¡°El billete tiene un mercado bien definido y una demanda creciente¡±

La vocaci¨®n familiar atrap¨® a Jes¨²s Vico de manera definitiva hace siete a?os. Su padre comenz¨® en el sector de la numism¨¢tica cuatro d¨¦cadas antes, con un negocio. Ahora Vico no solo lo dirige, sino que adem¨¢s es el presidente de la Asociaci¨®n Espa?ola de Numism¨¢ticos Profesionales (AENP) y el vicepresidente de su hom¨®loga internacional (IAPN por sus siglas en ingl¨¦s). Aunque separa el coleccionismo de la inversi¨®n, destaca que se trata de un mercado muy estable, con un cambio de tendencia para el billete, que est¨¢ sufriendo una demanda creciente.

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Pregunta. ?Es Espa?a un pa¨ªs aficionado a la numism¨¢tica?

Respuesta. Es un pa¨ªs con una afici¨®n muy arraigada y creciente, impulsada por un inter¨¦s por la cultura, que es cada vez mayor. Se trata de un sector tradicional y estable en este sentido. Es cierto que no podemos compararnos con otros pa¨ªses como Alemania, Reino Unido o Estados Unidos, en los que existe un mercado fuertemente desarrollado. Uno de los motivos fundamentales es la ley 16/85 de Patrimonio Hist¨®rico Espa?ol, muy restrictiva, que supone una clara desventaja frente al resto de mercados. En lo que respecta al gremio espa?ol, actualmente, la AENP est¨¢ integrada por unos 40 profesionales de todo el pa¨ªs. Tratamos de colaborar con la F¨¢brica Nacional de Moneda y Timbre, las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado e instituciones y universidades para consolidar el mercado numism¨¢tico y fortalecer la relaci¨®n entre el ¨¢mbito p¨²blico y el privado. En cuanto al n¨²mero de coleccionistas en Espa?a, es complicado de determinar, pero poniendo como referencia las convenciones, ferias y subastas, varios miles.

P. La numism¨¢tica acoge monedas y billetes, en cambio la moneda parece m¨¢s popular. ?Es as¨ª? ?A qu¨¦ se debe?

La moneda espa?ola cuenta con un importante mercado en el continente americano

R. Profundizando en la definici¨®n de numism¨¢tica como el estudio y coleccionismo de monedas y billetes, he de decir que ambas ramas son, en cierto modo, incomparables, entre otras cosas, porque el billete cuenta con unos 10 siglos de historia mientras que las primeras monedas fueron acu?adas en Lidia (actual Turqu¨ªa) en torno a finales del siglo VII a.C. Aparte de esto, el perfil del coleccionista es diferente, la moneda tiene un contenido art¨ªstico e hist¨®rico que la hace diferenciarse. No es solo que la moneda sea m¨¢s popular, es que su mercado est¨¢ mucho m¨¢s desarrollado y consolidado. Adem¨¢s, puede considerarse m¨¢s comercial, m¨¢s atractiva. En los ¨²ltimos a?os el mercado de billetes ha sufrido un estancamiento y los precios no son los que eran hace dos o tres d¨¦cadas. En cualquier caso, tienen un mercado bien definido y estamos observando un cambio de tendencia y una demanda que comienza a ser creciente.

P. Es una afici¨®n, pero tambi¨¦n una inversi¨®n. ?Es preciso ser un experto?

R. La vinculaci¨®n coleccionismo-inversi¨®n ha cobrado un protagonismo especial en los ¨²ltimos a?os. Es evidente que la globalizaci¨®n ha generado un incremento exagerado en la demanda de monedas, pero debemos tener cuidado con los conceptos utilizados. Una inversi¨®n es una colocaci¨®n de capital para obtener una ganancia futura, es decir, tiene un sentido econ¨®mico. Sin embargo, las monedas se compran para ser coleccionadas. Es innegable que la numism¨¢tica supone una revalorizaci¨®n, m¨¢s o menos constante, pero no debemos asociarla a este t¨¦rmino. M¨¢s que ser un experto, al igual que en otros mercados, es importante informarse y acudir a profesionales.

P. ?C¨®mo puede iniciarse alguien interesado?

R. Es importante ponerse en manos de un profesional. Los medios de distribuci¨®n m¨¢s importantes son las subastas y las ferias y convenciones. La AENP cuenta con un calendario anual de convenciones organizadas por todo el pa¨ªs. Son de entrada libre y es el medio b¨¢sico de interacci¨®n entre profesionales y coleccionistas. Sin duda, son muy recomendables para una primera toma de contacto. En el caso de las subastas, son un medio m¨¢s especializado, pero sirven de aprendizaje.

P. ?C¨®mo se establece el valor de un billete o moneda?

R. La ley de oferta y demanda es estrictamente aplicable en el mercado numism¨¢tico. Al margen del metal, la rareza y la conservaci¨®n son las dos variables fundamentales que determinan el precio de una pieza y partiendo de esta base encontramos un amplio espectro de posibilidades. En un mercado globalizado, como es el actual, las subastas son el medio m¨¢s transparente para indicarnos cu¨¢l es la situaci¨®n actual del mercado. Hoy en d¨ªa, con internet, se puede acceder a cualquier subasta y pujar desde cualquier punto del planeta. De ah¨ª que las subastas sean el medio menos sesgado a la hora de determinar el valor de mercado de una moneda o billete.

P. ?Es un mercado ajeno al de la econom¨ªa real?

R. Como cualquier otro mercado, es sensible a la econom¨ªa real y ha sufrido las consecuencias de la crisis. S¨ª que es cierto que el impacto ha podido resultar menor, debido en gran medida a que la crisis financiera ha coincidido con el proceso de globalizaci¨®n del sector numism¨¢tico y el surgimiento de nuevos mercados como Emiratos ?rabes, India o China.

P. ?Tiene sus propias crisis y tendencias?

R. Por supuesto, hay determinadas ¨¦pocas que pueden estar m¨¢s o menos de moda en un determinado momento. Actualmente, la moneda antigua, especialmente la griega y la romana, se colecciona en todo el mundo. Ese respaldo internacional ha impulsado fuertemente los precios de estas piezas. La moneda espa?ola, por ejemplo, cuenta con un importante mercado en el continente americano fruto de la importancia hist¨®rica de Espa?a en ultramar.

P. ?Est¨¢ en riesgo la continuidad de la numism¨¢tica o hay j¨®venes coleccionistas sum¨¢ndose?

R. Existen buenos profesionales y especialistas en numism¨¢tica entre el p¨²blico m¨¢s joven. El sector est¨¢ evolucionando r¨¢pidamente y los j¨®venes han jugado un papel importante en este cambio. Internet ha sido una herramienta fundamental de canalizaci¨®n, al igual que en el resto del mercado, y ha permitido una difusi¨®n m¨¢s fluida del coleccionismo contribuyendo a generar un mayor inter¨¦s en el p¨²blico m¨¢s joven. Afortunadamente, s¨ª se detecta un cierto rejuvenecimiento en el sector, tanto en el perfil de coleccionista como en el de los profesionales, en unos casos, con la apertura de nuevos negocios y en otros casos, los que continuamos con la empresa familiar.