La responsable de la serie ¡®F¨¢cil¡¯ responde al calificativo de ¡°nazi¡± lanzado por la autora de la novela: ¡°Que hable de la cantidad extraordinaria de dinero que ha cobrado¡±

Durante a?os, la guionista catalana Anna R. Costa ha ido labrando una consistente carrera que alcanz¨® la fama con la serie Arde Madrid, creada junto a quien entonces era su pareja, Paco Le¨®n. Durante a?os, la escritora granadina Cristina Morales ha ido escalando en la literatura espa?ola hasta la publicaci¨®n de su cuarta novela, Lectura f¨¢cil (2018), con la que gan¨® el premio Herralde y el Nacional de Narrativa. Sus caminos se cruzaron y Costa contact¨® con Morales para adaptar Lectura f¨¢cil, que describe la vida de cuatro mujeres con discapacidad intelectual que conviven en un piso tutelado de la Generalitat en Barcelona. El juego formal de la novela (escrita desde la mente de sus protagonistas, y en formatos como un fanzine anarquista, actas judiciales o mensajes de WhatsApp) era imposible de trasladar a una serie pensada para el gran p¨²blico. Hoy F¨¢cil se proyecta en San Sebasti¨¢n en la gala Movistar antes de su estreno en la cadena el 1 de diciembre. Un acto que se ha enturbiado por un art¨ªculo de opini¨®n en Rockdelux sobre la serie firmado por Crispina Morales (aunque con la cara de escritora) que retitulaba a la serie como Nazi, y que hoy ha recibido la respuesta de Costa.

Sentada en una mesa, encadenando entrevistas, Costa explica que no solo Morales hab¨ªa visto la serie y le hab¨ªa gustado, sino ¡°que propuso participar en el estreno aqu¨ª y en Madrid¡±. Ahora las cosas han cambiado: ¡°Ella se ha posicionado en un lugar, y ahora entendemos que ella no quiere formar del nazismo que ella define¡±. En la columna veraniega titulada Si te gust¨® el libro, te encantar¨¢ la serie, atacaba un posible blanqueamiento: ¡°Lo m¨¢s que se dice es que las regentas del mundo de la discapacidad son unas paternalistas pijas de Pedralbes¡±. Y ahondaba, tras cambiar el t¨ªtulo: ¡°En Nazi no se critica al establishment contempor¨¢neo de la discapacidad y la salud mental porque se pretende llegar al gran p¨²blico democr¨¢tico, a ese gran p¨²blico que dota a los servicios sociales de mesi¨¢nicos poderes de integraci¨®n en el capitalismo de mierda en que vivimos y que deliberadamente oculta la verdadera naturaleza de las trabajadoras sociales: polic¨ªas, desde el comisario que unta a los jueces hasta el suboficial que apalea a los manteros. ?Qu¨¦ buen t¨ªtulo, pues, Nazi, para una serie tan democr¨¢tica!¡±. A Costa lo que le duele no es la cr¨ªtica, sino el t¨¦rmino nazi: ¡°Conmigo que no lo relacione para nada, no tiene ese derecho. Puede criticar lo que quiera, pero no llamarme nazi¡±.

Costa explica que Morales ley¨® los guiones y vio la serie antes de la columna de Rockdelux. ¡°Me consta que los guiones no le gustaron, la serie s¨ª, la disfrut¨®. La novela se sostiene en cuatro mon¨®logos, y los personajes ni interact¨²an entre ellos. A m¨ª me interesaba ese punto de partida, y por eso le ped¨ª a Morales si me permit¨ªa coger su material y llevarlo a mi universo. A ella ahora le molesta el tratamiento del personaje de Nati, dice que est¨¢ ridiculizada¡±, describe la guionista y directora de los cinco episodios de la serie. ¡°Pero es que una cosa es la escritura, donde el lector crea sus im¨¢genes; y otra la pantalla, y ah¨ª hay que poner unas actrices a las que no les puedes encajar en rigideces. Necesito que el espectador se identifique y no conozco a nadie que se exprese de una manera r¨ªgida. Tambi¨¦n dice que le falta violencia institucional, y que los personajes que representan la instituci¨®n le parecen flojos¡±. Son esas ¡°pijas de Pedralbes¡±.

Alberto San Juan, que est¨¢ preparando la versi¨®n teatral, s¨ª ha sido m¨¢s fiel a la forma de Lectura f¨¢cil. ¡°Yo avis¨¦¡±, insiste Costa, ¡°que no iba a adaptarla, sino a inspirarme, y efectivamente llegamos a un pacto verbal y luego a un contrato¡±. La creadora recuerda su primera impresi¨®n al leer el art¨ªculo: ¡°Me dio rabia, me sent¨ª un poco decepcionada, y le escrib¨ª un correo electr¨®nico inmediatamente, en el que le dec¨ªa que por supuesto pod¨ªa decir lo que quisiera, pero que cre¨ªa que le faltaba conocimiento de causa, y ese conocimiento es saber c¨®mo se escribe, produce y dirige una serie. Que eso pod¨ªamos haberlo hablado antes, y que de lo que s¨ª pod¨ªa hablar es de la cantidad extraordinaria de dinero que ha cobrado por los derechos¡±. En F¨¢cil, las cuatro chicas con distintas discapacidades intelectuales han sido encarnadas por las ganadoras del Goya Natalia de Molina y Anna Castillo, la c¨®mica y actriz de teatro Coria Castillo y la actriz y guionista Anna Marchessi, la ¨²nica con discapacidad, y que en los ¨²ltimos a?os ha luchado por la normalizaci¨®n de la representaci¨®n de la discapacidad.