Napole¨®n a Josefina: ¡°?Un beso en el coraz¨®n y otro abajo, mucho m¨¢s abajo!¡±
Simon Sebag Montefiore recopila en un libro cartas selectas de la historia


¡°?Un beso en el coraz¨®n y otro abajo, mucho m¨¢s abajo!¡±. As¨ª se desped¨ªa Napole¨®n Bonaparte de su mujer Josefina en una carta el 24 de abril de 1796 enviada desde Italia donde el joven general combat¨ªa mientras le atormentaba los celos por su coqueta e infiel esposa. La misiva, con frases m¨¢s ¨¦picas pero menos sugerentes como ¡°Junot est¨¢ de camino de Par¨ªs con 22 banderas¡±, es una de las que ha seleccionado el conocido historiador Simon Sebag Montefiore (Jerusal¨¦n, Los Rom¨¢nov, Llam¨¢dme Stalin) para su estupenda antolog¨ªa Escrito en la historia, cartas que cambiaron el mundo(Cr¨ªtica 2019), aunque cuesta imaginar en qu¨¦ habr¨¢ cambiado el mundo la carta de Napoe¨®n enviando besos de cintura para abajo.
En la selecci¨®n figuran cartas conocidas y otras que son un verdadero hallazgo. Sebag Montefiore (londinense de 54 a?os) las ha rastreado en archivos y colecciones con un criterio que alterna lo relevante y lo conmovedor con lo anecd¨®tico y lo morboso, siempre con mucha inteligencia y la saz¨®n de un sentido del humor privilegiado.
Dividas en cartas de amor, familia, creaci¨®n, valor, descubrimiento, turismo, guerra, sangre, destrucci¨®n, desastre, amistad, locura, decencia, liberaci¨®n, destino, poder, ca¨ªda y despedida, la colecci¨®n incluye algunas tan notables como la de Bujarin a Stalin (¡°si van a condenarme a muerte te suplico que no me fusilen, d¨¦jame beber morfina¡±), la de Walter Raleigh a su esposa tambi¨¦n a la espera de ejecuci¨®n (¡°tu duelo no me aliviar¨¢ en nada, ya no soy m¨¢s que polvo¡±) o Lorenzo el Magn¨ªfico a su hijo reci¨¦n nombrado cardenal y que luego ser¨ªa el papa Le¨®n X (¡°elige comida sencilla y haz mucho ejercicio, peca de desconfiado antes que de confiado y sobre todo, lev¨¢ntate temprano¡±). Est¨¢ tambi¨¦n la carta nunca enviada que ten¨ªa preparada Eisenhower para hacer p¨²blica si fracasaba el d¨ªa D. Y la que env¨ª¨® Gandhi a Hitler inst¨¢ndole a detener la guerra.
"Las cartas de amor se parecen todas mucho", afirma el historiador
¡°He coleccionado cartas siempre¡±, explica Sebag Montefiore, de viaje en Barcelona, ¡°y me pareci¨® que una antolog¨ªa de las que tienen valor hist¨®rico podr¨ªa interesar¡±. Reconoce lo del morbo. ¡°Es cierto que las hay muy escabrosas, y bastantes sobre sexo y muerte, pero he querido huir de lo intrascendente, tan abundante hoy, y de lo predecible, y ofrecer un abanico muy amplio. As¨ª que hay cartas de la antig¨¹edad, como las de Rams¨¦s o Plinio y otras de ahora mismo, como la de Trump a Kim Jong-un¡±. Tambi¨¦n hay cartas de amor, ¡°si pero espero que no demasiadas, las cartas de amor se parecen todas mucho¡±.
Entre las m¨¢s asombrosas, acuerda, la del hermano de Maria Antonieta, el emperador Jos¨¦ II comentando a su otro hermano, Leopoldo, la vida sexual de la reina. ¡°?l tiene unas erecciones poderosas, pero se retira sin haber descargado y da las buenas noches¡°. El historiador r¨ªe: ¡°S¨ª, la actividad o m¨¢s bien inactividad de Luis XVI, es un tema de familia pero tambi¨¦n una preocupaci¨®n din¨¢stica¡±. La antolog¨ªa puede verse, se?ala el autor, ¡°como reivindicaci¨®n de un g¨¦nero que desaparece¡±.
Entre las cartas favoritas de Sebag Montefiore, la de Abderram¨¢n III a sus hijos en la que confiesa que en sus cincuenta a?os de reinado ha tenido solo 14 d¨ªas de felicidad. Otra de sus preferidas es la de una jud¨ªa checa a su marido, escrita a toda prisa en un trozo de papel mientras aguardaba a que la mataran por gas en Auschwitz. ¡°Esperamos a que empiece (...) Hasta la eternidad, Vilma¡±.
¡°?Protestas porque me est¨¦ follando a Cleopatra?¡±
Sorprende en la selecci¨®n de Sebag Montefiuore encontrar una carta del 33 antes de Cristo de Marco Antonio a Octavio, el futuro Augusto, en la que el general le espeta a su colega y cu?ado: "Qu¨¦ te pasa? ?Protestas porque me est¨¦ follando a Cleopatra? (...) ?De veras importa tanto qui¨¦n te la ponga dura?". Caramba, ?en esos t¨¦rminos? "Eran militares ambos y su forma de hablar deb¨ªa ser muy vulgar". En todo caso, la frase original, seg¨²n Suetonio, que cita la carta en el cap¨ªtulo 69 (!) de su vida de Augusto, en Los doce c¨¦sares, es: "Quid te mutavit? Quod reginam ineo? (...) An refert, ubi et in qua arrigas?" (versi¨®n Loeb Classical Library).
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
