Activistas clim¨¢ticos lanzan pur¨¦ de patata a un cuadro de Monet en Alemania

Dos activistas del grupo alem¨¢n de protesta por la protecci¨®n del clima ?ltima Generaci¨®n han atacado este domingo un cuadro del pintor impresionista franc¨¦s Claude Monet, lanzando una sustancia viscosa y amarillenta contra ¨¦l en el Museo Barberini de Potsdam, al suroeste de Berl¨ªn. El propio grupo ha reconocido y publicitado la acci¨®n en redes sociales, donde ha asegurado que se trata de pur¨¦ de patata. El cuadro, perteneciente a la serie Les Meules (Los almiares) de Monet (1889-1891) no ha sufrido ning¨²n da?o, seg¨²n un primer an¨¢lisis de conservaci¨®n, ha asegurado a EL PA?S una portavoz del museo. Estaba protegido por un cristal.

El grupo ha publicado en Twitter un v¨ªdeo del ataque en el que exige a la clase pol¨ªtica que tome medidas para luchar contra la crisis clim¨¢tica. Tras lanzar la sustancia, los dos activistas se han pegado con pegamento a la pared, junto al cuadro. El museo espera volver a exponer la pieza el pr¨®ximo mi¨¦rcoles, ha a?adido la portavoz. En la acci¨®n participaron otras dos personas, adem¨¢s de los dos activistas que lanzaron el supuesto pur¨¦ de patata y que fueron detenidos poco despu¨¦s, seg¨²n un portavoz policial. Se les acusa de da?os a la propiedad.

Ortrud Westheider, directora del Museo Barberini, asegura sentirse muy ¡°aliviada¡± de que la pintura no haya sufrido ning¨²n da?o. ¡°Aunque entiendo la preocupaci¨®n urgente de los activistas frente a la cat¨¢strofe clim¨¢tica, estoy conmocionado por los medios con los que est¨¢n tratando de dar peso a sus demandas¡±, se?al¨® en un comunicado. ¡°En las obras de los impresionistas vemos el intenso compromiso art¨ªstico con la naturaleza. Las numerosas pinturas de paisajes de la Colecci¨®n Hasso Plattner pueden inspirar a los visitantes a reflexionar y cuestionar su relaci¨®n con el medio ambiente¡±, a?adi¨®. El cuadro, de 1890, pertenece a la exposici¨®n permanente del Museo Barberini y procede de la colecci¨®n de su fundador, el multimillonario Hasso Plattner.

Sopa de tomate contra ¡®Los Girasoles¡¯

Hace poco m¨¢s de una semana, activistas arrojaron sopa de tomate al cuadro Los Girasoles, del artista holand¨¦s Vincent van Gogh, en la National Gallery de Londres. El marco result¨® ligeramente da?ado en el ataque. Como en el caso del monet en Alemania, la obra estaba protegida por un cristal.

Los activistas, un hombre y una mujer vestidos de negro y con chalecos reflectantes naranjas, aseguran en el v¨ªdeo tras lanzar la sustancia amarillenta que ¡°la gente se muere de hambre y de fr¨ªo¡±. ¡°Nos encontramos en una cat¨¢strofe clim¨¢tica. Y de lo ¨²nico que ten¨¦is miedo es de la sopa de tomate y del pur¨¦ de patata en un cuadro. ?Sab¨¦is de lo que tengo miedo yo? De que los cient¨ªficos dicen que en 2050 no podremos alimentar a nuestras familias. ?Har¨¢ este pur¨¦ de patata que escuch¨¦is? El cuadro no valdr¨¢ nada cuando tengamos que pelear por la comida¡±, grita la mujer mientras el personal de seguridad les observa y, aparentemente, avisa a la Polic¨ªa.

El grupo ?ltima generaci¨®n lleva varios meses organizando distintas protestas junto a obras de arte famosas para llamar la atenci¨®n de la sociedad y los pol¨ªticos sobre la crisis clim¨¢tica. En agosto, dos de sus activistas se pegaron a una obra de Lucas Cranach el Viejo en la Pinacoteca de Berl¨ªn. Tambi¨¦n lo han hecho con una obra del pintor renacentista italiano Rafael, la conocida como Madonna Sixtina, que se exhibe en Dresde. En ambos casos se pegaron las manos al marco de las pinturas. Este grupo de j¨®venes activistas forma parte de la red internacional A22, que define sus acciones como ¡°pac¨ªficas¡± y de ¡°resistencia civil¡± para exigir a los gobernantes medidas ante la inminente cat¨¢strofe clim¨¢tica.