Eleg¨ªa cl¨¢sica por el orden
Su estructura de manual de guion, con frase clave en el momento clim¨¢tico, empeque?ece un conjunto sobrio, que da la vuelta a la historia de Bonnie y Clyde
Bonnie and Clyde, de Arthur Penn, trasciende el hecho de ser una obra maestra sobre unos personajes m¨ªticos y un periodo fundamental en la historia del siglo XX de Estados Unidos. La pel¨ªcula, junto a El graduado, de Mike Nichols, tambi¨¦n estrenada en 1967, configur¨® el principio del gran cambio, el del salto mortal creativo, narrativo e industrial hacia el Nuevo Hollywood. Por ambas cuestiones, su calidad y su trascendencia art¨ªstica, la pel¨ªcula de Penn es intocable.
EMBOSCADA FINAL
Direcci¨®n: John Lee Hancock.
Int¨¦rpretes: Kevin Costner, Woody Harrelson, Kathy Bates, John Carroll Lynch.
G¨¦nero: policiaco. EE UU, 2019.
Duraci¨®n: 132 minutos.
Y justo por eso la idea de virar el punto de vista de la historia hacia los agentes de la ley que acabaron con la pareja de criminales, manteniendo (casi) en todo momento a los atractivos Bonnie Parker y Clyde Barrow fuera de campo, de espaldas, desenfocados, en escorzo o filmados sin ofrecer sus rostros, parece una excelente idea. Emboscada final, de estreno exclusivo en Netflix, escrita por John Fusco, siempre apegado a la ¨¦pica desde su primer libreto para Walter Hill (Cruce de caminos), y dirigida por John Lee Hancock, un aspirante menor a Clint Eastwood en pel¨ªculas como El ?lamo (La leyenda) y The blind side, se convierte as¨ª en una obra de aliento cl¨¢sico y sustancia desmitificadora: ¡°?Bonnie y Clyde unos robinhoods? ?Disparar¨ªa Robin Hood al due?o de una gasolinera por cuatro pavos?¡±.
Frank Hamer, ranger de Texas, dibujado como un inepto en la pel¨ªcula de Penn escrita por Benton y Newman, tiene aqu¨ª el porte honorable, la personalidad rotunda y la decencia habitual de los personajes de Kevin Costner, enorme presencia que entre finales de los a?os ochenta y principios de los noventa se convirti¨® en el Gary Cooper de nuestra generaci¨®n, y que desde entonces ha penado un oscuro e injusto barbecho del que ya es hora de que salga. Y junto a ¨¦l, como ayudante, est¨¢ Woody Harrelson, lo que lleva a que, como historia policial que es, de b¨²squeda, carretera, mucha conversaci¨®n y evidente redenci¨®n, lleve en alg¨²n momento a pensar en un True detective de ¨¦poca.
Sin embargo, tanto en el esp¨ªritu como en sus recursos formales, tipo de fotograf¨ªa y tono, acrecentados adem¨¢s por el periodo hist¨®rico, ambas ambientadas durante la Gran Depresi¨®n, y por el m¨²sico elegido para la banda sonora, Thomas Newman, magn¨ªfico pero que nunca ha destacado por su variedad de registros, con la pel¨ªcula que Lee Hancock quiere emparentar claramente su trabajo es con Camino a Perdici¨®n (2002). Aunque no alcance la hondura dram¨¢tica y la belleza formal de la pel¨ªcula de Sam Mendes.
En la labor de Fusco quiz¨¢ lo mejor sean sus paralelismos con la actualidad pol¨ªtica americana: la pobreza en cada esquina, los campamentos de migrantes y la encarnaci¨®n como estrellas del pop social de Bonnie Parker y Clyde Barrow: ¡°?Roban a los bancos que roban a los pobres!¡±. Pero esa estructura de manual de guion, con frase clave (¡°?Arriba las manos!¡±) en el momento clim¨¢tico, empeque?ece un tanto un conjunto sobrio y carism¨¢tico, por esa original visi¨®n del suceso (aunque seguramente no demasiado rigurosa), y siempre interesante, incluso en lo pol¨ªtico: por ese tono de eleg¨ªa cl¨¢sica tan acorde con estos tiempos. De ese modo, la contracultural, rabiosa y de protesta cortante Bonnie & Clyde, en plena sangr¨ªa de Vietnam y durante la lucha por los derechos civiles, queda confrontada en 2019 por esta Emboscada final con voluntad de orden, honor y legalidad.
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