Vetusta Morla y los grandes conciertos de su vida
La banda, que actuar¨¢ tres noches en el WiZink de Madrid cerrando gira en Espa?a, recuerda las actuaciones que marcaron a sus miembros
Cuando en verano de 1998 un grupo de chavales form¨ª¨® en la localidad madrile?a de Tres Cantos una banda con el nombre de Vetusta Morla, nunca pensaron que, dos d¨¦cadas despu¨¦s, estar¨ªan tocando tres noches seguidas en uno de los recintos m¨¢s emblem¨¢ticos y grandes de Madrid. Vetusta Morla ofrecer¨¢ tres conciertos en el WiZink Center, el recinto que, entonces, en el siglo XX, cuando ellos se buscaban las casta?as por peque?as salas de la capital, era conocido como el Palacio de los Deportes. Ser¨¢n el viernes 27, s¨¢bado 28 y domingo 29 de diciembre, poniendo fin a la gira Mismo sitio, distinto lugar, perteneciente a su ¨²ltimo disco. Solo quedan algunas entradas para el ¨²ltimo d¨ªa. Esta gira ya les llev¨® el a?o pasado a llenar un aforo propio de las grandes estrellas internacionales cuando metieron en un solo d¨ªa a 38.000 almas en la Caja M¨¢gica, de Madrid. Ahora, mientras cuentan los minutos para arrancar tres noches ¡°especiales¡±, los miembros del grupo con uno de los directos m¨¢s arrolladores de la m¨²sica espa?ola recuerdan en un encuentro con EL PA?S aquellos conciertos que les marcaron hasta el punto de que, sin ellos, quiz¨¢, nunca se hubiesen decidido a montar una banda.
La ¡°energ¨ªa¡± de Nirvana. Sentados sobre las gradas vac¨ªas del WiZink Center, cinco de los seis integrantes actuales del grupo charlan tranquilamente sobre esos primeros conciertos a los que asistieron como oyentes hambrientos de emociones. El guitarrista y compositor Juanma Latorre es el primero que hace memoria cuando se traslada a 1994, al antiguo pabell¨®n del Real Madrid, cuando acudi¨® al concierto de Nirvana, en plena cresta de la ola grunge. ¡°Mi hermano y yo ¨¦ramos muy adolescentes y no ten¨ªamos ni siquiera capacidad para entender todo lo que pasaba en el escenario, pero algo hubo ah¨ª, quiz¨¢ una energ¨ªa, que nos hizo entender que quer¨ªamos formar una banda¡±. Latorre lo recuerda como la actuaci¨®n m¨¢s importante, aunque tambi¨¦n se?ala otra, un a?o despu¨¦s, en el mismo sitio donde esta semana ¨¦l y su grupo estar¨¢n tocando con el aforo lleno. Se refiere al concierto de R.E.M. en 1995 en el Palacio de los Deportes. ¡°Es uno de mis grupos favoritos por su sello propio¡±.
En el mismo sitio, incluso el mismo a?o que el de R.E.M., sucedi¨® el concierto que marc¨® a David Garc¨ªa Indio. Fue el que protagonizaron Jimmy Page y Robert Plant en Palacio de los Deportes. ¡°Me encant¨® escuchar las canciones de Led Zeppelin en directo. Ya era muy fan aunque era muy jovencito. Y me marc¨® para seguir mi camino musical¡±, remarca el baterista, que, m¨¢s recientemente, vivi¨® ¡°una locura muy inspiradora¡± cuando el a?o pasado vio a David Byrne en las Noches del Bot¨¢nico.
El ¡°salvaje¡± con Dover. La inspiraci¨®n es lo que acompa?a a esos primeros conciertos que uno acude de adolescente, con la pandilla. Es lo que asegura el percusionista Jorge Gonz¨¢lez, que se vino arriba como nunca viendo a Dover en las fiestas de Tres Cantos en 1997. ¡°Fue bastante divertido y salvaje, porque fue la ¨²nica vez que me he tirado desde un escenario. Est¨¢bamos todos en la escuela de m¨²sica y nos pas¨¢bamos los casetes con su disco. A m¨ª me lo pas¨® Pucho. Fue un concierto especial porque lo viv¨ª con mis colegas, en el barrio y me dije que c¨®mo molaba todo¡±.
¡°Flipar¡± con Radiohead. Molaba tanto que, un a?o despu¨¦s, naci¨® Vetusta Morla. Un grupo que tendr¨ªa como inspiraci¨®n varias formaciones del indie anglosaj¨®n, aunque una especialmente: Radiohead. Como colegas, y ya como m¨²sicos, se trasladaron hasta Bilbao el cantante Pucho y el guitarrista y compositor Guille Galv¨¢n. Corr¨ªa 2001 y ambos, como tantos en aquella ¨¦poca, quer¨ªan ver con sus propios ojos las haza?as sobre el escenario de la banda del momento. ¡°Flip¨¦ en colores¡±, rememora Pucho. ¡°Me qued¨¦ enmudecido. Fue acabar ese concierto y dije: ¡®Hala, ?al local de ensayo! Hay que currar mucho para llegar a este nivel¡±. De la misma opini¨®n es Galv¨¢n, que le recuerda que se volvieron esa misma noche en un autob¨²s a Madrid porque no ten¨ªan dinero para dormir en Bilbao. ¡°Aquel concierto fue estar como en un Costello ¡ªsala madrile?a a la que acuden muchos m¨²sicos espa?oles¡ª, pero en gigante. Estaban todos los m¨²sicos de Madrid, all¨ª y salimos embobados. Ten¨ªamos la sensaci¨®n de que deb¨ªamos dejar la m¨²sica y al mismo tiempo con la idea de que, si hab¨ªa un camino, esta gente de Radiohead ten¨ªan una luz para guiarnos¡±.
"Hacer m¨²sica" con Neil Young. La misma luz que Galv¨¢n vio en su ¨²ltima epifan¨ªa en directo: Neil Young en el festival Mad Cool en 2016. ¡°Fue incre¨ªble ver a cuatro personas en cinco metros, como una banda de rock de toda la vida, mir¨¢ndose a los ojos, haciendo m¨²sica sobre un escenario gigante pero como si estuvieran en un local de ensayo. Eran puro oficio. Lo que hace Neil Young con setenta y pico a?os es actual. Lleva a la banda de j¨®venes en volandas para marcarles la actitud y la energ¨ªa. Hacer m¨²sica era esto. Nos resetearon aquel d¨ªa¡±.
"Cantando Hombres G en M¨¦xico"
La gira Mismo sitio, distinto lugar se acaba en Espa?a despu¨¦s de dos a?os de conciertos que les han llevado por 33 ciudades espa?olas, pero tambi¨¦n por 14 pa¨ªses de Latinoam¨¦rica, Estados Unidos y Europa. Galv¨¢n destaca las actuaciones en salas de Boston, Nueva York y Berl¨ªn, que les volvi¨® "a hacer tocar c¨®mo hace diez a?os y fue como un soplo de aire fresco" Mientras, Latorre cita una en la FIL de M¨¦xico en el que acabaron en un karaoke con Xoel L¨®pez. "Cantando Hombres G y hasta ah¨ª puedo contar", dice riendo. Pucho asegura que el p¨²blico de Sevilla le ha encantado siempre porque "est¨¢ concentrad¨ªsimo" y de la misma opini¨®n es Jorge Gonz¨¢lez pero con Barcelona y un concierto all¨ª donde levant¨® la cabeza y "todo el pabell¨®n estaba con m¨®viles y fue espectacular". Indio no quiere dejar pasar el que ofrecieron en Almer¨ªa, que "fue muy bueno", aunque fuera en una feria y casi mueren por "el s¨²per calor que hac¨ªa en agosto".
Babelia
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