¡®Titane¡¯, la Palma de Oro que rompe el cuerpo
El talento visual de la francesa Julia Ducournau estalla en este filme, que lleva la teor¨ªa ¡®queer¡¯ al cine de g¨¦nero
Es dif¨ªcil escaparse de los efectos inmediatos de una pel¨ªcula tan desconcertante y f¨ªsica como Titane, una catarsis que, literalmente, deja al espectador molido. Premiada con la Palma de Oro en el ¨²ltimo festival de Cannes, la pel¨ªcula de Julia Ducournau es una fascinante f¨¢bula oscura y met¨¢lica, capaz de enfrentar...
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Es dif¨ªcil escaparse de los efectos inmediatos de una pel¨ªcula tan desconcertante y f¨ªsica como Titane, una catarsis que, literalmente, deja al espectador molido. Premiada con la Palma de Oro en el ¨²ltimo festival de Cannes, la pel¨ªcula de Julia Ducournau es una fascinante f¨¢bula oscura y met¨¢lica, capaz de enfrentar al espectador con los l¨ªmites y contradicciones de su propio cuerpo. Una inmersi¨®n en una esquizofrenia poshumanista pasada por la teor¨ªa queer y con sabor a after a trav¨¦s del cuerpo de un personaje que se escapa a todo lo previsible. El resultado es una pel¨ªcula tan osada y rabiosa que est¨¢ llamada a conectar, como pocas recientes, con una sensibilidad importante del presente.
En Crudo (2016), su primer y sorprendente trabajo, Ducournau se quedaba algo corta en su conversi¨®n de una joven y disciplinada vegana en atormentada can¨ªbal. En aquella pel¨ªcula, como en esta, la familia representaba una losa, una taimada zona de dolor y peligro. Titane va mucho m¨¢s all¨¢: dinamita la convenci¨®n sobre la que nos hemos construido. Desde su brutal pr¨®logo, expone su animadversi¨®n a la figura paterna. Una ni?a que ruge como un motor enerva a su padre desde el asiento de atr¨¢s de un coche. El padre no la soporta, la rechaza y, seguramente, la teme y la odia. La ni?a ni se inmuta.
El titanio del t¨ªtulo hace referencia a la placa que la andr¨®gina protagonista lleva en su cabeza y cuya cicatriz Ducournau convierte en el s¨ªmbolo de un cerebro averiado y enajenado que en muchos sentidos remite a una cumbre de la ciencia ficci¨®n y del expresionismo alem¨¢n, la Mar¨ªa-robot del Metr¨®polis, de Fritz Lang. La presentaci¨®n del personaje ya adulto en un intenso plano secuencia es el primero de una serie de zarandeos de v¨¦rtigo. Cuesta no taparse la cara ante muchos momentos gore de Titane, pero tambi¨¦n cuando una melena se enreda en el piercing de un pez¨®n (aqu¨ª todo el dolor pasa por alg¨²n metal) o cuando la protagonista, cuyo erotismo solo entiende de coches, sangra combustible.
Aunque el verdadero dolor de esta pel¨ªcula no va de v¨ªsceras y llega cuando aparece el personaje de Vincent Lindon, actor que convierte sus ojos claros fuera de ¨®rbita y sus b¨ªceps en una desbocada expresi¨®n de una masculinidad ajada y herida que se nutre de anabolizantes, dopada por pura supervivencia. Es un padre ?jefe de bomberos! que ha perdido a su hijo y que encuentra en un cuerpo mutante la respuesta a su vac¨ªo. Resuenan los ecos de Hulk (el cuerpo que revienta) en un hombre que encuentra su tabla de salvaci¨®n en un hijo Frankenstein. Cargada de referentes (David Cronenberg, John Carpenter) aunque con una autenticidad pasmosa, Julia Ducournau llena su pel¨ªcula de m¨²sculo visual y cerebro, y gracias a Lindon tambi¨¦n de coraz¨®n. Su presencia en el imborrable plano final de Titane abre un debate precisamente sobre lo que representa la figura de ese nuevo ?padre? dispuesto a abrazar un monstruo que despu¨¦s de pasar por las entra?as de esta pel¨ªcula tambi¨¦n es nuestro.
TITANE
Dirección: Julia Ducournau.
Intérpretes: Vincent Lindon, Agathe Rousselle, Bertrand Bonello, Garance Marillier, Laïs Salameh.
Género: fantástico. Francia, 2021.
Duración: 108 minutos.