La v¨ªctima de acoso escolar que acab¨® ganando Eurovisi¨®n

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Cuando el voto del p¨²blico dio la victoria en el 64 festival de Eurovisi¨®n al holand¨¦s Duncan Laurence, 5,3 millones de compatriotas estaban pegados al televisor. Hac¨ªa 44 a?os que Holanda no ganaba el concurso, y la tensi¨®n se mantuvo hasta el final. Holanda pas¨® de la tercera plaza, que tras el dictamen del jurado la manten¨ªa por detr¨¢s de Suecia y Macedonia del Norte, a llevarse el Micr¨®fono de Cristal, y las felicitaciones se desbordaron. Hasta los reyes, Guillermo y M¨¢xima, y el primer ministro, Mark Rutte, llenaron de halagos a Laurence ¡°por su clase¡± y ¡°la calidad de la canci¨®n, Arcade¡±. Horas despu¨¦s, el debate sobre los costes de organizaci¨®n del evento en 2020 matizaba ya el triunfo. El Gobierno ha dicho que no piensa aportar fondos p¨²blicos y la televisi¨®n nacional deber¨¢ arreglarse sola.

La cifra a desembolsar oscila entre los cerca de 30 millones de Israel en esta edici¨®n y los 14 millones gastados por Suecia en 2016, y Rutte aboga por ajustar el presupuesto. Sobre todo porque AvroTros, la cadena p¨²blica encargada de la transmisi¨®n, est¨¢ financiada por el Estado. La discusi¨®n no ha hecho m¨¢s que empezar y varias ciudades, entre ellas ?msterdam, R¨®terdam y Maastricht, se han mostrado dispuestas a acoger Eurovisi¨®n.

Recibido el domingo como un h¨¦roe nacional en el aeropuerto de ?msterdam, el artista ha reconocido que la votaci¨®n se le hizo eterna: ¡°piensas en el esfuerzo y el trabajo en equipo, y de repente, has ganado¡±, ha dicho en rueda de prensa. Una de las cosas que m¨¢s le emocionaron fue la felicitaci¨®n personal del grupo noruego KEiiNO: ¡°me lleg¨® al alma, y demuestra que se pueden conseguir cosas con empe?o; espero haber inspirado a otros talentos para que persigan sus sue?os¡±, a?adi¨®. Minutos despu¨¦s, se abrazaba a su abuela rodeado de admiradores.

A sus 25 a?os, Laurence era el favorito de las apuestas, a pesar de que su balada melanc¨®lica difer¨ªa de la canci¨®n festivalera por excelencia: varias estrofas introductorias y con una misma melod¨ªa, y un estribillo poderoso con la letra y m¨²sica que m¨¢s se recuerdan. Arcade es una composici¨®n sobre la que ha trabajado durante dos a?os junto con el productor Wouter Hardy, y han hecho una veintena de versiones antes de quedarse tranquilos. Es un tema de amor inspirado en una persona que muri¨® joven y estaba enamorada del hombre que la abandon¨®. ¡°Era muy querida para m¨ª, y su desaparici¨®n fue mi primera gran p¨¦rdida. De esa historia saqu¨¦ la inspiraci¨®n¡±, ha explicado el cantante, que no pensaba proponerla para Eurovisi¨®n. Lleg¨® por causalidad a manos del jurado interno televisivo que elige al representante nacional.

Puede decirse que todo empez¨® en 2014, cuando Laurence qued¨® semifinalista en la edici¨®n holandesa de La Voz. Su mentora fue Ilse de Lange, una cantante y compositora de m¨²sica country y pop-rock, que cuando escuch¨® Arcade supo que deb¨ªa representar a Holanda. Se lo propuso al int¨¦rprete, al que ha apoyado en Tel-Aviv, sede del festival, subiendo incluso al escenario cuando fue elegido ganador. De Lange es una exitosa veterana de Eurovisi¨®n que qued¨® en segundo lugar en 2014, en un d¨²o con su colega Waylon, con la canci¨®n Calm after the Storm (Calma tras la tormenta). ¡°Sab¨ªa que Arcade era lo que necesit¨¢bamos y con esta victoria no s¨¦ ni c¨®mo me siento. Para un artista como Duncan, al principio de su carrera, equivale a ganar los Juegos Ol¨ªmpicos¡±, asegur¨® muy emocionada la noche triunfal.

Nacido en Spijkenisse, una localidad de la conurbaci¨®n de R¨®terdam, Laurence se llama en realidad Duncan de Moor, y la m¨²sica vertebra su vida. Gan¨® un concurso de talentos a los 16 a?os, y estudi¨® en la escuela holandesa de m¨²sica Rock Academy. Situada en Tilburg, al sur del pa¨ªs, sus actuales estudiantes estaban euf¨®ricos con el triunfo de un artista que reconoce haber hecho ¡°un gran esfuerzo para seguir siendo yo mismo en esta profesi¨®n¡±. Aunque prefiere mantener su intimidad, ha reconocido que ¡°sufr¨ª mucho acoso escolar en primaria y secundaria y he aprendido a centrarme en lo positivo¡±. La mayor duda sobre su futuro, que ¨¦l desea largo y por eso prefiere ir con prudencia, es si podr¨¢ mantener la atenci¨®n del p¨²blico.

Holanda hab¨ªa ganado en cuatro ocasiones el festival (en 1957, 1959, 1969, empatada con Espa?a, Reino Unido y Francia, y 1975) y lo que m¨¢s se recuerda es el pegadizo Ding-a-dong, del grupo Teach-In ese ¨²ltimo a?o. Despu¨¦s, el pa¨ªs no pudo clasificarse en ocho ocasiones para la final y pareci¨® perder el inter¨¦s por la gala. Solo en 2013, cuando la cantante Anouk interpret¨® Birds en Suecia, el p¨²blico recobr¨® la esperanza. Qued¨® novena con un buen tema algo triste, como sucede con Arcade, y para sus compatriotas fue como si hubiera vencido.

Tambi¨¦n es cierto que Eurovisi¨®n, cuya audiencia ronda los 200 millones de personas, lanz¨® la carrera de dos triunfadores muy famosos. Son el grupo sueco Abba, que venci¨® en 1974 con Waterloo, y Celine Dion, la cantante canadiense, primera en 1988, en nombre de Suiza, con Ne partez pas sans moi (No te vayas sin m¨ª). [El festival no exige que el int¨¦rprete proceda del pa¨ªs al que representa]. El talento compositivo de Abba era evidente, y si bien Dion no compone sus canciones, su voz y una buena gesti¨®n profesional le han mantenido en la cima. Son dos ejemplos para el holand¨¦s, que aborda el d¨ªa siguiente a su ritmo: saldr¨¢ de gira europea, tiene un nuevo agente y, seg¨²n los medios nacionales, ha firmado un contrato con la compa?¨ªa Universal Music.