La femenina ley del deseo

Una mujer apasionada, como las que sol¨ªa interpretar Ava Gardner, pero calculadora: Katharine Hepburn la hubiera encarnado de perlas. Leonarda, la viuda determinada a gozar de los placeres conyugales sin volver a casarse, resuelta a meter a un hombre en su cama cada noche sin que nadie lo sepa, es una mujer moderna y lib¨¦rrima, como debi¨® de haber unas cuantas en ese pi¨¦lago de contradicciones que fue el Siglo de Oro espa?ol. Lope de Vega trat¨® con alguna de ellas. Marta de Nevares, a quien dedic¨® la edici¨®n impresa de La viuda valenciana, ten¨ªa cierta semejanza con su protagonista, aunque la descripci¨®n que el poeta hace de las pluscuamperfectas facultades art¨ªsticas de su amada parece idealizada a todas luces. El F¨¦nix estaba tan coladito por ella como Camilo, coprotagonista de su comedia, lo est¨¢ por Leonarda.

Poseedora de una buena renta, cauta respecto a las intenciones de los hombres pero fascinada por Camilo a primera vista, Leonarda persuade a tan guapo mozo (a trav¨¦s del criado de ella) de que se deje conducir a su casa con los ojos vendados, para que all¨ª la tome en la m¨¢s absoluta oscuridad, sin conocer su rostro, su identidad ni sus se?as. As¨ª, por el olfato, el o¨ªdo, el gusto y el tacto pero sin verla nunca, el joven se prenda de ella hasta la locura. Versi¨®n invertida y mundana del mito de Eros y Psique ¡ªdonde es la mujer quien ama sin ver jam¨¢s a su amado¡ª, La viuda valenciana a¨²na sensualidad, humor, agudeza sat¨ªrica y voluntad transgresora. Lope la escribi¨® mientras cumpl¨ªa en la capital del Turia pena de destierro del reino de Castilla por publicar libelos mil contra Elena Osorio, su examante, que hab¨ªa entablado relaciones de conveniencia con el sobrino del cardenal Granvela.

Afirma el hispanista Bruce W. Wardropper que la comedia espa?ola del XVII est¨¢ escrita desde el punto de vista femenino. La viuda valenciana, caso paradigm¨¢tico: est¨¢ a la altura de las mejores de su tiempo. Borja Rodr¨ªguez, autor y director de la versi¨®n estrenada recientemente en el Festival de Almagro, la ha aclimatado en los a?os cincuenta del siglo XX para representarla con un elenco algo m¨¢s reducido que el original. Traerla a dicha ¨¦poca le permite fundir en uno solo los personajes de la criada y el t¨ªo de Leonarda (convertido aqu¨ª en la t¨ªa Julia) y quitar de en medio a Floro, criado de Camilo, que poco interviene en la acci¨®n dram¨¢tica.

El montaje es atractivo, divertido, elocuente y ¨¢gil, aunque cabe resolver m¨¢s diligentemente las transiciones. Pepa Gracia es una actriz con encanto, que ella hace valer en su papel protagonista. Alfredo Noval le imprime a Camilo temple, tempestad y empuje. Rafa N¨²?ez es un gracios¨ªsimo correveidile; Alberto G¨®mez Taboada y Agust¨ªn Ot¨®n, dos expresivos galanes bufos. Arantxa Aranguren hace de Julia una confidente con fuerza y car¨¢cter. Mar¨ªa Cobos le saca fulgor verdadero a su papel epis¨®dico.

La viuda valenciana. Texto: Lope de Vega. Direcci¨®n: Borja Rodr¨ªguez. Festival de Pe?¨ªscola, 27 de julio. Teatro Calder¨®n de Motril, 14 de septiembre.