Nuestro cine
Ser¨ªa lamentable que RTVE no aprovechara como serie la versi¨®n completa del proyecto Historias de nuestro cine, pero el n¨²mero de decisiones lamentables del Ente desbordan las previsiones
Se estren¨® en San Sebasti¨¢n y clausur¨® el ?pera Prima de Tudela. Pronto llegar¨¢ Historias de nuestro cine a las salas. Una declaraci¨®n de amor al cine espa?ol de dos de sus profesionales: Ana P¨¦rez-Lorente y Antonio Resines. Un recorrido desde Segundo de Chom¨®n hasta hoy sin mayores pretensiones que rendir homenaje a la cinematograf¨ªa nacional y pas¨¢rselo bien. Dos deseos cumplidos, pues las casi dos horas de proyecci¨®n se hacen cortas y se reivindica justamente una cinematograf¨ªa que ha creado obras maestras sin medios econ¨®micos notables y que ha sobrevivido al tradicional desprecio de todos los Gobiernos, salvo en los primeros a?os del franquismo, cuando el desprecio se convirti¨® en persecuci¨®n con sa?a y censura.
La idea del documental surgi¨® de las memorias del actor: Pa¡¯ habernos matao. Memorias de un calvo. La forma: una muy trabajada selecci¨®n de secuencias, un excelente material de archivo y una amplia lista de entrevistados que recuerdan an¨¦cdotas con el tono de una tertulia entre amigos. Las m¨¢s de cinco horas montadas se tuvieron que reducir a una hora y 50 minutos por razones de exhibici¨®n. Ser¨ªa lamentable que RTVE, que intervino en su financiaci¨®n, no aprovechara como serie la versi¨®n completa del proyecto, pero el n¨²mero de decisiones lamentables del ente desborda todas las previsiones.
Intervienen int¨¦rpretes, directores, productores y guionistas, y nos hacen re¨ªr. Es una visi¨®n del cine alejada de trascendentalismos. Aunque sin total seguridad parecen pasados los tiempos en los que simpatizantes de la derecha insultaban a Almod¨®var, por ejemplo, se mantiene el ya tradicional ninguneo de nuestros l¨ªderes pol¨ªticos a la cultura. Solo hace falta comprobar las veces que la nombran en la en¨¦sima campa?a electoral.
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