La lej¨ªa mata al virus, pero tambi¨¦n al patrimonio cultural
El Ministerio de Cultura lanza una carta de recomendaciones imprescindibles para desinfectar los bienes hist¨®ricos y no destruirlos
Cuidado con la prevenci¨®n: ¡°El remedio puede ser peor que la enfermedad¡±. Al otro lado del tel¨¦fono Pilar Vidal, restauradora y miembro de la Junta Directiva de la Asociaci¨®n de Conservadores, Restauradores de Espa?a (ACRE), advierte de que el entusiasmo no es el mejor aliado del patrimonio cultural en la crisis sanitaria de la covid-19. ¡°En los museos no hay ning¨²n problema para desinfectar, los profesionales saben c¨®mo tienen que hacer su trabajo. Pero en las iglesias¡¡±, apunta. ¡°El mayor peligro en estos momentos es una prevenci¨®n intuitiva y entusiasta, m¨¢s que cient¨ªfica¡±, explica a este peri¨®dico Rom¨¢n Fern¨¢ndez-Baca, director General de Bellas Artes. Para informar a los p¨¢rrocos y a los parroquianos en sus batidas de limpieza, el Ministerio de Cultura acaba de hacer p¨²blicas las recomendaciones para desinfectar bienes culturales y no caer en da?os irremediables. La conclusi¨®n de los siete expertos que firman los protocolos propuestos por Cultura es muy clara: ¡°Nunca fue tan f¨¢cil ayudar a nuestro patrimonio: cu¨ªdalo, cu¨ªdate, no lo toques¡±.
¡°Nunca es recomendable tocar de manera directa los bienes culturales, pero esta premisa en una situaci¨®n como la de ahora, es todav¨ªa m¨¢s necesaria¡±, advierten los t¨¦cnicos. No solo por los da?os que se pueden causar al patrimonio, sino por la permanencia de part¨ªculas v¨ªricas, ¡°provenientes del contacto directo o por la saliva¡±, sobre las superficies. ¡°Es un documento que no tiene ninguna de las instituciones culturales internacionales, ni ICCROM, ni ICOM, ni UNESCO¡±, explica Fern¨¢ndez-Baca. La Junta de Castilla y Le¨®n -la comunidad con m¨¢s bienes art¨ªsticos de la Iglesia- tambi¨¦n ha lanzado su men¨² de recomendaciones en la desinfecci¨®n de bienes hist¨®rico-art¨ªsticos.
La lej¨ªa es la mejor aliada en los hospitales y en los hogares, y uno de los peores enemigos de los bienes culturales. La desinfecci¨®n del patrimonio no puede hacerse con productos corrosivos, como el amoniaco y los detergentes, adem¨¢s de la mencionada lej¨ªa, que adem¨¢s generan residuos muy da?inos. Est¨¢n ¡°totalmente contraindicados¡±. Los especialistas piden que tampoco se usen en yacimientos arqueol¨®gicos o sobre objetos. Es mejor emplear las soluciones hidroalcoh¨®licas diluidas o jabones neutros, aplicados siempre a presi¨®n baja. Por eso desde el Instituto del Patrimonio Cultural de Espa?a (IPC) advierten que hay que evitar que los cascos hist¨®ricos sean rociados con desinfectantes. Los edificios de valor hist¨®rico no pueden ser tratados de esta manera. Sugieren el etanol disuelto al 70% en agua y proyectada a baja presi¨®n. ¡°Es menos da?ina que la soluci¨®n de hipoclorito s¨®dico (lej¨ªa) sobre materiales como la piedra, el ladrillo, la madera o el metal¡±, explican. Para evitar cat¨¢strofes mayores, ninguno de estos tratamientos se deben realizar sobre bienes policromados (como portadas de iglesias o retablos).
A pie de obra
Sali Criado, restauradora y coordinadora de la Plataforma de Asociaciones de Conservadores y Restauradores de Espa?a (PAPCRE), se re¨²ne ma?ana viernes con el ministro de Cultura, Jos¨¦ Manuel Rodr¨ªguez Uribes, y la ministra de Hacienda, Mar¨ªa Jesus Montero. ¡°No queremos parar nuestra actividad, necesitamos trabajar y podemos hacerlo gracias a nuestras medidas de seguridad¡±, comenta. Ella par¨® dos semanas y desde el lunes ha vuelto al trabajo en el museo del Palacio de Quintanar, en Segovia. Est¨¢ restaurando pintura mural y decoraciones de papel pintado del siglo XIX. ¡°Tenemos la ventaja que utilizamos guantes y mascarillas cada d¨ªa. A ello hemos a?adido la distancia entre los restauradores. La mayor dificultad ahora es encontrar mascarillas y guantes. No queda nada¡±, dice.
Fuera de las iglesias tambi¨¦n es importante tener en cuenta, seg¨²n Pilar Vidal, el cuidado en esculturas p¨²blicas, muros de los edificios hist¨®ricos y los suelos de inter¨¦s hist¨®rico. Y pone dos ejemplos: el Peine del viento, de Eduardo Chillida, en San Sebasti¨¢n, o el Elogio del Horizonte, en Gij¨®n; y el pavimento de losas de terrazo y te?ido con cristales de color triturados, que Joan Mir¨® realiz¨® en Barcelona, en la Rambla. ¡°La fumigaci¨®n directa sobre estos bienes no se deber¨ªa realizar¡±, a?ade la restauradora. Lo m¨¢s adecuado para compatibilizar la desinfecci¨®n de los bienes con su conservaci¨®n es su aislamiento durante un periodo de tiempo que puede oscilar entre los tres y los nueve d¨ªas. Mejor que la desinfecci¨®n, los especialistas proponen ¡°el vallado perimetral para evitar la aproximaci¨®n y el contacto directo¡± entre el patrimonio y las personas. Y debido al cierre hace un mes de todos los espacios culturales, ¡°la existencia actualmente del virus en el ambiente de dichos espacios es poco probable¡±.
En ese sentido, en el Ministerio de Cultura ya preparan las medidas sanitarias para la reapertura de los museos. Rom¨¢n Fern¨¢ndez-Baca asegura que en un par de semanas habr¨¢n redactado un protocolo muy detallado sobre el nuevo museo que nos encontraremos cuando acabe el confinamiento y las instituciones vuelva a ser accesibles. Prefiere no avanzar el informe que ya desarrollan los facultativos vinculados a la Subdirecci¨®n de museos estatales, pero imagina un entorno en el que los guantes y las mascarillas ser¨¢n habituales en los trabajadores. ¡°Debemos tomar las medidas necesarias y con todo el rigor cient¨ªfico para que la seguridad de las personas est¨¦ garantizada, tanto de p¨²blico como de trabajadores, como de las colecciones. El documento estar¨¢ terminado a finales de mes. Tenemos que lograr que el turismo regrese sin miedo¡±, apunta el director general de Bellas Artes del Ministerio de Cultura. En el documento que acaban de hacer p¨²blico y compartir con todas las comunidades aut¨®nomas y ayuntamientos, se se?ala que ¡°la recuperaci¨®n de las visitas se puede demorar en el tiempo¡± y que se recuperar¨¢n primero las de la poblaci¨®n local y nacional. Al turista internacional no se le espera de inmediato.
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