Dar a luz un beb¨¦ y una pel¨ªcula: ¡°El ¨²nico l¨ªmite fue no grabar mi parto¡±

La nueva pel¨ªcula de Carlos Marqu¨¦s-Marcet, Los d¨ªas que vendr¨¢n, tendr¨¢ su estreno mundial este jueves dentro de la secci¨®n competitiva del festival de R¨®terdam, donde ya ha despertado reacciones positivas en los pases previos para profesionales. Se trata del tercer largometraje del director catal¨¢n, de 35 a?os, despu¨¦s de 10.000 km y Tierra firme, y fue rodado durante el embarazo real de su pareja protagonista, David Verdaguer y Mar¨ªa Rodr¨ªguez, germen de una historia de ficci¨®n construida a partir de su intimidad, que se estrenar¨¢ en junio en Espa?a.

Todo empez¨® con un predictor por Skype, en los d¨ªas previos al rodaje de Tierra firme. Verdaguer, convertido en actor fetiche del director, estaba en Londres ensayando, mientras que Rodr¨ªguez se encontraba en Barcelona. ¡°En ese test a distancia se dieron cuenta de que estaban embarazados. Y algo se encendi¨® en m¨ª¡±, confiesa Marqu¨¦s-Marcet en una pausa del rodaje de En el corredor de la muerte, la serie inspirada en el libro de Nacho Carretero que prepara para Movistar +. El director dio unos d¨ªas de fiesta a Verdaguer para que lo celebrara junto a su compa?era. Pero el actor se march¨® a Barcelona con un encargo: proponerle rodar este proyecto, entonces todav¨ªa en estado embrionario. ¡°Acept¨¦ enseguida¡±, recuerda Rodr¨ªguez, cuyo cuerpo fue cambiando delante de la c¨¢mara a medida que avanzaba la gestaci¨®n. ¡°Tal vez haya sido un poco inconsciente. Ha sido al verla terminada cuando me he dado cuenta del viaje que hemos hecho¡±, agrega la actriz.

En realidad, la pareja no se interpreta a s¨ª misma en la pel¨ªcula. ¡°No me interesaba que fuera un documental o un reality sobre un embarazo¡±, afirma el director. Prefiri¨® construir personajes de ficci¨®n con sus actores, que en la pel¨ªcula tienen nombres y oficios distintos: Verdaguer es Llu¨ªs, un joven abogado, mientras que Rodr¨ªguez se llama Vir y es periodista. ¡°Esos personajes fueron el veh¨ªculo que nos han permitido mostrar su intimidad. Si nos hubi¨¦ramos acercado a ellos de manera m¨¢s directa, hubiera sido mucho m¨¢s dif¨ªcil¡±, opina Marqu¨¦s-Marcet. ¡°El ¨²nico l¨ªmite que puse fue no grabar el parto, porque no quer¨ªa vivirlo delante de la c¨¢mara¡±, afirma Rodr¨ªguez. ¡°Pero no tengo la sensaci¨®n de haber tenido que negociar. Todo se hizo de manera org¨¢nica, con un equipo peque?o de seis o siete personas¡±. ?Un Boyhood de nueve meses? ¡°Me gusta mucho y hay un parecido, pero no la considero un referente. De hecho, empezamos a rodar tan r¨¢pidamente que no tuvimos tiempo de buscar influencias¡±, sonr¨ªe Marqu¨¦s-Marcet, que prefiere encontrarlas en el cine experimental de Stan Brakhage, que en 1959 ya film¨® el nacimiento de su primog¨¦nita en la pel¨ªcula Window Water Baby Moving.

Pese a partir de la ficci¨®n, las vivencias de la pareja no tardaron en infiltrarse en el proyecto. Cuando Rodr¨ªguez perdi¨® un papel en el teatro por su embarazo ¨C¡°la productora no quiso asegurarme¡±, lamenta la actriz¨C, se decidi¨® que la periodista a la que interpreta tambi¨¦n ten¨ªa que quedarse en el paro. En la pel¨ªcula, que condensa en 95 minutos casi un a?o y medio de rodaje, predominan los reflejos deformantes entre ficci¨®n y realidad, de la euforia inicial a los miedos que llegan despu¨¦s, as¨ª como las diferencias que brotan dentro de una pareja que aprender¨¢ a conocerse durante el embarazo. ?Parto natural o epidural? ?Escuela p¨²blica o privada? ?Debe uno empezar a comportarse como un adulto responsable o puede seguir viviendo como siempre? Marqu¨¦s-Marcet ambienta su historia en una Barcelona realista y reconocible, en un barrio del Born alejado de la postal tur¨ªstica, en la que una frase se empieza en catal¨¢n y se termina en castellano, y con el acompa?amiento musical de las canciones de Maria Arnal y Marcel Bag¨¦s.

A medio rodaje, Marqu¨¦s-Marcet dio con la aut¨¦ntica joya de esta pel¨ªcula: el v¨ªdeo dom¨¦stico que refleja el parto de 48 horas con el que dio a luz su madre. ¡°Lo hizo un amigo de mis padres que era fot¨®grafo, de manera totalmente amateur. Mi madre, que es profesora, se lo pon¨ªa a sus alumnos para ense?arles de d¨®nde ven¨ªan los ni?os. Yo no sab¨ªa si morirme de orgullo o de verg¨¹enza¡±, bromea Rodr¨ªguez. El director decidi¨® integrar ese v¨ªdeo en su pel¨ªcula, introduciendo la cuesti¨®n de la transmisi¨®n de una generaci¨®n a la siguiente, e incluso rod¨® una secuencia con la familia de su actriz. De repente, la pel¨ªcula se convirti¨® en el particular v¨ªdeo dom¨¦stico que Verdaguer y Rodr¨ªguez legar¨¢n a su hija. ¡°Ese v¨ªdeo es uno de los mejores regalos que me hayan hecho. Salvando las distancias, quer¨ªa que mi hija tuviera algo as¨ª¡±, afirma la int¨¦rprete. Esa ni?a, que cumplir¨¢ dos a?os en mayo, tambi¨¦n aparece en varias secuencias de Los d¨ªas que vendr¨¢n. Aunque incluso ese beb¨¦ interprete un personaje: en la pel¨ªcula se llama Zoe, mientras que en la vida real responde al nombre de Lupe.