ¡°Pero una cosa es lo que piense Cultura y otra [el Ministerio de Pol¨ªtica Territorial y] Funci¨®n P¨²blica, que tiene las competencias sobre el personal¡±, a?adi¨®. ¡°El problema b¨¢sico es la grave complicaci¨®n de la incertidumbre para los trabajadores, sin que haya seguridad¡± por parte de este ¨²ltimo departamento. Cab¨ªan as¨ª dos razones para la paralizaci¨®n: ¡°El asunto no se le hab¨ªa planteado antes al otro ministerio y no hay tiempo para ello, dado que el decreto de fusi¨®n entra en vigor el mismo d¨ªa que los Presupuestos Generales, que va a ser enseguida¡±. En ese momento de la ma?ana, ped¨ªa tiempo muerto.
Los sindicatos recib¨ªan la noticia con cierta frustraci¨®n y contraatacaban exigiendo la derogaci¨®n total de la medida. ¡°No podemos entender que el Gobierno actual se plantee la posibilidad de asumir la entrada en vigor de dicho decreto aunque lo suspenda sine die. Es el resultado de una manera de gobernar a la que ha renunciado expl¨ªcitamente el actual Ejecutivo¡±, afirmaba tambi¨¦n por la ma?ana en un comunicado el comit¨¦ de empresa del Inaem.
El Real asum¨ªa entonces la decisi¨®n y volv¨ªa a la posici¨®n de salida. ¡°Tenemos en marcha la celebraci¨®n del bicentenario y la internacionalizaci¨®n de nuestros proyectos a nivel global. Era una propuesta compleja pero llena de oportunidades¡±, dijo Gregorio Mara?¨®n, presidente de su patronato e impulsor de la fusi¨®n. El director general del Real, Ignacio Garc¨ªa-Belenguer, hab¨ªa afirmado el lunes que estaban preparados para asumir la decisi¨®n del ministro. ¡°Y m¨¢s siendo parte mayoritaria de nuestro patronato el Ministerio de Cultura. Total respeto a la decisi¨®n¡±, abund¨®.
¡°La experiencia nos debe servir para acometer una reforma global¡±, aseguran fuentes del Inaem
Cuando a media ma?ana lleg¨® a Madrid desde la capital andaluza, Guirao volvi¨® a reunirse con los sindicatos y los responsables del Inaem, que dirige Montserrat Iglesias. A la salida, el ministerio anunci¨® la anulaci¨®n del decreto.
La marcha atr¨¢s supone dar impulso a una medida m¨¢s ambiciosa, comentan fuentes de Cultura: la reestructuraci¨®n del Inaem. Supone una constante reivindicaci¨®n de todos los directores de sus unidades, que han ido planteando sin descanso a los sucesivos responsables del ministerio. Ya hab¨ªa pasado de ser una reclamaci¨®n a una llamada de socorro. La rigidez de los convenios laborales y los recortes de Hacienda en la etapa anterior han dado al traste con giras internacionales de las compa?¨ªas del instituto, dificultando gastos y contrataciones hasta extremos kafkianos. ¡°La experiencia nos debe servir para acometer una reforma global¡±, a?aden fuentes del Inaem.
De hecho, Guirao traslad¨® a los sindicatos que crear¨¢ un grupo de trabajo para analizar el asunto en profundidad. Su objetivo ser¨¢ ¡°lograr mejorar la gesti¨®n del Inaem, adaptarla a la naturaleza de sus actividades y potenciar su labor de difusi¨®n nacional e internacional de las artes esc¨¦nicas y musicales¡±, seg¨²n fuentes ministeriales.
Y ah¨ª radica la clave. El malestar de las unidades del Inaem tras la anunciada fusi¨®n del Real y la Zarzuela era palpable. Todos reclamaban su derecho a flexibilizar la gesti¨®n con una urgente modernizaci¨®n, siempre desde el ¨¢mbito p¨²blico. Los sindicatos son partidarios de debatir el futuro escenario. Ayer ganaron una batalla, pero lo que se avecina para sus demandas anuncia conflictos de intereses con un horizonte incierto.
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