Las vidas de la Ca?ada Real salen a escena
El Centro Dram¨¢tico Nacional estrena una obra sonora escrita por cinco dramaturgos y basada en habitantes reales del mayor asentamiento irregular de Espa?a. El proyecto se desarrolla tambi¨¦n en Poblenou, en Barcelona, y Vite, en Santiago
Miguel Mart¨ªn (Toledo, 68 a?os) ha trabajado toda su vida como tapicero, pero su sue?o siempre fue ser artista. ¡°Si me hubieran dejado estudiar Bellas Artes de peque?o, hoy ser¨ªa pintor y escultor¡±, asegura. Para quitarse esa espina, ahora que est¨¢ jubilado ha montado un taller en su casa donde lo mismo da rienda suelta a su imaginaci¨®n que construye r¨¦plicas de sus obras favoritas, lo que ha convertido su jard¨ªn en un peculiar museo en el que llaman la atenci¨®n dos grandes piezas: una pir¨¢mide egipcia de cuatro metros de alto y una reproducci¨®n del Guernica de Picasso cincelada en un m...
Miguel Mart¨ªn (Toledo, 68 a?os) ha trabajado toda su vida como tapicero, pero su sue?o siempre fue ser artista. ¡°Si me hubieran dejado estudiar Bellas Artes de peque?o, hoy ser¨ªa pintor y escultor¡±, asegura. Para quitarse esa espina, ahora que est¨¢ jubilado ha montado un taller en su casa donde lo mismo da rienda suelta a su imaginaci¨®n que construye r¨¦plicas de sus obras favoritas, lo que ha convertido su jard¨ªn en un peculiar museo en el que llaman la atenci¨®n dos grandes piezas: una pir¨¢mide egipcia de cuatro metros de alto y una reproducci¨®n del Guernica de Picasso cincelada en un murete.
Con esa gran pir¨¢mide se top¨® inesperadamente el autor teatral Jorge Aznar Canet cuando visit¨® a Mart¨ªn a principios de este a?o. Pero no fue a su casa atra¨ªdo por su faceta art¨ªstica, de la que de hecho no tuvo conocimiento hasta ese momento, sino porque durante las ¨²ltimas dos d¨¦cadas Mart¨ªn fue portavoz de la asociaci¨®n de vecinos de la Ca?ada Real de Madrid, conocido por ser el mayor asentamiento irregular de Espa?a y objeto de continuas pol¨¦micas sociales, como la que se desat¨® este invierno porque la empresa que le suministra energ¨ªa el¨¦ctrica interrumpi¨® el servicio (lo que persiste en algunas ¨¢reas) por supuestos enganches ilegales. El Centro Dram¨¢tico Nacional hab¨ªa encargado al dramaturgo que creara una pieza basada en personas reales que vivieran ah¨ª y pens¨® que ese hombre pod¨ªa ser una buena fuente de inspiraci¨®n. ¡°Mi idea inicial era escribir sobre la lucha vecinal por la legalizaci¨®n del barrio, pero al entrar en ese jard¨ªn me qued¨¦ obnubilado. Me di cuenta de que no sab¨ªa nada de lo que ocurr¨ªa aqu¨ª ni de la vida tan rica que hay detr¨¢s de lo que leemos en la prensa. Y decid¨ª que ten¨ªa que escribir sobre eso¡±, recuerda Aznar Canet.
As¨ª fue como Miguel Mart¨ªn y sus obras de arte se convirtieron en protagonistas de uno de las cinco escenas que componen la obra Dramawalker Ca?ada Real, escritas por cinco dramaturgos (Alberto Conejero, Mar¨ªa Velasco, Roberto Mart¨ªn, Cristina Rojas y el mencionado Aznar Canet) que han visitado el barrio durante los ¨²ltimos meses para conocer de primera mano qui¨¦n habita realmente ah¨ª y c¨®mo es su vida cotidiana, m¨¢s all¨¢ de su imagen estigmatizada como poblado chabolista o ¨¢rea de venta de drogas. Es una producci¨®n del Centro Dram¨¢tico Nacional (CDN) que adem¨¢s tiene la particularidad de que no est¨¢ concebida para ser representada en un teatro, sino para ser grabada en formato sonoro. ¡°Los espectadores van a poder escucharla desde sus casas a trav¨¦s de nuestra web, pero invitamos a que lo hagan paseando por los lugares donde suceden las cinco historias. Digamos que es la escenograf¨ªa ideal para que se cumpla el objetivo ¨²ltimo de este proyecto: no solo animar a los autores a que escriban sobre el barrio, sino que el p¨²blico conozca la realidad de la Ca?ada por encima del relato oficial¡±, explica Fernando S¨¢nchez-Cabezudo, coordinador art¨ªstico del CDN, que ya llev¨® a cabo en 2014 una experiencia similar de manera privada en el barrio de Usera de Madrid.
Interpretadas por 14 actores, entre los que figuran Carmen Machi, Carolina Yuste, Pepe Viyuela, Francesco Carril o Elena Gonz¨¢lez, las cinco escenas han sido grabadas in situ y a partir del 27 de junio los espectadores podr¨¢n descargarse en la web del CDN una aplicaci¨®n apara escucharlas, junto con un mapa en el que se indican los puntos donde suceden. ¡°Es una serie de ficciones, eso hay que dejarlo claro, pero todas est¨¢n basadas en vidas reales y el conjunto ofrece una visi¨®n bastante amplia de lo que es el barrio. Llevamos meses trabajando con asociaciones de la zona y vecinos para llegar a su esencia¡±, aclara la directora art¨ªstica del proyecto, Raquel Alarc¨®n.
El domingo pasado se termin¨® de registrar la ¨²ltima en el centro sociocomunitario del barrio, que fue donde el dramaturgo Roberto Mart¨ªn conoci¨® a los j¨®venes que la inspiraron. ¡°Est¨¢ protagonizada por dos chicas que discuten porque una de ellas va a irse a vivir fuera de la Ca?ada, pero m¨¢s all¨¢ de eso quer¨ªa que la obra reflejara una cosa importante que descubr¨ª en mis conversaciones con los chicos: su preocupaci¨®n por que no se les identificara en la obra, pues el hecho de vivir en la Ca?ada supone para ellos un conflicto permanente. A veces lo defienden a muerte y otras veces lo ocultan porque eso les estigmatiza¡±, contaba Mart¨ªn el domingo en un descanso de la grabaci¨®n.
El centro sociocomunitario, donde se realizan actividades de integraci¨®n de todo tipo, est¨¢ ubicado en el sector cinco de la Ca?ada, donde se levantaron algunas de las viviendas m¨¢s antiguas del barrio en los a?os setenta. Una de ellas es la de Germ¨¢n Cuesta, extreme?o de 80 a?os, que cuenta personalmente su historia en otra de las escenas de Dramawalker, a modo de entrevista dramatizada por Alberto Conejero. Su relato podr¨ªa ser el de cualquier espa?ol medio de su edad, m¨¢s que el que se espera escuchar de un habitante de un poblado chabolista. ¡°Cuando era joven me vine a trabajar de Extremadura a Madrid y me instal¨¦ en el barrio de Vallecas. Constru¨ª esta casa con mis propias manos para venir con mi familia los fines de semana y en los noventa decid¨ª instalarme directamente. Entonces est¨¢bamos aqu¨ª divinamente. Nos conoc¨ªamos todos, nos ayud¨¢bamos, ¨¦ramos como un pueblo. Lo que pasa es que nunca nos han dejado legalizar nuestras casas y eso hizo que empezara a entrar otra gente, drogas, problemas¡ Yo ahora ya me voy a vivir a una residencia¡±.
¡°?Pues claro que est¨¢bamos divinamente!¡±, corrobora Mart¨ªn, que tambi¨¦n construy¨® su casa en los setenta. Primero tambi¨¦n solo para los fines de semana, hasta que en los noventa decidi¨® convertirla en su vivienda habitual. ¡°Y no me pienso ir de aqu¨ª. Basta que te quieran echar, para que no me quiera ir. Nos han querido expulsar con derribos, con cortes de luz, diciendo barbaridades de nosotros¡ pero resistimos. Claro que hay alguna zona problem¨¢tica, pero eso no habr¨ªa ocurrido si nos hubieran dejado legalizar nuestras casas. ?No queremos solo que nos devuelvan la luz, queremos ser legales!¡±.
Las otras dos escenas que componen Dramawalker se inspiran en mujeres. La de Mar¨ªa Velasco, pensada para ser escuchada frente a un poste de luz en la Ca?ada, est¨¢ protagonizada por una madre marroqu¨ª y su hija afectadas por el corte del suministro el¨¦ctrico en pleno invierno. Y Cristina Rojas se bas¨® para la suya en un grupo de pintoras del barrio que mostraron sus obras en una exposici¨®n organizada recientemente por el centro sociocomunitario, lo que dej¨® muy sorprendida a la dramaturga: No solo por la belleza de las piezas, sino tambi¨¦n por la personalidad de las artistas. ¡°?Nunca pens¨¦ que hubiera tanta luz en este lugar!¡±.
Adem¨¢s de la Ca?ada Real, el proyecto Dramawalker del CDN se est¨¢ desarrollando en los barrios de Poblenou de Barcelona y Vite de Santiago de Compostela, coordinados respectivamente por la sala Beckett de la capital catalana y por el Centro Dram¨¢tico Galego en colaboraci¨®n con la compa?¨ªa Ch¨¦vere, ganadora del Premio Nacional de Teatro en 2014. La de Vite se podr¨¢ escuchar a partir del 13 de junio y Poblenou desde el 14 de julio.
Los dramaturgos Manuel Cort¨¦s, Paula Carballeira, Carlos Santiago, Esther Carrodeguas y Xron, bajo la direcci¨®n art¨ªstica de este ¨²ltimo, han sido los encargados de adentrarse en Vite, un barrio poblado mayoritariamente por personas con escasos recursos, la mayor¨ªa realojados en pisos de protecci¨®n oficial tras ser expulsados de las zonas m¨¢s tur¨ªsticas de Santiago de Compostela. En los a?os ochenta fue uno de los puntos negros de la hero¨ªna en Galicia, pero las organizaciones vecinales batallaron para sacar a sus j¨®venes de la marginalidad y en los noventa inventaron un grito de autodeterminaci¨®n para reivindicar su identidad frente al centro de la ciudad: ?Vite Naz¨®n! (?Vite Naci¨®n!).
En Barcelona, los creadores Roc Esquius, S¨ªlvia Navarro, Oriol Puig, Merc¨¨ Sarrias y Joan Yago han indagado en la memoria de Poblenou para reconstruir su historia: desde su pasado como ¨¢rea de mayor concentraci¨®n industrial de Catalu?a hasta su reconversi¨®n en un barrio multicultural de vanguardia y la lucha de los vecinos para evitar su gentrificaci¨®n.