Las goldberg, un mundo
El retorno una y otra vez de la simple base arm¨®nica que nos ha proporcionado el aria es el eje sobre el cual gira ese mundo secreto
El Aria que abre las Variaciones Goldberg de Bach, uno de los mayores ¡°monumentos¡± musicales de la cultura occidental, es una puerta a un mundo cerrado, coherente, autosuficiente, ¨ªntimo, secreto. Si el int¨¦rprete domina la obra y Evgueni Koroliov, el pianista ruso que las interpret¨® en el Palau, especialista en el asunto, la domina de un modo apabullante, se va tejiendo como un capullo de seda musical que envuelve al int¨¦rprete y al p¨²blico y los separa y a¨ªsla del mundo exterior. Se alcanzan entonces estados de concentraci¨®n inusitados.
En el mundo de las Goldberg la l¨®gica es belleza, la raz¨®n reina, pero toma tantas formas que parece sinraz¨®n, el arabesco es sustancia y lo peque?o es sustancial. En el mundo de las Goldberg no hay discurso, progreso, ni direcci¨®n pues no hay adonde ir ni, mucho menos, la necesidad de ir a alg¨²n sitio. El retorno una y otra vez de la simple base arm¨®nica que nos ha proporcionado el aria es el eje sobre el cual gira ese mundo secreto y ese mismo renacer marca los meses, las estaciones y los a?os de ese mundo. Tras treinta variaciones, unos ochenta y tantos minutos en tiempo terrestre, unos treinta a?os en Tiempo Goldberg, el int¨¦rprete vuelve a tocar la misma aria con que empez¨® todo.
?Cu¨¢n diferente suena ahora!
El aria que fue puerta de entrada, ahora es salida.
Hemos sido expulsados del para¨ªso. Fuera de las Goldberg hay ruido, fr¨ªo, tel¨¦fonos m¨®viles y reina el caos y la sinraz¨®n.
VARIACIONES GOLDBERG, BWV 988
De Johann Sebastian Bach.
Evgeni Koroliov, piano.
Temporada de conciertos Palau 100. Palau de la M¨²sica.
Barcelona, 9 de diciembre.
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