Una nueva vida lejos de la mafia

La familia de Maria Stefanelli se traslad¨® de Oppido, en Calabria, a Varazze, en Liguria y en el otro extremo de Italia, para volver a juntarse con el padre, que acababa de sufrir un infarto durante una visita a su hermano. Tras su muerte, Antonio, t¨ªo de Maria y miembro de la ¡®Ndrangheta, la mafia calabresa, se instal¨® en su casa para reemplazarlo. Desde entonces empezaron los abusos sexuales del que la mujer apellida ¡°el orco¡±. Pero, en el intento de resolver el problema, Maria recuerda ante la c¨¢mara que termin¨® por caer en uno m¨¢s grande. Como cuenta en la serie documental Donne in fuga dal crimine (Mujeres que huyen del crimen), Ciccio Marando, hermano del narcotraficante Pasqualino, le prometi¨® protegerla. Obtuvo un permiso de 24 horas para salir de la c¨¢rcel y se cas¨® con ella.

Sin darse cuenta, Maria se convirti¨® en propiedad exclusiva del clan (¡®ndrina, en calabr¨¦s) mafioso m¨¢s peligroso de Plat¨¬, a poco m¨¢s de 20km de su ciudad natal, y tuvo que renunciar a la libertad. Ayud¨® a Ciccio a huir de la c¨¢rcel, se mud¨® a Plat¨¬ bajo su orden y sufri¨® una agresi¨®n que supuso la p¨¦rdida de su segundo embarazo por haber escapado al control de la suegra por un d¨ªa. A partir de ese hecho, estall¨® la guerra entre los Stefanelli y los Marando. Nin¨¬, su hermano, mat¨® a Ciccio, cuya familia respondi¨® masacrando a ¨¦l y a su t¨ªo. Antes de que fueran a por ella, Maria se salv¨® poniendo su destino en las manos del Estado.

Historias como esta son muy comunes en la ¡®Ndrangheta, la mafia econ¨®micamente m¨¢s poderosa de Italia en este momento, que factura 53.000 millones de euros anuales, m¨¢s que el Deutsche Bank y McDonald¡¯s juntos, seg¨²n un estudio del instituto italiano Demoskopika de 2013. La serie documental del Investigative Reporting Project Italy (IRPI) pretende contar la rebeli¨®n de las mujeres a su sistema feudal. Lo explica la periodista Cecilia Anesi, que en el cap¨ªtulo piloto Se potessi tornare (Si pudiera volver), publicado en la web del IRPI el 18 de marzo, entrevista a Maria Stefanelli, cubierta por una capa oscura para proteger su identidad: ¡°El papel de la mujer en la ¡®Ndrangheta es la ausencia. En muchos casos, sufre una historia de violencia y donde no la hay es reclusa. En sitios como San Luca [el basti¨®n m¨¢s famoso de la ¡®Ndrangheta], no tiene el derecho a decidir con qui¨¦n casarse¡±.

El hilo conductor es la realidad virtual. Los periodistas del IRPI visitaron Oppido, Volpiano, en Piamonte, donde Ciccio hab¨ªa instalado una c¨¦lula de la 'Ndrangheta, y Plat¨ª para grabar a 360 grados los lugares que Maria no podr¨¢ ver nunca m¨¢s en su vida. El resultado es un suerte de catarsis, con la protagonista que evoca y describe su infancia feliz e intenta luchar contra los recuerdos que le afectan. Anesi explica la acogida de los locales en Plat¨ª, del que se habla tambi¨¦n en un reportaje escrito que acompa?a el documental: ¡°Cuando vas ah¨ª inmediatamente reconocen que no tienes nada que ver con ese lugar. Para ellos o eres periodista o polic¨ªa. Pero es a¨²n m¨¢s raro cuando ven que no solo eres periodista sino tambi¨¦n mujer¡±.

En Plat¨¬, solo se ven hombres por la calle y nadie se atreve a hablar de la ¡®Ndrangheta, ¡°ni siquiera si te matan a un hijo¡±, dice en el documental Luigi Di Gioia, el comandante de los carabineros del pueblo, de unos 4.000 habitantes. Por ello, Anesi se mueve con los agentes para mostrar el sistema de t¨²neles que Ciccio utilizaba para visitar a Maria durante su escondite, aunque ¡°el orgullo de los ndranghetistas es que ellos, al contrario de la Camorra, viven en la superficie¡±, afirma Michele Palummo, de los llamados Cacciatori di Calabria (cazadores de Calabria), la unidad especial de b¨²squeda de fugitivos de los carabineros.

Para seguir con la serie, el IRPI busca un productor. En caso de que lo consigan, Anesi prev¨¦ otros nueve cap¨ªtulos. Los que considera m¨¢s impactantes hablan de una menor abusada repetidamente por una manada de chavales bajo el mando del hijo de un boss, lo que ha silenciado autom¨¢ticamente su sufrimiento; o tambi¨¦n de extranjeras que se han dado cuenta demasiado tarde de que su esposo era un mafioso. ¡°Estas historias que parecen muy lejanas pueden afectar a cualquiera. La gente piensa que el hombre de la ¡®Ndrangheta lleve la escopeta, pero hoy puede ser tambi¨¦n un empresario de ¨¦xito de Mil¨¢n. Si vienes de otro contexto y no lo entiendes al final te metes en algo mucho m¨¢s grande que t¨²¡±, afirma Anesi.

Atrapadas en una pesadilla sin salida, algunas de ellas deciden confiar en el Estado, que propone un programa de protecci¨®n de testigos. As¨ª, Maria Stefanelli pudo conseguir otro nombre y empezar de cero una nueva vida, hace ya 20 a?os. Para la ¡®Ndrangheta se ha convertido en una traidora que deber¨ªa ser ajusticiada, pero ella nunca se ha sentido tan segura de algo. ¡°A vece me pellizco y descubro que estoy viva¡±, dice en el documental.

En el futuro, a Anesi le gustar¨ªa repetir el proyecto y dedicarlo a las mujeres de otras organizaciones criminales, para demostrar que los m¨¦todos de la ¡®Ndrangheta son muchos m¨¢s habituales de lo que parece.