La afici¨®n ignora al Atl¨¦tico
El Betis gana 0-2 y desata un clamor de la grada contra la directiva colchonera
Los pocos seguidores del Atl¨¦tico que se decidieron a acudir al Vicente Calder¨®n vivieron una nueva decepci¨®n de un equipo que camina como alma en pena por la Primera Divisi¨®n y que hace ya demasiado tiempo s¨®lo le da disgustos. La afici¨®n termin¨® ignorando lo que suced¨ªa en el c¨¦sped, probablemente para no amargarse m¨¢s, y centr¨® sus cr¨ªticas en el presidente, Enrique Cerezo, y en la familia Gil, a los que pidi¨® su marcha del club. Y entre tanto, el Betis apareci¨® para llevarse un valioso triunfo que le acerca un poco m¨¢s a la Liga de Campeones.
El Atl¨¦tico disputaba contra el Betis unos de los partidos m¨¢s importantes de la temporada. No se jugaba un t¨ªtulo, ni clasificarse para una final o para una competici¨®n europea, por lo que luchaba el Atl¨¦tico era por mantener el respeto de su afici¨®n, que en la semifinal de Copa contra Osasuna tom¨® verdadera conciencia de lo que es esta plantilla y de sus posibilidades. Sin nada que hacer en la clasificaci¨®n, el Atl¨¦tico jug¨® como con desgana y curiosamente as¨ª cre¨®, s¨®lo en la primera parte, m¨¢s ocasiones que en los cuatro ¨²ltimos partidos juntos. Las m¨¢s claras de Fernando Torres, que no mete un bal¨®n en una piscina, y Velasco. Pero se encontraron con Doblas, que vive en estado de gracia, y todo qued¨® en nada. Y cuando Ibagaza logr¨® superar a Doblas vio c¨®mo un buen lanzamiento de falta se topaba con el larguero.
El Betis, clasificado para la final de Copa y que a¨²n lucha por estar en la pr¨®xima Liga de Campeones, supo aguantar los minutos m¨¢s inspirados del Atl¨¦tico y cuando m¨¢s confiado estaba le golpe¨® con dureza para devolverlo a su cruda realidad. Marcos Assun?ao sac¨® un c¨®rner y Oliveira, sin nadie que le vigilara, marc¨® de cabeza. La afici¨®n rojiblanca no aguant¨® m¨¢s y la volvi¨® a tomar con el palco, a los futbolistas los ha dejado ya por imposible. El Betis encontr¨® entonces los espacios que necesitaba Oliveira y el brasile?o se convirti¨® en una pesadilla para la defensa rojiblanca. Sergi evit¨® en la misma raya de gol que el Betis celebrara su segundo tanto, algo que no pudo hacer Leo Franco. Assun?ao lanz¨® una falta y Braulio, situado en la barrera, levant¨® los brazos para taparse la cara y cometi¨® un penalti absurdo. Oliveira marc¨® desde los 11 metros y el ¨¢nimo se volvi¨® a alterar en el Calder¨®n.
La tranquilidad con la que viv¨ªa el Betis se vio alterada por una acci¨®n desafortunada de Melli. Ibagaza puso un centro desde la derecha, el defensa b¨¦tico desvi¨® el bal¨®n y bati¨® a Doblas. Por sus propios medios el Atl¨¦tico es incapaz de marcar y necesita de agentes externos para poder festejar un gol. Antes pudo sentenciar el Betis en un magistral contragolpe, pero Joaqu¨ªn fall¨® en el mano a mano con Leo Franco. El t¨¦cnico del Atl¨¦tico, C¨¦sar Ferrando, decidi¨® introducir una variante t¨¢ctica que no mejor¨® en nada al equipo. Entraron Garc¨ªa Calvo, que se situ¨® como libre en una defensa de cinco, y Sosa, que alg¨²n d¨ªa sabremos para qu¨¦ ha venido a Espa?a, porque a jugar al f¨²tbol seguro que no, acompa?¨® a Luccin en el mediocentro. El resultado de este movimiento no debi¨® satisfacer a Ferrando, que retir¨® poco despu¨¦s a Luccin para que entrara Richard N¨²?ez, quien dio al ataque la movilidad que le hab¨ªa faltado durante todo el encuentro. Llegaron entonces las mejores oportunidades del Atl¨¦tico en la segunda parte, pero de nuevo Doblas fren¨® cualquier intento de empatar. El equipo rojiblanco jug¨® el ¨²ltimo tramo del partido ante la indeferencia de su afici¨®n, que se olvid¨® de pitar a los jugadores y prefiri¨® pedir a los due?os del club que abandonen la entidad.
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