¡®Pobres criaturas¡¯, in¨²til pasote de Lanthimos, otro director de moda
Imagino que el loable prop¨®sito del director es hablar de la emancipaci¨®n femenina, pero la forma de contar esta historia supone un mareo visual
Hay pel¨ªculas cuyo argumento, los personajes que lo habitan, la forma de contar la historia, te provocan indiferencia, rechazo, aburrimiento; no logras creerte nada, te suponen una intolerable p¨¦rdida de tiempo, aunque este te sobre. Pero tambi¨¦n existen otras, que adem¨¢s de esas lamentables sensaciones, tienen el poder de atacarme los nervios, irritarme, maldecir mentalmente a sus insoportables creadores. Estos pretenden ser originales, vanguardistas, desafiantes, poseedores de un universo complejo, en posesi¨®n de una parroquia fija y sofisticada que disfruta cantidad con las claves intelectuales y juguetonas que les ofrece el autor, con su experimentalismo, con su tono falsamente naif, con el tenaz autoconvencimiento de que lo que hacen es genial.
Acostumbran a reinar estos autores en los festivales de cine, templos adecuados para la estupidez pretenciosa. Y tambi¨¦n pueden ser bendecidos con los Oscar que otorga el mercantilista Hollywood cuando intenta mont¨¢rselo de vanguardista o entusi¨¢sticamente comprensivo con las tramas y los mensajes de los nuevos tiempos. Ocurri¨® el pasado a?o con esa insufrible y aburrid¨ªsima tonter¨ªa titulada Todo a la vez en todas partes. Y con el cine del aclamado (por los de siempre, por supuesto) Wes Anderson.
Y me toca algo previsiblemente ingrato para mis viejos y anquilosados gustos, como ver la ¨²ltima perla del director griego Yorgos Lanthimos. Se titula Pobres criaturas. Despu¨¦s de sufrirla le a?adir¨ªa el subt¨ªtulo de ¡°Pobres espectadores¡°. Viene glorificada por el festival de Venecia, y los premios Oscar tambi¨¦n la han seleccionado en su cosecha m¨¢s destacada y brillante del a?o. Ser¨ªa consecuente con su nueva pol¨ªtica que se lo concedieran. A m¨ª sus 150 minutos me suponen una tortura, aunque reconozco que su retorcido guion y la absurda ¡ªaunque tambi¨¦n enloquecida¡ª utilizaci¨®n de la c¨¢mara que ha perpetrado Lanthimos deben de haber supuesto un considerable esfuerzo para ¨¦l.
Contar su argumento tambi¨¦n es laborioso. Imagino que el loable prop¨®sito del director es hablar de la emancipaci¨®n femenina, de que en ¨¦pocas opresivas una mujer que ha vivido un inquietante proceso f¨ªsico y mental mande al infierno los prejuicios y las convenciones que imponen los machos a su g¨¦nero y se dedique a satisfacer los deseos de su piel. Un cient¨ªfico en la onda del doctor Frankenstein la salv¨® despu¨¦s de su intento de suicidio y le instal¨® el cerebro del feto del que estaba embarazada. Se expresa con balbuceo de ni?a, descubre el placer sexual que puede otorgarse a s¨ª misma, carece de inhibiciones y de filtros. Su mente madura, hombres muy distintos se enamoran de ella, viaja incansablemente, se hace puta sin el menor complejo de culpa y muchas veces disfruta de su oficio, rompe todos los tab¨²s que la tradici¨®n pretende imponer a su oprimido g¨¦nero.
La forma de contar esta historia supone un mareo visual. La c¨¢mara se dedica de principio a fin a buscar ¨¢ngulos retorcidos, tambi¨¦n alterna el blanco y negro y el color. Qu¨¦ man¨ªa. Imagino que el revolucionario Lanthimos est¨¢ convencido de que esta metodolog¨ªa narrativa va a fascinar al espectador. All¨¢ ¨¦l. All¨¢ los espectadores. Hay algunos di¨¢logos ingeniosos, demostrativos de que el director sabe manejar la iron¨ªa y el esperpento. Y eso exige listeza. Sirven para que te despiertes en alg¨²n momento. Emma Stone es muy buena actriz, con registros amplios, pero preferir¨ªa que su talento estuviera al servicio de otro tipo de personajes. Aqu¨ª todo es tan pretencioso como absurdo.
Pobres criaturas
Dirección: Yorgos Lanthimos.
Intérpretes: Emma Stone, Willem Dafoe, Mark Ruffalo, Ramy Youssef, Kathryn Hunter.
Género: drama. EE UU, 2023.
Duración: 141 minutos.
Estreno: 26 de enero.
Babelia
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