Yulia Lytvynets, directora del Museo Nacional de Ucrania: ¡°Hoy ni el arte puede tender un puente entre Rusia y Ucrania¡±
La acad¨¦mica, que estuvo en Espa?a y visit¨® El Prado, refleja los efectos de la guerra en su pinacoteca: ¡°Hoy el nuestro es un museo de marcos, no de cuadros¡±
Casualidades de la vida, cuando el fot¨®grafo le pide a Yulia Lytvynets (Olexandria, 47 a?os) que gire un pasillo en el Museo del Prado para tomarle una fotograf¨ªa, al fondo aparece Las meninas. Ese cuadro de Vel¨¢zquez representa la supervivencia del arte no solo al tiempo, sino a las m¨¢s diversas cat¨¢strofes: del incendio del Alc¨¢zar en 1734 a la Guerra Civil. Directora del Museo Nacional de Arte de Ucrania ...
Casualidades de la vida, cuando el fot¨®grafo le pide a Yulia Lytvynets (Olexandria, 47 a?os) que gire un pasillo en el Museo del Prado para tomarle una fotograf¨ªa, al fondo aparece Las meninas. Ese cuadro de Vel¨¢zquez representa la supervivencia del arte no solo al tiempo, sino a las m¨¢s diversas cat¨¢strofes: del incendio del Alc¨¢zar en 1734 a la Guerra Civil. Directora del Museo Nacional de Arte de Ucrania en Kiev desde 2016, el centro que dirige es hoy el mayor ejemplo de museo asediado por el peligro. Con motivo de las celebraciones del D¨ªa Internacional de los Museos (18 de mayo), Lytvynets visit¨® por primera vez Espa?a para dar una conferencia el pasado jueves en El Prado, en la que repas¨® los retos para proteger el arte de un museo en el que, como record¨® con tristeza y esperanza, ¡°hoy solo cuelgan marcos, no cuadros¡±.
Pregunta. ?C¨®mo est¨¢ siendo su visita?
Respuesta. Bien, tranquila, rodeada de amigos. Es mi primera vez en Espa?a.
P. Es un sentimiento muy distinto al que debi¨® experimentar en febrero de 2022. ?C¨®mo se sinti¨® entonces?
R. Sent¨ª mucha responsabilidad, pero no solo ante el Estado. Tambi¨¦n ante mi pa¨ªs, ante el mundo.
P. ?C¨®mo cambia la guerra el funcionamiento de un museo?
R. Cambi¨® totalmente la vida de nuestro museo. No hay una exposici¨®n permanente, la colecci¨®n est¨¢ escondida y protegida, y nos dedicamos a labores de conservaci¨®n.
P. ?Est¨¢ abierto?
R. No, normalmente est¨¢ cerrado. Abrimos solo algunos d¨ªas, algunos fines de semana, algunas horas. Organizamos exposiciones peque?as en las que lo m¨¢s importante es que, si suenan las alarmas, hay que desmontarlas y guardarlas r¨¢pidamente. Tambi¨¦n damos clases, no solo online, tambi¨¦n presenciales.
P. ?Ha recibido ayuda internacional?
R. Mucha. El mismo mes de marzo de 2022, del Museo Nacional de Letonia. Y luego, del Ministerio de Cultura alem¨¢n, de fondos internacionales, de Francesca Thyssen-Bornemisza... y, sobre todo, de muchos voluntarios an¨®nimos, no solo ucranios.
P. ?Cu¨¢l dir¨ªa que es el rol del arte en tiempo de guerra?
R. Es una pregunta compleja, con muchas respuestas... Los artistas siempre reaccionan muy r¨¢pido a los acontecimientos, y a una guerra mucho m¨¢s. Se han creado muchas obras sobre esa tem¨¢tica, y se han organizado much¨ªsimas exposiciones. Las exposiciones en el extranjero son muy importantes para hacer llegar el dolor del pueblo ucranio: incluso durante la guerra, tenemos que creer en la fuerza del arte. Muchos de nuestros artistas comenzaron a crear con los objetos que ten¨ªan a mano: por ejemplo, hubo pintores que a?adieron casquillos de bala a sus obras.
P. ?Qu¨¦ cree que sentir¨ªa Putin si el legado art¨ªstico ruso estuviera en peligro?
R. Bueno, el patrimonio art¨ªstico en Rusia es muy grande, pero hay que decir que parte de ¨¦l ha sido robado de otros pueblos; es un imperio destructor de otras tradiciones. Mucho arte ucraniano ha sido robado, pero no solo es el arte, sino que atribuyen un origen ruso a muchos de nuestros artistas.
P. ?Como qui¨¦nes?
R. Alexander Bogomazov, Aleksandra Ekster... la lista es larga.
P. Es evidente que no ahora, pero en el futuro, ?cree que el arte ser¨¢ capaz de acercar ambos pueblos, que podr¨¢ tender un puente entre Rusia y Ucrania?
R. [Le sorprende la pregunta] Pues no s¨¦ qu¨¦ pasar¨¢ en... no s¨¦, en 50 a?os. Pero hoy veo muy improbable que ni el arte pueda. Debe quedar claro que esto no es una guerra de Putin, es una guerra de la gente de Rusia que se ha contagiado de sus ideas. Muchos niegan la mera existencia de Ucrania, as¨ª que lo veo complicado, la verdad.
P. ?Qu¨¦ obra de las de su museo cree que representa mejor la situaci¨®n actual ucrania?
R. Pues mira, si te soy sincera, llevo unos d¨ªas pensando en ello. Dir¨ªa que el tr¨ªptico sobre Babi Yar [barranco usado por los nazis en Kiev para perpetrar varias masacres], de Vasyl Ovchynnykov. Lo pint¨® tras la Segunda Guerra Mundial, y en los a?os cincuenta la URSS quer¨ªa destruirla, porque no estaba alineada con la ideolog¨ªa correcta. Pero se salv¨®. Representa a la gente antes de ser fusilada en aquel lugar. Me recuerda al Goya tard¨ªo.
P. ?El arte ucranio saldr¨¢ fortalecido despu¨¦s de esto?
R. Sin ninguna duda. Hoy el nuestro es un museo de marcos, no de cuadros. Pero ardo en deseos de desempaquetar y volver a colgar todo en las paredes.