Isma Romero: la m¨²sica es un partido que hay que jugar
El m¨²sico, al que apoyan Bely Basarte, David Otero y Andr¨¦s Su¨¢rez, comienza una gira por Espa?a
Son las cuatro de la tarde, hace un sol de justicia en Madrid y el fot¨®grafo est¨¢ colocando a Isma Romero (Valencia, 1992), que no sabe si quitarse o no la bufanda, frente a una pared de La Latina. Antes de enfrentarse al objetivo, Romero pregunta si es posible grabarle un par de v¨ªdeos del making of de la sesi¨®n de fotos. ¡°Es para mis redes. Me encargo yo de llevarlas y alimentarlas es importante¡±, explica. Acaba de presentar Cicatriz, una canci¨®n que, revela, habla de c¨®mo las personas se van construyendo a trav¨¦s de estas marcas indelebles. ¡°Nos hacen crecer. Hacen da?o pero tambi¨¦n nos hacen evolucionar. Una cicatriz no es una herida, es un recuerdo. Con este tema, sobre todo, quer¨ªa restarle negatividad a las cicatrices porque nos construyen cada d¨ªa¡±.
En 2017, este valenciano que se present¨® en Madrid a los 18 a?os con solo 250 euros en el bolsillo, public¨® su segundo ¨¢lbum: Luminiscencia (Warner). A?o y medio despu¨¦s, Romero ha cambiado de sello, en verano publicar¨¢ nuevo EP con Sin Anestesia (sello de RLM), arranca gira en abril y reconoce que vivir de la m¨²sica es surrealista. ¡°Yo he logrado organizarme de tal forma que todos mis ingresos est¨¢n relacionados con la m¨²sica. Adem¨¢s de dar conciertos y grabar discos, doy clases particulares de guitarra. Cuando llegu¨¦ a Madrid me acogi¨® el Twanguero en su casa. Eso me salv¨® los dos primeros a?os en la capital¡±, reconoce. Isma Romero entiende su profesi¨®n como un partido. Ha venido a jugar y muchos momentos, los cr¨ªticos, requieren remontar. Estos son precisamente los m¨¢s necesarios. ¡°Hay que tirar para adelante. Al final, no sabes c¨®mo vas a salir de ah¨ª cuando las cosas vienen mal dadas pero acabas saliendo. La vida va de echarle ganas¡±, asegura el m¨²sico.
Las influencias de Isma Romero?pasan del pop rock de toda la vida -Los Rodr¨ªguez, Jarabe de palo o Bunbury- a los tintes latinoamericanos que destilan m¨²sicos como Celia Cruz, Juanes o Santana. ¡°No quiero inventar nada, solo quiero contar mis historias de la forma m¨¢s honesta que puedo. No soy Pavaroti¡±, resuelve el cantante. En su nuevo trabajo, producido por Ismael Guijarro y Juancho Guevara, han colaborado Bely Basarte, David Otero y Andr¨¦s Su¨¢rez. Tres artistas de tres mundos diferentes unidos por las canciones. ¡°En este disco he ido al grano. Quer¨ªa acercarme m¨¢s a la canci¨®n cl¨¢sica -melod¨ªa, letra y m¨²sica sin florituras- pero actualizando el sonido. Lo que busco en una canci¨®n es que transmita solo a guitarra y voz¡±, matiza.
No duda en defender Operaci¨®n Triunfo, concurso denostado por muchos m¨²sicos y ensalzado por otros. ¡°Se trata de hacer canciones y de contar historias. Lo respeto enormemente. Los detractores se aburren mucho¡ Yo tengo amigos de OT, conozco a concursantes y me parecen artistazos. Todos son gente con pasi¨®n y grandes compositores que a trav¨¦s del concurso han encontrado visibilidad¡±, afirma. ¡°Pablo L¨®pez es un artista como la copa de un pino. Ojal¨¢ alg¨²n d¨ªa toque con ¨¦l¡±.
Precisamente en la ¨²ltima edici¨®n de Operaci¨®n Triunfo surgi¨® una pol¨¦mica relacionada con el uso machista del lenguaje en las canciones. Dos concursantes, Mar¨ªa y Miki, se negaron a decir ¡°mariconez¡±, palabra que Mecano cantaba en Qu¨¦date en Madrid en 1989. ¡°Veo bien que revisemos nuestro vocabulario y ciertas expresiones. Pero hay que entender que esto se cre¨® en un contexto social determinado. Hay cosas que se han hecho mal, pero ya est¨¢n hechas. Vamos a trabajar en el hoy y hacerlo bien a partir de ahora. Meterse en jaleos no va a arreglar nada¡±, opina Romero, que agradece que sus amigos y su pareja no tengan mucho que ver con la m¨²sica, pues esta circunstancia le da la oportunidad de enriquecerse y hablar de otras cosas. ¡°Lo ¨²nico importante es vivir la vida. Todo pasa tan r¨¢pido que no nos damos cuenta de que se nos pasa la vida¡±.
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