Una psicogeograf¨ªa cin¨¦fila
El cementerio de Sad Hill es el espacio m¨ªtico donde se desarrolla el imponente cl¨ªmax final de 'El bueno, el feo y el malo'
Con su forma circular, el imaginario cementerio de Sad Hill fue algo m¨¢s que un camposanto: coliseo romano, plaza de toros, anfiteatro habilitado para la representaci¨®n de una tragedia, pista de baile, tablao flamenco donde ejecutar una danza de la muerte, altar sacrificial¡ O, tambi¨¦n, un espacio para lo sagrado, un territorio ritual, como subraya Joe Dante en una de las entrevistas recogidas en el documental Desenterrando Sad Hill, de Guillermo de Oliveira.
DESENTERRANDO SAD HILL
Direcci¨®n: Guillermo de Oliveira.
G¨¦nero: documental. Espa?a, 2017.
Duraci¨®n: 86 minutos.
El cementerio de Sad Hill es el espacio m¨ªtico donde se desarrolla el imponente cl¨ªmax final de El bueno, el feo y el malo (1966), una de las obras catedralicias del spaghetti western, barroca culminaci¨®n de la Trilog¨ªa del D¨®lar de Sergio Leone: all¨ª, la c¨¢mara del cineasta abrazaba la abstracci¨®n siguiendo los pasos de Tuco (Eli Wallach) a los sones de El ¨¦xtasis del oro de Ennio Morricone. Y, de hecho, de ¨¦xtasis iba toda esa virtuosa coreograf¨ªa formal que alcanzaba su paroxismo en ese enfrentamiento a tres bandas que petrificaba el tiempo.
Levantado para el rodaje en una zona silvestre cercana a Santo Domingo de Silos y abandonado a su suerte una vez finaliz¨® la producci¨®n, el cementerio fue sepultado por el tiempo. Lo que documenta Desenterrando Sad Hill es el esfuerzo por la recuperaci¨®n de ese espacio m¨ªtico por parte de un grupo de apasionados cin¨¦filos que cayeron bajo el embrujo de la obra maestra de Leone. Un trabajo de amor en nombre de una variante mit¨®mana de la psicogeograf¨ªa: un lugar no es solo su historia o su memoria geol¨®gica, sino tambi¨¦n las ficciones que ha generado y los sue?os que ha engendrado. El documental abusa de las entrevistas y se acerca peligrosamente al reportaje, pero su grupo de arque¨®logos del mito, con su heterodoxa cinefilia de pico y pala, seduce y conmueve.
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