Lang Lang: ¡°Es fant¨¢stico que me critiquen, te hace mejorar art¨ªsticamente¡±
El medi¨¢tico m¨²sico chino cumple el sue?o de publicar su primera grabaci¨®n de las ¡®Variaciones Goldberg¡¯, de Bach, que presenta hoy a trav¨¦s de YouTube
Un acontecimiento dram¨¢tico, un cambio de rumbo y un exitoso debut. Son los tres cl¨ªmax de Un viaje de miles de kil¨®metros, la autobiograf¨ªa de la estrella china del piano cl¨¢sico Lang Lang (Shenyang, 1982). Un padre autoritario, que concentr¨® en su ¨²nico hijo, todas las ansias art¨ªsticas frustradas por la Revoluci¨®n Cultural, y que le invit¨® a suicidarse, con nueve a?os, tras fracasar en su ingreso en el...
Un acontecimiento dram¨¢tico, un cambio de rumbo y un exitoso debut. Son los tres cl¨ªmax de Un viaje de miles de kil¨®metros, la autobiograf¨ªa de la estrella china del piano cl¨¢sico Lang Lang (Shenyang, 1982). Un padre autoritario, que concentr¨® en su ¨²nico hijo, todas las ansias art¨ªsticas frustradas por la Revoluci¨®n Cultural, y que le invit¨® a suicidarse, con nueve a?os, tras fracasar en su ingreso en el Conservatorio Central de Pek¨ªn. Un profesor ¡ªel pianista Gary Graffman¡ª que le convenci¨®, con 15 a?os, para cambiar su natural esp¨ªritu competitivo por una mentalidad m¨¢s art¨ªstica. Y un director de orquesta ¡ªChristoph Eschenbach¨C que le invit¨® a debutar, con 17 a?os, en una gala ben¨¦fica del Festival de Ravinia, donde sustituy¨® in extremis al pianista Andr¨¦ Watts y comparti¨® escenario con colegas de la talla de Leon Fleisher, Misha Dichter y Alicia de Larrocha.
Esa velada, de agosto de 1999, concluy¨®, a las dos de la madrugada, con un improvisado recital de Lang Lang tocando para todos ellos las Variaciones Goldberg, de Johann Sebastian Bach. ¡°En aquella ¨¦poca yo tocaba Bach de una forma muy rom¨¢ntica, pero recuerdo que les gust¨®. Pensaron que estaba loco al tocar de memoria y sorpresivamente una obra tan larga y compleja¡±, rememoraba Lang Lang, el pasado martes desde Shangh¨¢i, en una videollamada con EL PA?S. Comparec¨ªa sentado frente a un Steinway y dispuesto a explicar cualquier detalle de su interpretaci¨®n de esta partitura de Bach, a la que ha vuelto dos d¨¦cadas despu¨¦s. ¡°Para m¨ª ha sido siempre un sue?o tocar y grabar las Goldberg, un proyecto que ha tardado 20 a?os en materializarse¡±, asegura el medi¨¢tico pianista que presenta hoy viernes, 4 de septiembre, en el hist¨®rico templo Dongjingyuan de Pek¨ªn, su primera grabaci¨®n de la obra en el sello Deutsche Grammophon. Un mini recital seguido de un turno de preguntas, que podr¨¢ verse en directo a trav¨¦s de su canal de YouTube a partir de las 16:00, hora peninsular espa?ola.
Lang Lang ha realizado una doble grabaci¨®n de las Goldberg que se lanza hoy en cuatro discos compactos junto a los habituales canales de streaming. Una versi¨®n registrada en estudio y otra en directo, en la Iglesia de Santo Tom¨¢s de Leipzig, donde reposan los restos de Bach. ¡°En ese recital encontr¨¦ una conexi¨®n muy especial con el esp¨ªritu religioso de esta m¨²sica, por ejemplo, en la variaci¨®n 25, Adagio, que es como un consuelo que purifica el alma. Pero hay tambi¨¦n otras, como la 30, Quodlibet, donde se muestra el cariz m¨¢s humano y familiar del compositor¡±, asegura. El pianista reconoce la huella fundamental que le produjo la famosa grabaci¨®n de Glenn Gould, de 1981. ¡°La escuch¨¦ cuando ten¨ªa 10 a?os y me mostr¨® otra forma de entender la m¨²sica de Bach, con esa tremenda variedad de caracteres, articulaciones y contrastes. Nunca pens¨¦ que pudiera tocarse de una forma tan multidimensional y dram¨¢tica¡±. Asegura no conocer las grabaciones de su compatriota, la pianista Zhu Xiao-Mei, gran especialista en Bach, pero expresa su admiraci¨®n por otras versiones. ¡°He escuchado a Wanda Landowska, adoro la grabaci¨®n de Murray Perahia, tambi¨¦n la de mi maestro Daniel Barenboim en directo, en Buenos Aires, y adem¨¢s la de Andreas Staier, por sus originales y aut¨¦nticas ornamentaciones¡±.
Precisamente, el pianista chino ha contado con el asesoramiento de Staier, como reconocido especialista en interpretaci¨®n historicista. ¡°Las Goldberg est¨¢n pensadas para un clave con dos teclados, por lo que he tenido que comprender psicol¨®gicamente esta m¨²sica en su instrumento original y adaptarla al piano moderno¡±, reconoce. Cree escuchar en esta m¨²sica ecos de otros instrumentos de ¨¦poca, como la trompeta barroca (toca el arranque de la parte r¨¢pida de la variaci¨®n 16, Ouverture). E incluso tambi¨¦n de la vocalidad: ¡°He encontrado inspiraci¨®n en la forma de cantar de Cecilia Bartoli [toca el comienzo de la variaci¨®n 13] con este sonido tan l¨ªrico, pues creo que el piano puede cantar mejor que el clave¡±, asegura. ¡°Y de Staier he aprendido a ornamentar y a a?adir detalles en las repeticiones que no est¨¢n escritos en la partitura [aborda la primera repetici¨®n adornada de la variaci¨®n 7, Al tempo de Giga], pero que eran habituales en la ¨¦poca barroca¡±.
Lang Lang dio su primer recital p¨²blico con las Goldberg, el pasado 1 de marzo, en el Kurhaus de Wiesbaden. Era el arranque de una extensa gira internacional, que deber¨ªa haber pasado por Espa?a, pero que fue truncada por la irrupci¨®n de la pandemia. ¡°Vivimos una pesadilla en la m¨²sica cl¨¢sica, pues est¨¢n sufriendo muchas instituciones, artistas y agencias con esta situaci¨®n. Pero tengo la esperanza de que pronto tengamos una buena vacuna y podamos volver a viajar y retomar todos los conciertos cancelados. Espero poder realizar la gira con las Goldberg en la primavera del a?o pr¨®ximo¡±, admite.
El pianista ha superado recientemente una grave lesi¨®n en el brazo izquierdo, como consecuencia de un intenso estudio del Concierto para la mano izquierda de Ravel, que le oblig¨® a tomarse un largo periodo sab¨¢tico entre 2017 y 2018. ¡°Mi vida sin el piano es dif¨ªcil de imaginar, aunque detenerse ayuda a reflexionar, mejorar tus ejercicios, perder algo de peso y ense?ar, que es algo que adoro¡±, asegura. Entre sus planes futuros espera terminar de grabar los conciertos para piano de Beethoven, hacer m¨¢s m¨²sica barroca, de Handel y Scarlatti, junto a un disco de mazurcas de Chopin. Y persiste en alcanzar como pianista ese ideal est¨¦tico que combina la dulzura de Arthur Rubinstein con la delicadeza de Vlad¨ªmir H¨®rowitz. ¡°Sigo trabajando en esa direcci¨®n. Pero una de las cosas que me diferencia de ambos es que ninguno de ellos grab¨® las Variaciones Goldberg¡±, asegura sonriendo.
Evita profundizar en temas de actualidad, aunque reconoce que en China ahora reina una mentalidad diferente en relaci¨®n con el pa¨ªs que dej¨® hace 23 a?os: ¡°Creo que es m¨¢s abierto e internacional que antes¡±. Confiesa su tristeza ante el conflicto racial en Estados Unidos: ¡°Quiero una sociedad m¨¢s tolerante y capaz de conversar. Creo que necesitamos acercarnos en lugar de alejarnos¡±. Y terminamos hablando de su opini¨®n acerca de la cr¨ªtica, que en los ¨²ltimos a?os ha atacado su exceso de mercadotecnia y falta de profundidad musical. ¡°Es fant¨¢stico que me critiquen, pues eso te hace mejorar art¨ªsticamente. Pero, obviamente, no tenemos que estar de acuerdo. Pienso que los artistas y los cr¨ªticos trabajamos en la misma direcci¨®n: hacer m¨¢s interesante la m¨²sica cl¨¢sica¡±.