Julieta Serrano: el eterno renacimiento

Hay una Julieta Serrano para cada generaci¨®n. Puede que los m¨¢s j¨®venes la hayan descubierto ahora por su participaci¨®n en la pel¨ªcula Dolor y gloria, de Pedro Almod¨®var, pero ella ya ha vivido antes todo esto: los Goya, los Oscar, que la persiga la prensa¡­ Fue ella quien en 1972 le espet¨® a Jos¨¦ Luis L¨®pez V¨¢zquez una de las frases m¨¢s c¨¦lebres del cine espa?ol, ¡°?Qu¨¦ me va usted a contar, se?orita!¡±, en la secuencia final de Mi querida se?orita, de Jaime de Armi?¨¢n. Y suya era tambi¨¦n aquella almodovariana melena cardada que ocupaba media pantalla en Mujeres al borde de un ataque de nervios. Hasta pueden encontrarse gifs en Internet que reproducen en bucle su ic¨®nico perfil en moto a toda velocidad por las calles de Madrid. ¡°Era mi pelo de verdad, no una peluca¡±, se apresura a aclarar siempre que sale el tema.

Ahora ha sucedido otra vez. Su papel de madre de Antonio Banderas en Dolor y gloria, trasunto de la propia madre de Almod¨®var, la ha puesto de nuevo en la primera l¨ªnea de la fama. Es favorita para llevarse el pr¨®ximo s¨¢bado el Goya como mejor actriz de reparto despu¨¦s de haber ganado ya el Feroz. ¡°Se me hab¨ªa olvidado lo loco que es esto, el ajetreo de las galas,el vestido, la peluquer¨ªa, el arreglo¡­¡±, recordaba la semana pasada al tel¨¦fono, en uno de los escasos ratos libres que ha tenido en el ¨²ltimo mes. ¡°Me lo paso bien, pero ?tengo 87 a?os!¡±. Ayer mismo los cumpli¨®.

No es que no haya trabajado en los ¨²ltimos tiempos. Al rev¨¦s, Julieta Serrano no ha parado de actuar desde que empez¨® a hacer teatro aficionado en su ciudad, Barcelona, a mediados de los cincuenta. ¡°Lo que pasa es que yo siempre he sido muy dram¨¢tica y no encajaba en el tipo de cine que se hac¨ªa en Espa?a cuando yo estaba empezando. No era graciosa ni tampoco me ajustaba a los otros c¨¢nones de mujer que se llevaban. Tampoco he perdido nunca el culo por hacer cine o televisi¨®n, mi vida ha sido siempre el teatro, que es mucho menos medi¨¢tico y no da tanta fama. Y entre medias, he hecho pel¨ªculas¡±, explica. M¨¢s de sesenta, que no son pocas. No todas tan medi¨¢ticas como Mi querida se?orita y Mujeres, pero algunas muy notables: El amante biling¨¹e (1993), La mo?os (1997), Caricias (1998) y Cuando vuelvas a mi lado (1999), entre otras, adem¨¢s de otras cuatro con Almod¨®var: Pepi, Luci, Bom y otras chicas del mont¨®n (1980), Entre tinieblas (1981), Matador (1986) y ?tame (1990).

Tambi¨¦n en el teatro ha dado la campanada m¨¢s de una vez. Por ejemplo, en 1969, protagoniz¨® junto a N¨²ria Espert el m¨ªtico montaje de Las criadas dirigido por V¨ªctor Garc¨ªa, prohibido por el franquismo en Madrid y aclamado despu¨¦s en Par¨ªs y Belgrado. Ha trabajado en m¨¢s de un centenar de producciones con todo tipo de directores, desde los m¨¢s ortodoxos hasta los m¨¢s modernos, tanto obras cl¨¢sicas como contempor¨¢neas, montajes de formato modesto y grandes producciones, en espa?ol y en catal¨¢n. B¨¢sicamente, odia el aburrimiento. ¡°Me cuesta decir no. No s¨¦ estar en casa sin trabajar. Ni siquiera ahora que ya tengo una edad¡±, reconoce.

En 2017 lleg¨® a pensar en retirarse. ¡°No porque me apeteciera, la verdad. Es que cumpl¨ªa 60 a?os de profesi¨®n y me dije que igual ya tocaba. Que quiz¨¢ ten¨ªa que organizar una fiesta y anunciarlo¡±, cuenta. En esas estaba cuando son¨® el tel¨¦fono: Daniel Bianco, director del Teatro de la Zarzuela, le ofrec¨ªa participar en una adaptaci¨®n l¨ªrica de La casa de Bernarda Alba. ¡°Pero Daniel, ?yo no canto!¡±, le record¨® ella. No hac¨ªa falta para su papel. No se lo pens¨® dos veces, nunca hab¨ªa participado en una ¨®pera y le pudo la curiosidad. Adem¨¢s, la iba a dirigir B¨¢rbara Lluch, nieta de su amiga N¨²ria Espert, a la que hab¨ªa visto nacer. A la porra la fiesta de jubilaci¨®n.

Casi a la vez el tel¨¦fono son¨® otra vez. Almod¨®var. Hac¨ªa siglos que no lo ve¨ªa. Le habl¨® de Dolor y gloria. Imposible resistirse. ¡°Con Pedro siempre me he entendido bien. Yo soy muy disciplinada trabajando, me dejo llevar, eso a ¨¦l le gusta. Recuerdo cuando me pas¨® el guion de Entre tinieblas, qu¨¦ locura, yo no imaginaba c¨®mo pod¨ªa hacerse aquello¡±, comenta.

Menos mal que no se resisti¨®. Se habr¨ªa perdido todo lo que vino despu¨¦s. El Premio Nacional de Teatro en 2018. Reconocimientos aqu¨ª y all¨¢. Que la vuelvan a parar por la calle para felicitarla. La emoci¨®n de aspirar a los Oscar. ?No va a ir a la gala de Hollywood? ¡°?Uf! Ya no tengo cuerpo. Adem¨¢s, yo ya fui cuando fue nominada Mujeres¡­ ?Qu¨¦ bien lo pasamos!¡±, recuerda. Eso s¨ª, advierte a los directores y productores, ¡°cuerpo para seguir trabajando tengo de sobra¡±. No vaya a ser que piensen que se quiere jubilar.