?De qui¨¦n son los hijos?

¡°Un hospital italiano implanta por error los embriones de una mujer en el ¨²tero de otra. La embarazada quiere quedarse los gemelos tras el parto, aunque no sean suyos, algo a lo que no est¨¢ dispuesta la madre biol¨®gica¡±. La noticia, dada a conocer a la opini¨®n p¨²blica en el a?o 2014 tras la equivocaci¨®n de un hospital de Roma, se las trae en todos los sentidos, empezando por el bio¨¦tico y culminando por el emocional. Pero, en lo que aqu¨ª nos ocupa, el caso es de un evidente inter¨¦s dram¨¢tico, el que ha sabido ver el director venezolano Miguel Ferrari adaptando el ins¨®lito caso a las circunstancias de su pa¨ªs en la estimable, pese a sus errores, La noche de las dos lunas, su segundo estreno en Espa?a tras Azul y no tan rosa (2013), sorprendente premio Goya a la mejor pel¨ªcula iberoamericana en un a?o en el que otra de las candidatas era la chilena Gloria.

Con un buen salto adelanto en materia de producci¨®n, factura t¨¦cnica y narraci¨®n desde la meritoria y rabiosa en lo social pero pedestre en demasiados aspectos cinematogr¨¢ficos Azul y no tan rosa, Ferrari despliega su relato en variadas vertientes: la f¨ªsica, la mental, la moral e incluso la legal. Pero asent¨¢ndose fundamentalmente en la emocional, con una pel¨ªcula que se adentra sin miedo en los c¨®digos del melodrama, sabedora desde el inicio de que buena parte de sus particularidades entroncan directamente con el follet¨ªn. E incluso juega al metalenguaje con ese personaje interpretado por Mar¨ªa Barranco (la producci¨®n tiene un 20% de financiaci¨®n espa?ola), inmersa en un culebr¨®n vital, y arrolladora hasta el desmayo soltando frases c¨¦lebres de pel¨ªculas, como una suerte de culebr¨®n interior dentro del melodrama.

La grandilocuencia musical impuesta por Ferrari y el autor de la banda sonora, Sergio de la Puente, a veces no se corresponde con las im¨¢genes a las que acompa?a y, m¨¢s que elevarlas, las anula. Sin embargo, lo esencial en La noche de las dos lunas es que articula bien las implicaciones del caso sobre la base de una gran pregunta de complicada respuesta: ?de qui¨¦n son los hijos? ¡°Si no es tuyo, lo ser¨¢¡±, dicen a la embarazada. As¨ª, la historia, repleta de adultos que fueron hijos no deseados en su momento, enlaza bien con no pocos dilemas contempor¨¢neos, desde los vientres de alquiler a la disputa entre dos parejas que luchaban por un mismo sue?o y que cayeron en un infierno moral irresoluble.