Los beb¨¦s que sobornaron a San Pedro
Los arque¨®logos desentierran en la sierra de Madrid una iglesia con la tumba de nueve neonatos y dos sarc¨®fagos intactos del siglo VII con ¨®bolos para entrar en el Cielo
Eran nueve y fueron enterrados muy cerca del altar. En fila y en una ¨²nica tumba. Al menos, tres de aquellos neonatos portaban entre sus manos monedas acu?adas durante el reinado de Juan II (1405-1454) y que les servir¨ªan para que San Pedro les dejase entrar en el Cielo. Una especie de soborno, el mismo que los griegos, y luego los romanos, abonaban al viejo Caronte para que les autorizase a atravesar el r¨ªo Estigia hacia el inframundo. Una costumbre que compart¨ªan estos beb¨¦s con otros enterramientos de adultos hallados en los restos de la iglesia que los arque¨®logos llevan estudiando desde hace dos a?os en el municipio madrile?o de El Boalo. "De momento, todo son hip¨®tesis, aunque lo de los ni?os es bastante extra?o y es una de las suposiciones de los expertos", explica Paloma Sobrini, directora general de Patrimonio de la Comunidad de Madrid.?
De las 11 tumbas de adultos encontradas -cinco a¨²n sin abrir-, dos inclu¨ªan sarc¨®fagos con cuerpos intactos del siglo VII (del 656 al 727), seg¨²n los resultados de los an¨¢lisis de Carbono 14 efectuados. Pero estas ¨²ltimas osamentas no iban acompa?adas de monedas, sino botellas de doble asa con vino o aceite para convencer al portero del Cielo que su lugar estaba con los justos. "Los recipientes todav¨ªa no han sido abiertos y conservan su sellado original", indica Javier Salido, del Departamento de Prehistoria y Arqueolog¨ªa de la Universidad Aut¨®noma de Madrid (UAM). Un gran puzle, por tanto, en el que se entremezclan creencias romanas del periodo tardoantiguo, pr¨¢cticas visigodas, musulmanas y cristianas. La respuesta se halla en los laboratorios de la Facultad de Biolog¨ªa de la UAM. De entrada, Joaqu¨ªn Barrio, catedr¨¢tico de Arqueolog¨ªa del centro, ha recubierto buena parte del yacimiento con ¨®xido de silicato para evitar su degradaci¨®n por los cambios de temperatura. "Dejar al aire libre todo esto que lleva m¨¢s de mil a?os cubierto, supondr¨ªa un peligro", explica Barrio. Sobrini anuncia, por su parte, que ¡°el yacimiento ser¨¢ visitable, tendr¨¢ se?al¨¦tica propia y se integrar¨¢ en la red regional¡±.
Javier Salido Dom¨ªnguez y Rosario G¨®mez, arque¨®loga de la Asociaci¨®n Cultural Equipo A, son los codirectores de unas excavaciones que tienen su origen en 1998, cuando El Boalo, un municipio de la sierra del Guadarrama, modific¨® sus normas urban¨ªsticas para levantar chal¨¦s a las afueras del pueblo y ¡°empezaron a salir cosas¡±, recuerda Alfonso Baena, teniente alcalde de la localidad. Tumbas, lajas, sarc¨®fagos de piedra, esqueletos¡ El terreno -unos 2.000 metros cuadrados- fue delimitado, reservado a los investigadores y excavado a partir de 2018. La iglesia desenterrada ahora tiene 14 metros de longitud por 7 de ancho, aunque el georradar ha ofrecido unos datos que la ampl¨ªan mucho m¨¢s.
El edificio est¨¢ compuesto por una nave ¨²nica, rematada por un ¨¢bside de planta cuadrada, que sufri¨® reformas importantes con el paso de los siglos y que dejaron estructuras en su interior que a¨²n no han sido estudiadas, como un cuadrado de granito justo en el centro de la nave o una gran losa bajo el altar. "Son dos zonas muy interesantes que tenemos que abrir a¨²n", asegura el director de?Protecci¨®n Y Conservaci¨®n de Patrimonio, Miguel ?ngel Garc¨ªa Valero
En el yacimiento, han llegado a trabajar hasta 40 personas en una sola jornada, entre arque¨®logos, conservadores, historiadores, estudiantes y voluntarios. "Eso ha permitido", se?ala la arque¨®loga Rosario G¨®mez, "que hayamos avanzado mucho en solo dos a?os. La cooperaci¨®n institucional, municipal y acad¨¦mica ha sido muy estrecha".
Las claves para datar el edificio se encontraron en el interior de la nave, donde se hallaron 11 tumbas de adultos no expoliadas (colocadas en sentido este-oeste) y otras siete infantiles, alineadas con los muros perimetrales. Una de ellas corresponde a un sarc¨®fago bien trabajado y pulido, que cuenta con una losa de cierre labrada, con un rebaje a dos aguas. En este sepulcro se inhum¨® primero a una mujer, aunque posteriormente sus restos fueron reducidos para colocar a un hombre que portaba dos anillos decorados de ¨¦poca tardoantigua.?
La iglesia se levant¨® sobre un cerro situado estrat¨¦gicamente junto a la Ca?ada Real Segoviana, una importante v¨ªa de comunicaci¨®n durante la Edad Media, lo que explicar¨ªa las diversas ampliaciones que sufri¨® el edificio original, que tambi¨¦n tuvo un uso isl¨¢mico como demuestran los cinco d¨ªrhams de plata fechados a inicios del siglo IX, hallados en el interior de la nave.?
Para el consejero de Cultura, Turismo y Deportes de la Comunidad de Madrid, Jaime de los Santos, ¡°la colaboraci¨®n entre las instituciones y la universidad es fundamental ya que, no solo contribuye a recuperar el Patrimonio de nuestro pa¨ªs, sino que facilita el conocimiento del mismo por el conjunto de la sociedad¡±. Para De los Santos, ¡°conocer el pasado de nuestra cultura es vital para entender el presente y proyectarnos en el futuro¡±, aunque este pasado sea un cruce de culturas y creencias dif¨ªcil de desentra?ar.?
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