Serigne Mbay¨¦: ¡°Tampoco en Senegal me sienten de all¨ª cuando voy¡±
Cogi¨® una patera sin dec¨ªrselo a su familia, sobrevivi¨® como mantero y cuidando a personas mayores. Es espa?ol y diputado en la Asamblea de Madrid por Unidas Podemos, pese a que a Vox le escueza
Pescaba en Senegal cuando descubri¨® que los caladeros andaban esquilmados y por tanto se truncaba el futuro. Serigne Mbay¨¦ (Kayar, Senegal, 46 a?os) cogi¨® una patera sin dec¨ªrselo a su familia, lleg¨® sano y salvo. En Espa?a sobrevivi¨® como mantero, cuidando a personas mayores, como auxiliar administrativo. Logr¨® la nacionalidad. Es espa?ol y diputado en la Asamblea de Madrid por Unidas Podemos, pese a que a Vox le escueza.
Pregunta. Le conocen como el mantero de Podemos, pero, dos a?os en eso, ?definen una vida?
Respuesta. Es lo que maneja la extrema derecha para su discurso de criminalizaci¨®n. Fueron dos a?os en los que me vi obligado a buscarme la vida y lo consideran una condena eterna.
P. Dentro de su peripecia, desde su experiencia como pescador en Senegal a salir en patera y la inmigraci¨®n en Espa?a, ?qu¨¦ es lo que m¨¢s ha definido su vida?
R. Me considero un luchador y una persona con derechos. La manta no es lo que m¨¢s nos motivaba. Yo no sab¨ªa c¨®mo vender. Me daba mucha verg¨¹enza. Lo que nos empuja a muchos es salir de una situaci¨®n en nuestros pa¨ªses derivada de la explotaci¨®n brutal de potencias extranjeras. No nos dan visado y se llevan lo que tenemos. El problema viene de fuera y escogemos una ruta para salir: el desierto o la patera.
P. ?Se jug¨® la vida en el mar con su oficio?
R. Muchas veces. He visto gente morir ante olas que no pod¨ªas controlar. Salir a pescar es una lucha.
P. ?Por qu¨¦ alguien decide dejar a su familia, a su esposa e hijos de seis, cuatro y un a?o y montarse en una patera?
R. Porque todo resulta insostenible all¨¢.
P. ?Cu¨¢nto le cost¨® el viaje?
R. Nada, lo negoci¨¦ a cambio de ocuparme de labores en la embarcaci¨®n. Yo llevaba tiempo queriendo salir, hab¨ªa solicitado un visado. Me acerqu¨¦ a un barco en la playa, pregunt¨¦ ad¨®nde iban y me fui.
P. ?No se lo cont¨® a nadie de su familia?
R. A nadie, si se enteran no me hubiesen dejado salir.
P. ?C¨®mo fue la traves¨ªa?
R. Dura. ?ramos 95 ¨Dbueno, uno cay¨® y se ahog¨®¨D en un barco para 40 o 50. Todos varones y algunos menores de edad.
P. Y al llegar, ?d¨®nde quiso o pudo ir?
R. En mi caso, nos trajeron a Madrid y nos acogi¨® la Cruz Roja, luego a Coru?a una semana y despu¨¦s nos dijeron que nos busc¨¢ramos la vida.
P. ?Qu¨¦ sab¨ªa de Espa?a?
R. Absolutamente nada, mi idea era entrar en Europa para tener una vida mejor, en la que puedes trabajar, mantenerte a ti y a los tuyos.
P. De Madrid, ?qu¨¦ sab¨ªa?
R. Que exist¨ªa la Gran V¨ªa por un ejercicio que hab¨ªa en clase de espa?ol, con gente elegante, dec¨ªa, con hoteles, cines y teatros.
De Madrid conoc¨ªa la Gran V¨ªa por un ejercicio que hab¨ªa en clase de espa?ol
P. Hoteles, cines y teatros a los que luego no pod¨ªa entrar cuando se puso a vender en la manta. ?Cu¨¢l fue el impacto entre la imagen que ten¨ªa y la realidad?
R. El humo, porque entonces se fumaba, el olor a jam¨®n y de cerveza me echaba para atr¨¢s. Yo nunca hab¨ªa entrado en bares. Hay cosas que nos dec¨ªan que deb¨ªamos evitar por alejadas de nuestra religi¨®n: soy musulm¨¢n.
P. Y el olor que despide una pata de jam¨®n o un torrezno frito le resultaba extra?o.
R. Me costaba un mont¨®n. Todo eso me costaba.
P. ?Es usted un musulm¨¢n estricto?
R. Ahora no, las cosas cambian, nadie puede cumplir 100% en la vida. Pero creo en lo que creo, en que Al¨¢ es ¨²nico. Y por otra parte respeto a todas las dem¨¢s religiones. De todas formas, aunque no he probado el jam¨®n, ya me he adaptado.
P. ?En qu¨¦ m¨¢s trabaj¨®?
R. En la construcci¨®n, cuidando personas mayores, de auxiliar administrativo. Ahora tengo un restaurante con socios.
P. Como empresario de hosteler¨ªa, a lo mejor le mola Isabel D¨ªaz Ayuso...
Con mi salario de diputado mantendr¨¦ a mi familia aqu¨ª y fuera
R. No, si mi restaurante funciona, no es por m¨¦rito de ella. Al convocar elecciones, perdimos un mont¨®n de millones en ayudas.
P. M¨ªrelo por el lado bueno. Convoc¨® elecciones y usted sali¨® usted elegido...
R. Para nada¡
P. ?Qu¨¦ va a hacer con su salario de diputado?
R. Muchas donaciones y mantener a mi familia aqu¨ª y fuera. Ayudar a compa?eros, si me piden un pr¨¦stamo, aunque no me lo puedan devolver, lo dar¨¦.
P. A ver si de bueno va a pasar ahora a tonto.
R. No pasa nada, no tengo ning¨²n ahorro, siempre he sido as¨ª y me ha ido muy bien en la vida.
P. ?C¨®mo se puede hacer un sindicato sobre algo que es ilegal como la venta en manta?
R. Para apoyar a compa?eros a que dejen de vender con pol¨ªticas inclusivas.
P. Ya no se ven tantas mantas en la calle. ?Qu¨¦ pasa?
R. La crisis, la gente compra con lo que le sobra.
Roc¨ªo Monasterio es racista y cree que yo no tengo lugar aqu¨ª, que no soy de aqu¨ª
P. Roc¨ªo Monasterio se los debe comprar originales.
R. Tendr¨¢ dinero y se lo podr¨¢ permitir. Lo que s¨ª s¨¦ es que ella es racista y cree que yo no tengo lugar aqu¨ª, que no soy de aqu¨ª.
P. ?De d¨®nde se siente, entonces?
P. Ciudadano del mundo. Tampoco en Senegal, cuando voy, me sienten de all¨ª. Aqu¨ª, ahora me siento mejor: tengo mi trabajo, estoy legalmente asentado, tengo amigos.
P. ?Se tomar¨ªa un caf¨¦ con Bertrand Ndongo, el camerun¨¦s simpatizante de Vox?
R. Si no hablamos de pol¨ªtica, s¨ª.
P. Y si se lo toma con D¨ªaz Ayuso, ?qu¨¦ le dir¨¢?
R. Con ella de pol¨ªtica s¨ª hablar¨ªa y le dir¨ªa a la cara las cosas que creo que hace bien y las que hace mal.
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