Nino de los Reyes, bailaor: ¡°Los tablaos en Espa?a no son caros, es que los sueldos son irrisorios¡±

Nino de los Reyes (Boston, 1985) es hijo de los bailaores Ram¨®n de los Reyes y Clara Ramona. Estrena obra, Vuelta al sol, en la Suma Flamenca que se celebra hasta el 5 noviembre en Madrid. La presenta el 29 de octubre en Teatros del Canal y en su coreograf¨ªa colabora el Premio Nacional de Danza 2020, Jes¨²s Carmona, que destaca de su colega la influencia que ha ejercido en los bailaores actuales por su capacidad r¨ªtmica y su conocimiento del claqu¨¦. Un ritmo que al aludido le hace sentirse tan m¨²sico como bailaor, y que lo llev¨® a girar por el mundo con Chick Corea, con quien gan¨® un Grammy gracias al disco Antidote, en el que puso sus pies al servicio de la percusi¨®n.

Pregunta. Es hijo artistas, ?era inevitable lo del baile?

Respuesta. La verdad es que no, yo jugaba en el filial del Atl¨¦tico de Madrid, pero sal¨ªa del colegio y me iba a tomar una clase, volv¨ªa a casa a merendar, me iba a tomar m¨¢s clases otra vez, luego al conservatorio... Por c¨®mo soy, no habr¨ªa sido artista de no haberlo querido.

P. ?Qu¨¦ riesgos tiene ser ni?o artista?

R. Se pierde mucha infancia. Este espect¨¢culo, Vuelta al sol, es un regreso a esa infancia cuando bailaba sin pensar en nada, ni en conceptos, ni en c¨®mo financiar un proyecto, ni en mi proyecci¨®n. Y me est¨¢ removiendo mucho. Por ejemplo, he vuelto a momentos como los de estar de gira, o de que con nueve a?os yo estuviera en cartel en Londres hasta cinco semanas. Eso es dif¨ªcil para un cr¨ªo.

P. ?Qu¨¦ cambiar¨ªa?

R. No saltarme etapas. Siempre fui solista, no pas¨¦ por compa?¨ªas y habr¨ªa sido bueno para m¨ª. Y luego est¨¢ lo de ser un ni?o prodigio, que te ensalzan, que te lo crees y luego... El ego y la frustraci¨®n son cosas dif¨ªciles de gestionar, m¨¢s a esa edad. Creo que es algo distinto en casos como el de Farruquito, porque adem¨¢s de criarse en un entorno art¨ªstico desde la cuna, nacen en una saga y son estrellas casi desde la cuna. Quiz¨¢ sea m¨¢s f¨¢cil asimilar ciertas cosas cuando naces con ese sello, el de su abuelo Farruco, que sigue siendo mi ¨ªdolo.

P. ?Por eso insiste en esas cuestiones cuando imparte clases?

R. S¨ª, porque hoy todo eso est¨¢ m¨¢s acentuado por las redes sociales. Lo hablo mucho con Joaqu¨ªn San Juan, director de la academia Amor de Dios, donde doy clase a ni?os, y ¨¦l lo tiene claro: no formamos estrellas, sino personas que si lo quieren, puedan vivir de su baile el d¨ªa de ma?ana.

P, ?Y qu¨¦ pasa con los padres?

R. Tampoco saben asimilarlo. Incluso en mi caso, siendo hijo de artistas, hay veces en las que me han puesto mucha presi¨®n. Yo me he enfadado a veces por que mi padre me preguntara cu¨¢l iba a ser el siguiente teatro donde iba a bailar en lugar de c¨®mo estaba. Lo hacen porque quieren lo mejor para ti, pero cuando eres tan joven, a veces es duro.

P. ?Afecta a la salud mental?

R. Claro. Por ejemplo, a m¨ª nadie me habl¨® de qu¨¦ hacer cuando no baile y solo desde hace un tiempo empiezo a pensar en ello. He empezado a buscar hobbies porque me di cuenta de que mi padre, con 86 a?os, lo ¨²nico que sabe hacer es bailar. Actualmente, por fortuna, ya hablamos de deportistas que se quiebran, lo dicen y buscan ayuda. En el flamenco eso no lo veo.

P. Y volviendo a su infancia, ?qu¨¦ le aport¨® Estados Unidos?

R. Vine a Madrid con tres a?os y medio, pero pasaba muchas temporadas all¨ª. Las aprovech¨¦ para nutrirme con clases de tap, de jazz, bebiendo de la m¨²sica negra, de familiares m¨ªos que se dedican al heavy...

P. Dice su amigo Jes¨²s Carmona que lo m¨¢s destacado de usted es la huella que ha dejado en los ¨²ltimos diez a?os en bailaores como ¨¦l mismo o Alfonso Losa. Y destaca su dominio del contratiempo. ?Es mucho peso?

R. Es un honor que diga eso. La verdad es que tard¨¦ en sacar mi propia personalidad porque estuve muchos a?os trabajando en las obras de otros. He girado con Enrique Morente, con Chick Corea... y no fue hasta 2010, cuando gan¨¦ tres premios en el Certamen de Coreograf¨ªa de Madrid, cuando saqu¨¦ afuera mi propia forma de ver el baile.

P. ?Y cu¨¢l es?

R. Pues yo soy un ladr¨®n. Mi madre es bailarina de academia, cl¨¢sica, as¨ª me form¨®. Mi padre, un flamenco tradicional. Toda la influencia latina que mam¨¦ en Estados Unidos tambi¨¦n est¨¢ en esa visi¨®n. Piensa que nac¨ª en Dorchester, el barrio de Mark Wahlberg, y el rap tambi¨¦n fue algo que viv¨ª desde peque?o y del que cog¨ª muchas cosas. Porque si algo tengo claro es que siempre me ha gustado ahondar y jugar con el ritmo.

P. ?Por eso suele decir que aparte de Farruco su ¨ªdolo es Michael Jackson?

R. ?S¨ª! Para m¨ª sigue siendo el artista m¨¢s grande que existe.

P. ?No se enfadar¨ªan Chick Corea y Enrique Morente si lo escucharan?

R. Qu¨¦ va, a ellos los tuve cerca, me ense?aron. Much¨ªsimo, adem¨¢s. Enrique, sin ir m¨¢s lejos, esa manera de infundir respeto sin alzar la voz, casi sin decir nada.

P. ?Y Corea?

R. Buf. Fueron muchas cosas en seis a?os de giras. Pero me quedo con cosas muy cotidianas que me ayudaron mucho. Por ejemplo, el d¨ªa que fui a quejarme porque el suelo que me pon¨ªan para bailar en algunos auditorios no era ideal y no me permit¨ªa expresarme.

P. ?Qu¨¦ le dijo?

R. Que ten¨ªa raz¨®n pero que si yo no era capaz de sacar el 100% de lo que dispon¨ªa en cada circunstancia, iba a ser siempre preso del momento.

P. ?Qu¨¦ flamenco!

R. ?Mucho! Dec¨ªa cosas as¨ª, como sentencias. Otra vez me dijo que no pod¨ªa estar esperando a que nadie o algo me inspirara. Que como artista, era mi obligaci¨®n inspirar a los dem¨¢s.

R. Crear no es lo mismo que bailar para otros y ahora est¨¢ a punto de estrenar su quinta obra tras Origen (2010), Inside (2014), Tierra (2019) y PerpetuARTE (2020). ?Le parecen muchos o pocos?

P. Pues me parecen pocos, la verdad. Pero es muy dif¨ªcil sacar adelante tus propuestas. Hay que estar fuerte psicol¨®gicamente y econ¨®micamente, porque hay poca inversi¨®n y cuando arrancas, arrastras a mucha gente que tiene que cobrar, tu familia tiene que comer... Es complicado.

R. En esta nueva obra va muy bien acompa?ado.

P. S¨ª, has nombrado a Carmona, que es como mi hermano. Est¨¢ en la percusi¨®n Lucky Losada, la guitarra de Israel Cerreduela, que tiene ese toque de su padre, David, ese aire del sonido Ca?o Roto, tan madrile?o como yo y que me gustaba tanto de chiquito. Y el cante de El Canito de M¨¢laga.

P. Todo hombres... ?qu¨¦ flamencas le entusiasman?

R. A m¨ª me vuelve loco el baile de La Chana y el de Carmen Amaya. Reconozco que me gusta el flamenco fuerte, el de pierna, sea de hombre o de mujer.

P.. S¨ª, pero La Chana apenas baila ya y Amaya es parte de la historia. Recomi¨¦ndeme a algunas de sus coet¨¢neas.

R. Bel¨¦n L¨®pez, yo he bailado mucho con ella y me encanta. Es una locura c¨®mo baila, es un portento. Patricia Guerrero, tambi¨¦n premio Nacional de Danza, es impresionante. O Paloma Fantova, con quien tambi¨¦n he trabajado mucho. Y por supuesto, Manuela Carrasco, una maestra. Y admiro much¨ªsimo todo lo que hace Roc¨ªo Molina.

P. ?Y del flamenco de Estados Unidos qu¨¦ aprendi¨®?

R. Tengo que decir que mi padre hac¨ªa lo mismo all¨ª que cuando iba de gira por el mundo. Yo tambi¨¦n. El flamenco es lo mismo en todos los lados.

P. ?Tambi¨¦n el reconocimiento a los artistas?

R. ?No! All¨ª hay m¨¢s respeto.

P. ?Entiende que no se estudie el flamenco en las escuelas?

R. No. Aqu¨ª te dan una flauta como toda formaci¨®n musical. No lo entiendo porque el flamenco es una creaci¨®n espa?ola, pero, adem¨¢s, creo que ser¨ªa un buen veh¨ªculo para explicar partes de nuestra Historia, tambi¨¦n de geograf¨ªa, y por supuesto, para hablar de poes¨ªa.

P. Le encanta bailar en tablaos. ?Qu¨¦ le sugiere la frase ¡°Recomi¨¦ndame uno que no sea para guiris¡±?

R. Uno, que a pesar de la calidad que ofrecen la mayor¨ªa, efectivamente son los extranjeros los que mantienen los tablaos. Dos, que es as¨ª porque pueden pagarlo. Tres, que es caro montar uno, montar un show y pagarle al personal. A m¨ª me hace gracia, por decir algo, cuando alguien viene y te dice luego: ¡°Pues estaba muy bien el espect¨¢culo¡±. ?Claro que estaba bien! Porque hay sitios que no cuidan al artista ni al espectador, no voy a negarlo, pero s¨¦ de primera mano que en la mayor¨ªa trabajan artistas que se toman un tablao tan en serio como el mejor teatro del mundo.

P. ?Usted cree que son caros?

R. No, en Estados Unidos ir a un club de jazz es m¨¢s caro. Los tablaos en Espa?a no son caros, es que los sueldos son irrisorios. Por eso lo que yo propongo no es que los shows sean m¨¢s baratos, sino los salarios m¨¢s altos. Y que se le d¨¦ a la cultura en general, y al flamenco en particular, el sitio que merece.