Ant¨ªgona y la sombra de los 43 estudiantes desaparecidos en M¨¦xico

¡°No puedo dar clase, me faltan 43. No quiero que ma?ana me faltes t¨²¡±, rezaba el cartel que presid¨ªa en 2014 la huelga silenciosa de varios profesores universitarios en M¨¦xico. Protestaban as¨ª por los estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos durante la noche del 26 de septiembre de ese a?o en el municipio de Iguala, al sur del pa¨ªs, tras un fuerte enfrentamiento con la polic¨ªa.

La imagen del profesor Rafael Reygadas, con su boca censurada con cinta aislante y acompa?ado de las fotos de los 43 que tom¨® la tambi¨¦n docente Araceli Mondrag¨®n, se convirti¨® en un s¨ªmbolo de la que es una de las mayores tragedias vividas en M¨¦xico en los ¨²ltimos a?os.

¡°Me conmovi¨® profundamente todo lo que representaba; en especial, la emotiva y a menudo olvidada complicidad que un profesor entabla con sus alumnos¡±, comenta el cineasta mexicano Pedro Gonz¨¢lez Rubio (Bruselas, 1976), que dese¨® de inmediato hacer una pel¨ªcula documental en torno a esa idea.

Ant¨ªgona registra el largo proceso de ensayos de un grupo de estudiantes de la Universidad Nacional Aut¨®noma de M¨¦xico (UNAM) para representar la tragedia griega de S¨®focles, en torno a una joven condenada a muerte por desobedecer la ley. La sombra inevitable de aquellos que desaparecieron tan solo unos meses antes les acompa?a en el camino.

La intenci¨®n inicial del director fue la de rodar al profesor Reygadas junto a sus alumnos. ¡°Aunque es un hombre muy interesante y tambi¨¦n lo es la materia que imparte, psicolog¨ªa social, el resultado era demasiado acad¨¦mico para el ritmo narrativo que necesita una pel¨ªcula¡±, explica el director durante la proyecci¨®n de la pel¨ªcula en el Festival de Cine de Montreal RIDM.

Gonz¨¢lez Rubio recurri¨® entonces al teatro y a un amigo de infancia, Emilio Savinni, que da clases de esa materia en la que es la universidad p¨²blica m¨¢s grande de Am¨¦rica Latina. ¡°La UNAM es una ciudad en s¨ª misma, llena de juventud vibrante y apasionada¡±, dice Gonz¨¢lez Rubio. En ella residen 150.000 habitantes, entre cuerpo acad¨¦mico y estudiantes. Pero la mayor¨ªa de estudiantes que aparecen en el documental viven en la periferia de la capital mexicana, de monstruosas dimensiones, e invierten cada d¨ªa dos horas de ida y otras dos de vuelta para ir a clase.

El montaje teatral de la tragedia de S¨®focles es en realidad un pretexto para reflejar el estado vital propio de un grupo de veintea?eros que est¨¢n a punto de florecer. ¡°El miedo y la fragilidad conviven con un hambre enorme por expresarse y salir al mundo¡±, destaca el director de cine, que convivi¨® con ellos durante varios cursos acad¨¦micos. Termin¨® desarrollando una complicidad similar a la del profesor Reygadas y sus alumnos que en su d¨ªa le inspir¨® para crear este documental.

En su caso, gest¨® una relaci¨®n que le sirvi¨® para volver a convertirse en aprendiz: ¡°Me di cuenta de que los adultos de ahora, especialmente los que nos dedicamos al mundo de la cultura, no abandonamos del todo esa fase en la que ellos viven. A pesar de tener 20 a?os m¨¢s que ellos, siento que soy sumamente imperfecto y que sigo viviendo en la incertidumbre, como el resto de mi generaci¨®n¡±.

La Ant¨ªgona de Gonz¨¢lez Rubio tambi¨¦n se cuestiona el papel de la cultura frente a los sucesos pol¨ªticos y sociales. Por esa misma raz¨®n decidi¨® mantener en el montaje final una situaci¨®n que le pill¨® por sorpresa.

En un momento dado, el profesor de teatro califica ante sus alumnos a Ant¨ªgona, que a diferencia de los 43 de Ayotzinapa provoca de forma consciente su propia muerte, como "una irresponsable" por no mantenerse con vida para seguir luchando por lo que cree. ¡°Es una opini¨®n que no me esperaba y que es pol¨ªticamente incorrecta, porque nadie cuestiona a un mito griego. Pero el arte debe basarse en la certeza de que todo es subjetivo. De lo contrario, deja de ser arte y se convierte en propaganda¡±, defiende el mexicano.