Leer con ni?os, el legado de Lolo Rico en la prosa de su hijo

La bola de cristal es la gran obra de Lolo Rico, la que m¨¢s ha trascendido y la que ha empapado incluso a quienes no la vieron en su momento, porque los que fueron (fuimos) a EGB no han (no hemos) descuidado ocasi¨®n para celebrar su gamberrismo marxista (qui¨¦n iba a sospechar que unos marxistas, siempre en el colmo de la disciplina y la seriedad, iban a ser los mayores v¨¢ndalos televisivos). Yo ten¨ªa nueve a?os cuando cancelaron el programa en 1988, y lo recuerdo como un trauma porque coincidi¨® con la cancelaci¨®n de otro icono, Barrio S¨¦samo, sustituido por Los mundos de Yupi, que ya presagiaba, en el t¨ªtulo y en lo gazmo?o, que se ven¨ªa una d¨¦cada m¨¢s de derechas y m¨¢s meliflua. El cambio de ciclo me sorprendi¨® a una edad muy mala, creo que ya nunca volv¨ª a disfrutar de los programas infantiles, se me adelant¨® la pubertad.

Lolo Rico tuvo muchos hijos, se?al de que su inter¨¦s por la infancia no era solo intelectual, y uno de ellos trabaj¨® a sus ¨®rdenes en La bola. Santiago Alba Rico, entonces un chaval de veintipocos reci¨¦n salido de la facultad de Filosof¨ªa, fue guionista de Los electroduendes desde 1984, siguiendo la l¨ªnea ideol¨®gica y de agit-prop marcada por su madre.

Creo que el mejor homenaje y la expresi¨®n m¨¢s lograda del esp¨ªritu de Lolo Rico lo firm¨® este hijo, convertido a?os despu¨¦s en un destacad¨ªsimo escritor de ensayos. En 2015 public¨® Leer con ni?os, donde teoriza sobre la importancia de la lectura en voz alta y compartida con los hijos, sobre c¨®mo los lazos entre generaciones se atan mediante la voz y los cuentos, y c¨®mo la oralidad de las historias es la sustancia del cari?o y el verdadero nutriente que permite a los hijos crecer y adquirir la fortaleza necesaria para, llegado el momento, despegarse de los padres. Un libro as¨ª solo puede ser escrito por alguien que ha sido adoctrinado -en el mejor sentido de la palabra- en esa convicci¨®n desde la misma cuna.