Cedro refuerza la tecnolog¨ªa para combatir las copias ilegales

Por cada libro digital vendido en Espa?a circulan tres copias ilegales; es decir, en la Red se piratearon en 2018 unos 425 millones de libros, con un lucro cesante de 215 millones de euros para el sector editorial. En papel, la cosa no va mucho mejor: se ha fotocopiado ilegalmente el equivalente a dos millones de libros. Son cifras descomunales, de episodio de la mitol¨®gica Gigantomaquia, que requieren, pues, una intervenci¨®n urgente, casi de dioses. Daniel Fern¨¢ndez, editor de Edhasa y presidente desde junio de Cedro (Centro Espa?ol de Derechos Reprogr¨¢ficos), entidad de gesti¨®n y defensa de los derechos de propiedad intelectual, se refiere a la diosa griega de las artes y la estrategia militar para describir la posici¨®n que ha adoptado la entidad frente a la pirater¨ªa: ¡°Hasta ahora, como Atenea, hemos mostrado m¨¢s el escudo, pero ahora ya es momento de blandir la lanza¡±.

La punta de esa lanza es una notable inversi¨®n en tecnolog¨ªa, que de forma autom¨¢tica rastrea a diario en Internet y en las redes sociales la pirater¨ªa de contenidos de novedades editoriales, peri¨®dicos, revistas y partituras. ¡°No es un departamento inform¨¢tico propio, pero lo estamos desarrollando como si lo fuera; no s¨®lo vamos a incrementar nuestra labor social sino tambi¨¦n a perseguir las violaciones de la ley¡±, asegura el editor, octavo presidente de Cedro y socio desde su fundaci¨®n, en 1988.

Las primeras andanadas no pueden arrojar un balance m¨¢s espectacular: en cinco meses, desde que en junio arrancaron las medidas inform¨¢ticas hasta octubre, han detectado y solicitado que se bloqueen 338.533 enlaces a webs, mientras que se han eliminado 113.907 ficheros (p¨¢ginas de almacenamiento). Para lograrlo, Cedro pide el bloqueo al administrador de la web o acude a la secci¨®n segunda de la Comisi¨®n de Propiedad Intelectual del Ministerio de Cultura para impulsar la autorizaci¨®n judicial necesaria. ¡°Hemos adoptado la estrategia de sigue el dinero: buscamos alianzas con las marcas y agencias de publicidad que financian esas p¨¢ginas y les avisamos de que se anuncian en lugares que albergan contenidos intelectuales ilegales¡±, detalla Fern¨¢ndez.

Pero la pirater¨ªa es como la Hidra de Lerna, y a cada cabeza cortada surge otra, especialmente en las redes sociales: ¡°Los ficheros de texto pesan poco en la Red y hay grupos sociales como Telegram sin l¨ªmites de miembros¡±, contextualiza el presidente de Cedro. La actuaci¨®n ah¨ª se ha traducido en 11.084 ficheros eliminados y la supresi¨®n de 153 grupos activos en redes y mensajer¨ªa telef¨®nica.

En Cedro se trabaja en la ampliaci¨®n de esta herramienta inform¨¢tica contra usos il¨ªcitos en la Red para que permita, a lo largo del primer trimestre de 2020, el rastreo contra el plagio y otro contra las fake news. ¡°El sistema detectar¨¢ el porcentaje de pirater¨ªa, con lo que se sabr¨¢, por ejemplo, si la fuente de la noticia es fiable o no¡±, apunta Fern¨¢ndez, que calcula en un mill¨®n de obras, entre prensa y libros, las que podr¨¢n chequearse. Ambos sistemas ayudar¨¢n a ampliar los v¨ªnculos que CEDRO ya mantiene con 38 entidades de 36 pa¨ªses. Una de las que podr¨ªa salir reforzadas con la nueva herramienta contra los plagios es la CRUE, la asociaci¨®n de universidades espa?olas. ¡°Podremos ayudarles a detectarlos y tambi¨¦n en el retorno de dinero¡±.

El fen¨®meno de la pirater¨ªa en Espa?a es may¨²sculo, sostiene Fern¨¢ndez. "En Europa es casi despreciable, excepto en Italia, pero est¨¢n muy lejos de nuestras cifras", asegura el presidente de Cedro, que constata que, por no desaparecer, no desaparecen ni las fotocopias ilegales de libros de papel. ¡°Hay mayor concienciaci¨®n que hace unos a?os, por eso tenemos 2.400 licencias de copister¨ªas concedidas. Pero cada a?o debemos invertir m¨¢s de 250.000 euros s¨®lo en inspectores y abogados para perseguir la reprograf¨ªa ilegal¡±.

El ligero descenso que se habr¨ªa percibido en la pirater¨ªa audiovisual tras la consolidaci¨®n del formato en streaming no se habr¨ªa dado en otros ¨¢mbitos, seg¨²n Fern¨¢ndez. ¡°En el de los videojuegos o los libros seguimos igual¡±. Y atribuye en parte esa situaci¨®n a que ¡°no tenemos una nueva Ley de la Propiedad Intelectual, vamos con una parcheada cuyo desarrollo y aplicaci¨®n es manifiestamente mejorable¡±. Desde Cedro conf¨ªan que el nuevo Gobierno de coalici¨®n ¡°tenga las ideas m¨¢s claras¡± y que acelere con la implementaci¨®n de la directiva europea sobre derechos de autor: ¡°Esperamos una transcripci¨®n s¨®lida que favorezca a la m¨¢s importante industria cultural espa?ola, vital en Am¨¦rica Latina y para el espa?ol¡±.

Desde la entidad de gesti¨®n esperan que esa transposici¨®n ¡°la hagamos juntos¡±, entre otras cuestiones para ¡°limar aristas¡±, en especial la responsabilidad de las plataformas digitales (Youtube y similares); otro fleco pendiente es el del ¨¢mbito educativo (¡°la excepci¨®n educativa no puede comportar que todo sea gratis¡±). Tambi¨¦n desean intervenir en futuros planes de lectura, retocar la regulaci¨®n del estatuto del artista en relaci¨®n con las pensiones (que hoy pierden si cobran derechos) y la equiparaci¨®n del IVA del libro digital con el papel (¡°no nos afecta directamente, pero s¨ª al sector¡±, dice con conocimiento de causa Fern¨¢ndez, editor de Edhasa).

De puertas adentro, Fern¨¢ndez admite que su labor ser¨¢ continuista en relaci¨®n con la de su predecesora, la escritora Carme Riera, que sigue en CEDRO como vicepresidenta. ¡°Riera resitu¨® a la entidad en la esfera p¨²blica; ahora debemos crecer para poder dar mayor asistencia social a nuestros miembros¡±, hoy 26.568 (24.330 autores y 2.238 editoriales). ¡°El 70% de lo que recaudamos lo repartimos¡±, fija Fern¨¢ndez. ¡°De ah¨ª nuestra ofensiva: necesitamos recaudar m¨¢s para repartir m¨¢s¡±. La batalla de Atenea parece justa.