Dentro de la gran ola de Kanagawa
Madrid acoge una exposici¨®n inmersiva del colectivo japon¨¦s Teamlab, pioneros del arte digital
Los visitantes se fotograf¨ªan con el oleaje y la espuma que babea su violencia, al fondo, en movimiento. Pretenden sumergirse en el tortuoso mar que Katsushika Hokusai (1760¨C1849) ilustr¨® en las Treinta y seis vistas del monte Fuji. No obstante, Teamlab,?un colectivo de artistas japoneses,?ha suprimido a la musa y centinela del pintor del periodo Edo en la exposici¨®n inmersiva que acoge el Espacio Fundaci¨®n Telef¨®nica en Madrid.?La gran ola de Kanagawa, una estampa de este volc¨¢n que descuella tras las ondas hambrientas de una masa de agua convulsa, es la inspiraci¨®n inequ¨ªvoca de su??Black Waves: lost, immersed and reborn (Olas negras: perdidos, inmersos y renacidos). Pero no hay ni rastro del vig¨ªa de Hokusai; el mar es el ¨²nico elemento.
A trav¨¦s de m¨¢s de 30 proyecciones, suelos reflectantes y sonido ambiental ¨Ca veces, incluso, agregan aromas¨C, el colectivo japon¨¦s genera un universo audiovisual de enormes pantallas y poderoso efecto inmersivo, donde la recreaci¨®n visual del agua juega un papel protagonista. La marejada se calma, se encrespa y, de s¨²bito, las primeras grandes olas ¨Crecortadas sobre fondo negro¨C asaltan al espectador, dispuestas a engullirlo como a un velero extraviado. La propuesta de este colectivo es acabar con el viejo formato de las exposiciones al uso;?los paseos de sala en sala por los museos. Se acab¨®, para ellos, el permanecer en pie delante de una obra est¨¢tica y que la sintamos como 'presa' dentro del marco.?¡°Tras calcular la interacci¨®n de miles de part¨ªculas entre s¨ª¡±, explica Kazumasa Nonaka, integrante y director del proyecto, ¡°forjamos un espacio tridimensional generado por ordenador, que expresa su movimiento en una ola continua y¡¡±. Ante un asentimiento confuso por parte de la periodista, prosigue: ¡°Como se puede intuir, yo no participo de la parte art¨ªstica¡±.
Nonaka es el arquitecto. Desde hace menos de tres a?os, su trabajo en Teamlab se desarrolla en un terreno en el que confluyen arte, f¨ªsica, matem¨¢ticas, programaci¨®n, animaci¨®n digital, dise?o gr¨¢fico e ingenier¨ªa inform¨¢tica. No suelen especificar el n¨²mero de integrantes del equipo porque la parte organizativa de este colectivo art¨ªstico es ¡°ca¨®tica¡± y no tienen ¡°un liderazgo claro¡±, pero calcula que son ¡°cerca de 550 personas trabajando alrededor de todo el mundo desde hace m¨¢s de un decenio¡±. La obra se completa tras meses o, incluso, un a?o de trabajo. ¡°Pero nunca la soltamos; es decir, podemos volver sobre una misma obra y revisarla continuamente¡±, advierte.
Las instalaciones de Teamlab funcionan de manera similar a?la reciente Van Gogh Alive ¨C The Experience, con la diferencia de que en esta exposici¨®n multimedia, la presencia de los asistentes reformula la proyecci¨®n. Ubicada en el centro de la sala, Flutter of Butterflies, born from Hands?(Aleteo de Mariposas, nacidas de las Manos) invita al espectador a generar una eclosi¨®n de mariposas bajo la palma de su mano. Pos¨¢ndola sobre el tapiz, cientos de palomillas desaparecen o aparecen?aleteando a trav¨¦s del contacto f¨ªsico con la obra. ¡°Nuestro trabajo evoluciona en tiempo real, se encuentra en una transformaci¨®n continua que depende del entorno y que hace que el movimiento de las mariposas no se repita jam¨¢s¡±, asegura Nonaka.
La ¨²ltima sala es una vuelta sobre las ra¨ªces de la cultura japonesa. Enso ¨C Cold Light?(Enso ¨C Luz Fr¨ªa) reinterpreta la caligraf¨ªa tradicional revolucion¨¢ndola hacia lo que han denominado ¡°caligraf¨ªa espacial¡±. En el zen, el ¡®enso¡¯ simboliza la iluminaci¨®n, el equilibrio, la elegancia, el universo y el vac¨ªo; el icono supremo, el tel¨®n opaco. Es un juego de contrarios, como el?C¨ªrculo negro de Mal¨¦vich. El ying y el yang, la oscuridad y la luz, la vida y la muerte. Para Nonaka, ¡°el inicio y el final; el momento en que la mente se libera para que el cuerpo o el esp¨ªritu pueda crear¡±. El c¨ªrculo queda suspendido en el espacio en un movimiento tridimensional que permite recorrerlo desde distintos puntos de vista y que invita al observador a fundirse con el trazo.
Pero no se confundan. ¡°No pretendemos distribuir nuestro arte a trav¨¦s de pantallas¡±, se?ala Nonoka, y prosigue: ¡°Nunca sustituir¨ªamos esa posibilidad por la de contar con un espacio real, lo nuestro es arte abierto, para la gente, para la interacci¨®n y la colectividad¡±. Los visitantes, en cambio, no cesan de tomarse fotograf¨ªas a s¨ª mismos. ¡°Ahora no nos molesta, pero, al menos al principio, no est¨¢bamos seguros de que aquello significara ver?la obra¡±, revela. ¡°No quer¨ªamos que sucediera esto y, a la vez, hemos logrado entender que colgar estos selfis en las redes genera una interacci¨®n que, de nuevo, vuelve a conectar a la gente, un car¨¢cter crucial en nuestra obra¡±, concluye. Su mirada regresa a Black Waves. Cerca, una espectadora deja por un momento de mirar al m¨®vil para entregarse a la gran ola de Kanagawa. La imagen es hipn¨®tica.
?Qui¨¦nes son los 'ultratecn¨®logos'?
- TeamLab es un colectivo art¨ªstico multidisciplinar fundado por Toshiyuki Inoko, en Jap¨®n, en 2001. Su obra se desarrolla en el terreno en el que convergen arte y ciencia.
- Autodenominados "ultratecn¨®logos" por su uso de lo tecnol¨®gico como herramienta para ampliar las posibilidades del arte, tambi¨¦n tratan de generar nuevas formas de relacionarnos con el entorno y nuestros cong¨¦neres a trav¨¦s de sus obras.
- La muestra podr¨¢ visitarse desde el 16 de marzo hasta el 9 de junio en la cuarta plata de Espacio Fundaci¨®n Telef¨®nica. Desde las 10.00 hasta las 20.00. Visitas comentadas a partir del martes 24 de marzo. Sonido: Hideaki Takahashi.
Babelia
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