Grave incendio en la catedral de Notre Dame de Par¨ªs, joya del g¨®tico europeo

Quienes a esa hora paseaban por las calles y millones de personas en todo el mundo asistieron alucinados en vivo o por televisi¨®n, en sus ordenadores o m¨®viles a la destrucci¨®n del edificio m¨¢s conocido de la ciudad junto a la Torre Eiffel, nueve siglos de piedras bajo las llamas que todo lo devoran y que dejar¨¢n una herida que tardar¨¢ en repararse.

Cerca de la medianoche, cuando el fuego parec¨ªa controlado, el presidente franc¨¦s, Emmanuel Macron, acudi¨® por segunda vez al pie de la catedral, y declar¨®: ¡°Se ha evitado lo peor, aunque la batalla no se ha ganado del todo¡±. ¡°Gracias a la valent¨ªa [de los bomberos] se han salvado las torres y la fachada¡±, a?adi¨®, antes de anunciar una colecta nacional e internacional para la reconstrucci¨®n: ¡°Reconstruiremos Notre Dame, porque es lo que los franceses esperan, lo que nuestra historia merece, nuestro destino profundo¡±.

El incendio se declar¨® hacia las 18.50. Su origen se encuentra en las obras de renovaci¨®n que se realizaban en el viejo templo, seg¨²n las primeras informaciones oficiales. Los turistas de la zona fueron desalojados. Los obreros que trabajan en la restauraci¨®n del edificio no se hallaban en aquel momento. La Fiscal¨ªa de Par¨ªs ha abierto una investigaci¨®n por destrucci¨®n involuntaria por incendio. La ausencia de v¨ªctimas mortales ¡ªsolo un bombero sufri¨® heridas graves en las operaciones de rescate¡ª es la ¨²nica buena noticia de la noche de fuego y cenizas en la isla de la Cit¨¦, en el Sena, en el coraz¨®n de la capital, el lugar al que ning¨²n visitante puede dejar de acudir, punto de encuentro entre las dos riberas de Par¨ªs, kil¨®metro cero de Francia, epicentro de una urbe vibrante golpeada en a?os recientes por atentados sangrientos, pero nunca por una destrucci¨®n del patrimonio que puede recordar a los incendios de los teatros del Liceo en Barcelona en 1994 y La Fenice en Venecia dos a?os despu¨¦s.

¡°Todo est¨¢ ardiendo. De la estructura, que data del siglo XIX por un lado y del XIII por otro, no quedar¨¢ nada¡±, dijo tras declararse el siniestro Andr¨¦ Finot, portavoz de Notre Dame, a la agencia France Presse. ¡°Est¨¢ ardiendo un gran lugar de la fe cat¨®lica¡±, se?al¨® un portavoz del arzobispado. ¡°Mis colegas intentar¨¢n entrar dentro, pero el objetivo es no perder hombres¡±, destac¨® un bombero, citado por el mismo medio.

Cuando la aguja y el techo de Notre Dame se derrumbaron, cerca de una hora despu¨¦s de que saltasen las primeras llamas y del tejado saliese una humareda visible desde buena parte de la ciudad, lo que se hundi¨® fue m¨¢s que una vieja iglesia g¨®tica. Construida entre los siglos XII y XIV, emblema del catolicismo franc¨¦s y atracci¨®n tur¨ªstica que recibe unos 13 millones de visitantes anuales, en sus naves se resum¨ªa una parte de la historia de Par¨ªs y Francia.

Era lo m¨¢s arcaico que quedaba hecho cenizas y, a la vez, ante las miradas de todo el planeta, que segu¨ªa segundo a segundo el incendio como un espect¨¢culo siniestro en tiempo real. Una versi¨®n actualizada y, por fortuna, sin la devastaci¨®n humana de los ataques terroristas de 2001 en Nueva York. Unos 400 bomberos participaron en las tareas de extinci¨®n. La isla de la Cit¨¦ fue parcialmente evacuada.

Mensajes de aliento

Macron anul¨® un discurso solemne que ten¨ªa previsto pronunciar anoche y se desplaz¨® hasta el lugar de los hechos. La canciller alemana, Angela Merkel, lament¨® la destrucci¨®n de ¡°un s¨ªmbolo de Francia y de la cultura europea¡±, mientras que el presidente del Gobierno espa?ol, Pedro S¨¢nchez, manifest¨® su consternaci¨®n ante tama?o desastre. La Casa del Rey public¨® un mensaje en su cuenta en Twitter: ¡°El pueblo franc¨¦s la reconstruir¨¢, la levantar¨¢ de nuevo. Y estaremos ah¨ª, el mundo entero est¨¢ y estar¨¢ con Francia. La catedral de Notre Dame resurgir¨¢ de sus cenizas¡±.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, propuso en un mensaje en esa misma red social apagar el incendio desde el aire. La Seguridad Civil francesa precis¨® que era peligroso lanzar agua desde un helic¨®ptero o un avi¨®n, pues la intensidad y la baja altura podr¨ªan debilitar la estructura y provocar da?os colaterales en los edificios de los alrededores.

M¨¢s informaci¨®n

Un devastador incendio golpea la catedral de Notre Dame, icono de la cultura europea

El incendio en Notre Dame, en im¨¢genes

Otros incendios que devastaron la cultura

As¨ª ha ca¨ªdo la aguja de la Catedral de Notre Dame durante el incendio

¡°Lo que se pierde en el fuego es irrecuperable¡±

Notre Dame: la catedral donde se cruzan todos los caminos de Francia

¡°No estamos seguros de poder contener la propagaci¨®n a la torre norte. Si se derrumba, les dejo imaginar la importancia de los da?os¡±, declar¨® a los periodistas Jean-Claude Gallet, comandante de la brigada de bomberos de Par¨ªs. M¨¢s tarde, volvi¨® a comparecer para anunciar que las torres se hallaban a salvo y que la prioridad era rescatar el m¨¢ximo de obras de arte.

El fuego todav¨ªa no estaba apagado cuando se escucharon los primeros llamamientos para la reconstrucci¨®n y se evocaba la destrucci¨®n ¡ªesta bajo el fuego y las bombas¡ª de otra gran catedral francesa: la de Reims, al principio de la I Guerra Mundial. Su reedificaci¨®n fue una gran causa nacional en el periodo de entreguerras, porque era un s¨ªmbolo b¨¦lico, patri¨®tico y religioso. El de Notre Dame es un s¨ªmbolo de la irradiaci¨®n global de Par¨ªs y tambi¨¦n de un pa¨ªs que, pese a laicidad que es una parte constitutiva de la identidad nacional, sigue teniendo en su menguante catolicismo un fundamento de su identidad cultural. Fue bajo el reino de Luis VII, en 1163, que se puso la primera piedra de Norte Dame.

Notre Dame, que es propiedad del Estado franc¨¦s, trascendi¨® hace tiempo su car¨¢cter religioso. Hoy es un icono de la cultura popular, inseparable del perfil urbano de la capital, el skyline, si esta palabra inglesa pudiese aplicarse a esta ciudad casi sin rascacielos ni edificios modernos. La reconstrucci¨®n empieza este martes y la asignaci¨®n de responsabilidades, tambi¨¦n.

Al caer la noche, el fuego todav¨ªa iluminaba el edificio. El 15 de abril de 2019, un imborrable lunes de fuego y ceniza en el coraz¨®n de Par¨ªs y de Europa.