Carlos Hip¨®lito: ¡°Durante muchos a?os he odiado mi voz¡±

Sorprende escuchar de una de las voces m¨¢s hermosas de la escena en Espa?a confesar que durante muchos a?os ha odiado esa voz. ¡°Mi voz me parec¨ªa horrible. Yo quer¨ªa tener una voz profunda, muy de hombre, algo as¨ª como la de Constantino Romero. Curiosamente y para mi sorpresa, mi voz se ha convertido en una de las se?as de mi trabajo, valorada y apreciada por mucha gente¡±. La naturalidad de ese don inolvidable ante la palabra hablada o cantada va acorde con su persona. Es Carlos Hip¨®lito hombre de pocos miramientos y nula pedanter¨ªa. No pierde ni un minuto en pensar en su trayectoria profesional y regodearse en un pasado de ¨¦xitos. Cuando se cumplen 40 a?os desde que pis¨® por primera vez un escenario profesionalmente ¨Cse estren¨® con As¨ª que pasen cinco a?os, de Lorca- Carlos Hip¨®lito (Madrid, 1956) recibe hoy el Premio Corral de Comedias del Festival Internacional de Teatro Cl¨¢sico de Almagro, primera edici¨®n que dirige Ignacio Garc¨ªa, por ¡°su enorme rigor en el trabajo y su cuidado exquisito de la palabra¡±, entre otras cosas. ¡°Me asombra este premio porque de verdad tengo la sensaci¨®n de que he empezado antes de ayer y que cada cosa que hago es la primera. Hace casi quince a?os que no hago teatro cl¨¢sico. Me qued¨¦ un poco perplejo, pero me llen¨® de alegr¨ªa la sensaci¨®n de pensar que aquello que hice en el pasado ha dejado un buen recuerdo¡±, asegura el int¨¦rprete en una entrevista realizada en Madrid la semana pasada.

Hip¨®lito debut¨® en los escenarios de Almagro en 1979 con La dama boba, de Lope de Vega, y desde entonces ha participado en ocho montajes y en otros muchos m¨¢s con la Compa?¨ªa Nacional de Teatro Cl¨¢sico. ¡°Para un actor, en el teatro cl¨¢sico se encuentra todo. El material es magn¨ªfico. Los grandes personajes, tanto en las tragedias como en las comedias, est¨¢n bien construidos, vivos, con unas l¨ªneas de pensamiento muy claras, siempre enfrentados a situaciones de riesgo y emociones enormes. A esto hay que a?adir la buena construcci¨®n dramat¨²rgica de las historias, todas las tramas que uno pueda imaginar y, lo principal, la belleza del verso¡±. Cuando habla del verso, el int¨¦rprete se dispara. ¡°El verso es una pista de despegue maravillosa para volar. Es como una partitura. El actor que hace teatro cl¨¢sico tiene que saber bien que el verso es la forma natural de expresarse, que los personajes hablan en verso porque piensan en verso. El texto tiene que sonar normal, natural. Paladear las palabras que se esconden detr¨¢s de los versos es de los mayores placeres para un int¨¦rprete¡±.

Su ausencia de la escena cl¨¢sica se debe mucho al azar, tambi¨¦n a ese empe?o de Hip¨®lito por tocar en todas las orquestas y nunca repetir ¨¦xitos anteriores. Hombre de teatro, pero tambi¨¦n de cine, televisi¨®n y musicales. ¡°Si uno se recrea en mirar su trayectoria y contemplar las estanter¨ªas de los premios, corre el riesgo de estancarse. Es un error. Soy partidario de probar cosas nuevas, por eso soy un saltimbanqui, porque me gusta cambiar de g¨¦nero, de medio, de personajes. Cuando llevo mucho en el teatro me entran ganas de hacer televisi¨®n o cine, y al rev¨¦s. Mis maestros me ense?aron no solo el oficio, sino tambi¨¦n que la manera de estar en esta profesi¨®n era la de imponerse nuevos retos, arriesgarse y nunca creerse que ya lo sabes todo¡±.

No es de lo que piensan que un actor no llega a ser un grande si no ha pisado un escenario teatral. ¡°No es imprescindible. Hay int¨¦rpretes que he visto en cine y que jam¨¢s han pisado un teatro que me han dejado con la boca abierta y me han comunicado una emoci¨®n enorme. No s¨¦ si es el mejor lugar para un actor, pero mi experiencia me dice que es donde uno se siente m¨¢s due?o de su trabajo, donde no te pueden manipular como en el cine o la televisi¨®n¡±. Es al coraz¨®n al que Hip¨®lito responsabiliza de la elecci¨®n de sus trabajos. Deja la cabeza y la raz¨®n siempre fuera y aparta el pensamiento sobre el ¨¦xito o no de la propuesta. Da igual que el personaje sea protagonista o no. ¡°Tengo en cuenta lo que yo quiero contar a la sociedad. Nunca har¨ªa un texto contra lo que yo ideol¨®gicamente pienso. Es verdad que con los a?os cada vez me importa menos c¨®mo va a ser el corral, sino quienes van a ser las otras gallinitas que me acompa?en. Cada d¨ªa me importa m¨¢s trabajar con gente que yo sienta que me pueda aportar algo, que me pueda llevar bien¡±.

Ahora est¨¢ inmerso en el musical, un g¨¦nero que adora como espectador y que le descubri¨® como actor Mario Gas con Follies, de Stephen Sondheim, en 2012. Con m¨¢s de 300 representaciones, Billy Elliot llena los teatros d¨ªa tras d¨ªa. ¡°La m¨²sica y la palabra cantada es una forma de expresi¨®n formidable, en la que soy absolutamente feliz¡±. Felicidad o alivio que expresa tambi¨¦n Carlos Hip¨®lito ante la llegada al Gobierno de Pedro S¨¢nchez. ¡°Es muy ilusionante, es un gobierno s¨®lido que ha dado un soplo de aire fresco y eso es siempre bueno¡±.