La ¨®pera de ¡®La Regenta¡¯: una producci¨®n l¨ªrica de muy?alto?voltaje
El montaje, con libreto de Amelia Valc¨¢rcel y composici¨®n de Marisa Manchado Torres, se estrena en Matadero despu¨¦s de dos decenios, aunque en una versi¨®n muy resumida
Es bien conocido que La Regenta, el cl¨¢sico de Leopoldo Alas, ha sufrido considerables frenazos por razones de toda ¨ªndole. Frenazos que el franquismo prolong¨® hasta que una pel¨ªcula y una serie de televisi¨®n reclamaron la merecida popularidad de esta obra, que algunos han juzgado como capaz de estar a la altura de El Quijote.
Quiz¨¢ esta maldici¨®n haya salpicado algo al proyecto de ¨®pera que imaginaron hace ya un par de d¨¦cadas Amelia Valc¨¢rcel como libretista y la compositora ...
Es bien conocido que La Regenta, el cl¨¢sico de Leopoldo Alas, ha sufrido considerables frenazos por razones de toda ¨ªndole. Frenazos que el franquismo prolong¨® hasta que una pel¨ªcula y una serie de televisi¨®n reclamaron la merecida popularidad de esta obra, que algunos han juzgado como capaz de estar a la altura de El Quijote.
Quiz¨¢ esta maldici¨®n haya salpicado algo al proyecto de ¨®pera que imaginaron hace ya un par de d¨¦cadas Amelia Valc¨¢rcel como libretista y la compositora Marisa Manchado Torres. Pero, como veinte a?os no es nada, que dec¨ªa el tango, la ¨®pera ha terminado por llegar a las tablas de Matadero Madrid gracias a la colaboraci¨®n del Teatro Real y el Teatro Espa?ol. Eso s¨ª, no le ha faltado su punto de mezquindad, ya que la versi¨®n que Manchado ten¨ªa ya terminada se ha visto obligada a jibarizarse en formato, duraci¨®n y orquestaci¨®n. Queda, pues, para un futuro por determinar la posibilidad de que la ¨®pera completa se vea y escuche en alg¨²n lugar de nuestra sufrida patria.
De todos modos, la versi¨®n apretada de La Regenta que se estren¨® este martes en Madrid brinda un espect¨¢culo portentoso por muy diversos motivos. Hay una filiaci¨®n feminista muy clara desde el origen del proyecto y la visi¨®n musical de Manchado entra de lleno en ello. Dec¨ªa la compositora en una reciente entrevista que sus referencias m¨¢s importantes eran las dos ¨®peras de Alban Berg, Wozzeck y Lul¨², y Die Soldaten, de Zimmermann en una ciudad cuartel del siglo XVIII. Son tres momentos culminantes de la destrucci¨®n de una mujer, salvo en Wozzeck, en donde la aniquilaci¨®n de Marie es un drama colateral a la destrucci¨®n del pobre soldado Wozzeck. Pero es, sin duda, de Die Soldaten donde la referencia es m¨¢s clara, el modo en que el entorno de hombres, desde el padre hasta los nobles que pululan por la ciudad cuartel que retrata Jacob Lenz destruyen a Marie (otra Marie).
Es muy interesante que los personajes principales de esta Regenta oper¨ªstica vayan vestidos a lo siglo XVIII, mientras que el resto, reflejado por el coro, lo hagan en su ¨¦poca, finales del XIX e incluso la amiga de la infortunada Ana Ozores, Obdulia, aparezca como una buscona de nuestra ¨¦poca reciente. La idea est¨¢ muy clara y funciona admirablemente, Ana Ozores, la Regenta, es en cierto modo todas las mujeres, al menos las m¨¢s desafortunadas de la tradici¨®n oper¨ªstica moderna. Es un grito de protesta necesario ante la cansina repetici¨®n de hero¨ªnas l¨ªricas siempre sacrificadas, siempre destruidas que lastran pesadamente la historia del arte l¨ªrico. Tambi¨¦n es interesante el dato de que Ozores es permanentemente vestida y vuelta a desvestir por dos criadas a la vista del p¨²blico, como si fuera un monigote o un personaje prescindible en una historia en la que siempre ganan los seres despreciables que, ?oh casualidad!, son siempre hombres. Este ¨²ltimo dato me sirve para mencionar a otra mujer, B¨¢rbara Lluch, directora de escena del montaje, que, no solo desnuda a la protagonista, tambi¨¦n lo hace con un escenario desprovisto de rasgos y que traslada al espectador la forma de un infierno mental que es el verdadero teatro del drama de La Regenta.
En lo que concierne a los elementos art¨ªsticos de esta propuesta, destacar¨ªa, en primer lugar, los musicales. Marisa Manchado maneja con imaginaci¨®n m¨¢s que notable los recursos de un ensemble de diecisiete instrumentos, alternando los tutti con escalofriantes solos instrumentales que se enroscan en el entramado de la voz. En lo que concierne a la vocalidad, Manchado maneja con sobriedad un texto que conduce inexorablemente a un recitativo dram¨¢tico en que salpican gestos melism¨¢ticos con otros hablados, pero lo suficientemente cortos que suenan como pura m¨²sica. Con estas herramientas construye una narraci¨®n muy convincente que apenas recurre a concesiones tan habituales hoy d¨ªa. Es m¨²sica moderna que no pide permiso para serlo ni proclama manifiesto alguno. Una haza?a, indudablemente, que sit¨²a a Marisa Manchado en un palmar¨¦s muy alto en la ¨®pera contempor¨¢nea espa?ola actual.
El libreto de Amelia Valc¨¢rcel tiene el m¨¦rito de proporcionar casi un esqueleto de la novela original de Alas sin que quede nada por decir; lo que queda es una desolada historia de destrucci¨®n de una mujer como seguramente ha habido miles. Y ese vac¨ªo de espesor en el da?o es su mayor aportaci¨®n a cualquier debate contempor¨¢neo sobre el sufriente estatuto de m¨²ltiples mujeres que quiz¨¢ sean solo una, en este caso Ana Ozores.
Respecto al equipo art¨ªstico, destaquemos el reparto dominado por la soprano Mar¨ªa Mir¨®, que encarna a la desgraciada Ana Ozores con enorme solvencia, tanto vocal y musical como actoral. Sus antagonistas, los hombres que la llevan a la ruina, tienen una plasmaci¨®n l¨ªrica excelente, David Oller, en su papel de Magistral, y Vicen? Esteve como el p¨¦rfido y sinuoso ?lvaro Mes¨ªa; sin olvidar al melifluo y, a la postre, t¨®xico marido interpretado eficazmente por Cristian D¨ªaz. Con menci¨®n especial para la Obdulia de Mar¨ªa-Rey Joly. El resto del reparto est¨¢ a la altura de una ¨®pera equilibrada y eficaz.
Los directores art¨ªsticos llevan su gesti¨®n con maestr¨ªa. A la batuta musical, merece sobresaliente el joven y ya bien probado Jordi Franc¨¦s y la ya citada B¨¢rbara Lluch en lo esc¨¦nico. Tambi¨¦n merece menci¨®n especial el coro que canta y act¨²a admirablemente, encarnando el esp¨ªritu de Vetusta desde unas gradas inquietantes que acent¨²an la soledad y el miedo de la protagonista.
En resumen, una producci¨®n l¨ªrica de muy alto voltaje que pregona las virtudes de unas artistas necesarias.
FICHA T?CNICA
La Regenta. Música, Marisa Manchado Torres. Libreto, Amelia Valcárcel, basado en la novela homónima de Leopoldo Alas, Clarín.
Dirección musical, Jordi Francés. Dirección de escena, Bárbara Lluch. Espacio escénico e iluminación, Urs Schönebaum. Vestuario, Clara Peluffo. Dirección del coro, Josep Vila i Casañas. Reparto: La Regenta, María Miró; El magistral, David Oller; Álvaro Mesía, Vicenç Esteve; Don Víctor, Cristian Díaz; Paco Vegallana, Pablo García-López; Obdulia, María-Rey Joly; Petra, Anna Gomá; Doña Paula, Laura Vila; Sapo, Gabriel Díaz. Coro de la Comunidad de Madrid. Orquesta Titular del Teatro Real.
Nueva coproducción del Teatro Real con el Teatro Español. Naves del Español en Matadero. 24 al 29 de octubre. Estreno absoluto.