El susurro de la luna

Jos¨¦ Padilla est¨¢ jubiloso y tiene motivos. El mes que viene, la versi¨®n francesa de Las cr¨®nicas de Peter Sanchidri¨¢n se ver¨¢ en La FabricA de Avi?¨®n, y el pr¨®ximo verano, en el mismo festival. Y el 22 de mayo (hasta el 16 de junio) va a estrenarse El viaje, la segunda parte de Las cr¨®nicas, en la sala grande del Pav¨®n Kamikaze, donde Padilla recibi¨® la segunda beca de escritura. Me cuenta: ¡°Lo del Pav¨®n es un regalo, pero lo de Francia era de no cre¨¦rselo¡±.

Tradujo la obra Victoria Mariani para la editorial Les Solitaires Intempestifs, y apareci¨® en abril de 2018. El pasado diciembre, Mariani le llam¨® para decirle que en la Com¨¦die-Fran?aise quer¨ªan hacer una lectura dramatizada ¡°con unos actorazos que sirvieron de maravilla tono y fondo¡±. A los pocos d¨ªas, el texto de Padilla recibi¨® el Premio Coup de Coeur, que otorga un p¨²blico seleccionado por la Com¨¦die. Luego comenz¨® el trabajo en El viaje con el reparto espa?ol. Anoto: Crist¨®bal Su¨¢rez, Laura Barrachina, Pepe Viyuela, Laura Gal¨¢n, Ana Varela, Antonia Paso, Jos¨¦ Juan Rodr¨ªguez y un invitado sorpresa.

Me abalanzo sobre los cuatro episodios que, para no variar, van de lo cotidiano a lo fant¨¢stico, de lo c¨®mico a lo estremecedor. Me encantan esas historias, porque nunca s¨¦ por d¨®nde van a llevarme. En Tres d¨ªas de aire volvemos a encontrarnos al astronauta Otto, conocemos al temible Oleg (alias de Olegario Manuel Socu¨¦llamos, un personaje que pod¨ªa haber encarnado el mism¨ªsimo Landa) y escuchamos a la nave C.R.I.S.T.I.N.A, que se hace o¨ªr en las cuatro entregas porque aqu¨ª tiene m¨¢s pico que Hal 9000.

El segundo episodio se llama Dientes y solo puedo decirles que va de eso, y que sus protagonistas se enfrentan a un misterioso personaje que naci¨® en los d¨ªas de Alfonso XIII. Y que parece, de nuevo, un relato de Richard Matheson en clave tan castiza como inquietante.

El tercer episodio se llama?Intermedio?y podr¨ªa haberlo escrito Aaron Sorkin tras un paseo por la Dimensi¨®n Desconocida. Padilla vuelve a hacer gala de sus marcas de f¨¢brica. Un gran talento para la sorpresa y un gran olfato para el ritmo coloquial a cien por hora: personajes contra reloj, situaciones al l¨ªmite. En este caso tenemos a un pol¨ªtico actual que quiere cortar el bacalao y al que ofrecen ser un ganador irreversible. Por supuesto, la oferta tiene un precio.

De nuestros d¨ªas pasamos a Florita, que sucede en el Madrid de 1955. Oscura Espa?a franquista, en la que destella una joya: una imaginativa comedia de magia, que parece una f¨¢bula de Jaime de Armi?¨¢n, perfumada con esencia Sanzol. La le¨ªa y no me costaba imaginarla interpretada por L¨®pez V¨¢zquez y Amparo Bar¨®. O por Julia Guti¨¦rrez Caba.

Florita cierra la funci¨®n con la reaparici¨®n de un personaje que no puedo revelar, lo siento, y con esta misteriosa y po¨¦tica frase: ¡°Cuando escuches el susurro de la luna te perdonar¨¦¡±. Y seguro que Padilla debe andar ya imaginando los relatos de Aterrizaje, que cerrar¨¢ la trilog¨ªa de Las cr¨®nicas de Peter Sanchidri¨¢n.