Muere Pete Hamill, el eterno cronista de Nueva York

A Pete Hamill le gustaba presumir que a pesar de d¨®nde lo llevara su trabajo como periodista, los azarosos caminos siempre lo conduc¨ªan de vuelta a la ciudad de Nueva York. El tambi¨¦n ensayista, escritor y editor de publicaciones como The New York Post y The Daily News muri¨® el mi¨¦rcoles a los 85 a?os en un hospital en Brooklyn. El pasado s¨¢bado hab¨ªa sido ingresado en el centro m¨¦dico despu¨¦s de sufrir una ca¨ªda en su casa y fue tratado por una lesi¨®n en la cadera, pero su coraz¨®n y sus ri?ones no lo resistieron, seg¨²n cont¨® su hermano Denis Hamill a The New York Times.

Hamill era el ¨²ltimo de los reporteros de la generaci¨®n del Nuevo Periodismo ¨CTom Wolfe, Jimmy Breslin, Gay Talese y Norman Mailer¨C aunque dedic¨® la mayor parte de su carrera a los tabloides en la Gran Manzana. Lleg¨® a ellos, casi por casualidad despu¨¦s de que abandon¨® el instituto. En 1960, toc¨® la puerta de The New York Post y contra todo pron¨®stico fue aceptado sin experiencia alguna. Hamill cuenta en sus memorias que all¨ª se enamor¨® del periodismo y decidi¨® quedarse para siempre. ¡°Uno de los mejores d¨ªas de mi vida fue cuando recib¨ª mi primer pase de prensa¡±, cont¨® a sus colegas en The Daily News.

El reportero cubri¨® los conflictos armados en Vietnam, Nicaragua y L¨ªbano para The Saturday Evening Post, pero siempre busc¨® volver a Nueva York para contar el d¨ªa a d¨ªa de la ciudad. Enfocaba sus cr¨®nicas hacia los sectores m¨¢s desfavorecidos y las minor¨ªas. Fue editor del Post y sus colegas reconocen que su trabajo estaba enfocado en levantar los est¨¢ndares de la publicaci¨®n respecto a otros tabloides. ¡°La redacci¨®n era m¨¢s emocionante para m¨ª que cualquier pel¨ªcula¡±, relat¨® en sus memorias, ¡°un caos organizado de editores gritando desde los escritorios, los chicos corriendo por las puertas hacia la sala de composici¨®n, hombres y mujeres escribiendo en grandes m¨¢quinas de escribir manuales, tel¨¦fonos sonando, el servicio de teletipos tintinea haciendo ruido, todos fumando y tirando colillas en el suelo¡±.

Adem¨¢s del periodismo tambi¨¦n se dedic¨® a escribir ensayos para publicaciones como The New Yorker, Esquire, Rolling Stone y The New York Magazine. Su pasi¨®n por la escritura lo llev¨® a publicar 21 novelas, la primera ¨CA Killing for Christ¨C trataba sobre una intriga para asesinar al Papa. Tambi¨¦n escribi¨® diversos perfiles y libros de no ficci¨®n como Why Sinatra Matters y Diego Rivera. Hamill se consideraba un periodista ¡°generalista¡± y su versatilidad se reflej¨® en sus textos que igualmente pod¨ªan ser encontrados en los tabloides que en revistas especializadas. Se convirti¨® a lo largo de los a?os en un personaje cl¨¢sico en los barrios m¨¢s emblem¨¢ticos de Nueva York e incluso lleg¨® a ser noticia en alg¨²n tabloide cuando sali¨® con mujeres como Shirley MacLaine, Jacqueline Kennedy Onassis y Linda Ronstadt.

En 1968, estuvo al lado de Robert F. Kennedy en el Hotel Ambassador de Los ?ngeles la noche de su asesinato. Eran buenos amigos y estaba documentando la campa?a del senador que buscaba ser candidato a la presidencia. Hamill ayud¨® a detener a Sirhan B. Sirhan segundos despu¨¦s de que dispar¨® contra Kennedy. Otra de las noticias que marcaron su vida fue el ataque del 11 de septiembre de 2001 al World Trade Center en Nueva York. El periodista se encontraba a unas calles del edificio cuando uno de los aviones se impact¨® en uno de los rascacielos, todo lo que sigui¨® lo fue contando en las p¨¢ginas del The Daily News.

Naci¨® el 24 de junio de 1935, era el hijo de dos inmigrantes de Belfast, Irlanda del Norte. Se cas¨® en 1962 con Ramona Negron, tuvo dos hijas ¨C Deirdre y Adriene¨C y se divorci¨® ocho a?os m¨¢s tarde. En 1987 se cas¨® con la periodista japonesa Fukiko Aoki.